Hola a todos, me gustaría contarte acerca de un gadget que ha capturado mi atención recientemente, un traductor inteligente. Ahora, si estás pensando: «¿Qué? ¿De eso se me va a hablar? ¿En serio?» déjame decirte, sí, en serio. ¿Y sabes por qué? Porque esta no es una simple traducción de Google o una de esas aplicaciones gratuitas que se quedan atascadas en las formas más básicas de un idioma. Estoy hablando del Timekettle X1 AI Interpreter Hub. Este dispositivo es un intérprete de 699,99 euros que no solo traduce, sino que escucha, entiende y responde. Es ciencia ficción en la vida real.
Por supuesto, a ese precio, es probable que te preguntes, ¿vale realmente la pena? ¿Es este traductor inteligente más efectivo que, digamos, un humano bilingüe altamente cualificado? ¿Es el Timekettle X1 un discurso de marketing elegante o una verdadera revolución lingüística y tecnológica? Pues, ¿quién mejor para averiguarlo que un ávido fanático de los gadgets, un eterno estudiante de idiomas y propietario de un blog sobre tecnología?
Después de poner el dispositivo a prueba en diferentes contextos, aquí está mi opinión.
Entendiendo el deseo de Timekettle
El Timekettle X1 promete ser un hub de traducción basado en inteligencia artificial. ¿El objetivo? Hacer que los obstáculos del lenguaje sean cosa del pasado. Pero, ¿por qué un dispositivo de este tipo sería útil? Bueno, imagina tener una reunión de negocios con un cliente que habla un idioma que no conoces. O pasar tus vacaciones en un país extranjero donde apenas puedes decir «hola». ¿No sería genial poder comunicarte de forma fluida y natural sin el lenguaje como barrera?
Diseño y funciones
A primera vista, Te encuentras ante un potente dispositivo con una gran pantalla táctil a color, botones de inicio y volumen, una conexión NFC para emparejarlo con otros traductores y un puerto de carga. Además, tiene una ranura para guardar auriculares especiales que vienen con él.
Ahora bien, los auriculares son una parte crucial del Timekettle X1, ya que permiten que el usuario escuche directamente las traducciones. El dispositivo analiza el audio de entrada, lo traduce y lo reproduce en nuestro idioma a través de los auriculares.
La forma en que usas el Timekettle X1 dependerá del modo que elijas. En el modo «Cara a cara», una persona habla en un idioma, la otra en otro idioma y cada una escucha la traducción en su idioma. Por otro lado, el modo «Escuchar y reproducir» permite a un único usuario escuchar la traducción mientras el altavoz del dispositivo reproduce la respuesta traducida. Finalmente, en el modo «Preguntar e ir», ambas personas hablan a través del dispositivo sin necesidad de auriculares.
Además, hay modos adicionales para uso empresarial, como la llamada por voz y la conferencia múltiple, este último permite conectar hasta cinco dispositivos para traducir hasta cinco idiomas simultáneamente.
¿Traducción confiable o confusión lingüística?
El Timekettle X1 soporta 40 idiomas y 93 acentos (como inglés británico o americano, español de España o de México), aunque para todos estos idiomas se necesita una conexión a internet permanente. Sin conexión a internet, solo puede traducir combinaciones de idiomas específicas que deben descargarse por adelantado.
Ahora bien, está promesa de traducción multilingüe suena emocionante, ¿verdad? Pero, como dicen, el diablo está en los detalles. Entonces, ¿cómo se comportó el Timekettle X1 en pruebas reales en diferentes idiomas y configuraciones?
Para la primera prueba, probé la traducción de inglés a español y viceversa con mi pareja (quien, por cierto, tiene un nivel C1 de inglés certificado). La experiencia resultó ser bastante fluida, con el dispositivo recogiendo bien nuestras voces, traduciendo con precisión y manteniendo un ritmo de conversación bastante aceptable.
La parte divertida llegó con nuestra segunda prueba: ver anime en japonés. Aquí, la experiencia fue… digamos, menos que perfecta. En las escenas con música de fondo, el intérprete tenía problemas para detectar las voces, lo que resultaba en momentos de silencio o traducciones erróneas. Además, la desincronización entre el diálogo y la traducción era un poco problemático.
De manera similar, ver charlas de TED y podcasts en otros idiomas produjo resultados mixtos. En algunas lenguas como el noruego y el polaco, la traducción era brusca o literal. Sin embargo, con chino, el desempeño fue excepcional. Podía ver los videos y entender la trama sin problema. Pero debo confesar que el retraso en el doblaje me hacía sentir atrasado en la conversación.
Aun así, el verdadero desafío llegó con la última prueba: usar el device sin conexión a internet. El rendimiento aquí fue decepcionante para decir lo menos. Ya sea traduciendo voces de inglés a español o viceversa, el dispositivo se esforzaba por entender y traducir correctamente sin una conexión en línea.
Y entonces, ¿vale la pena?
Como lo veo, el Timekettle X1 es ambicioso y prometedor, pero también caro para lo que ofrece. En términos de hardware, es robusto y de alta calidad. Los auriculares son cómodos y tienen un buen sonido. Sin embargo, el costo de 700 euros es bastante alto, especialmente porque el rendimiento del dispositivo fluctúa bastante y la traducción sin conexión es defectuosa.
En última instancia, aunque el concepto es innovador y el Timekettle X1 tiene el potencial de revolucionar la traducción, sigue siendo difícil de justificar para el usuario promedio. Para un ejecutivo de negocios que frecuentemente se comunica con compañeros que hablan diferentes idiomas, el Timekettle X1 puede tener sentido. Sin embargo, para la mayoría de nosotros, este dispositivo puede ser un gasto innecesario. Al final del día, sigo contando con mi amigable Google Translator o incluso mi querido DeepL, que son eficientes y, lo más importante, gratuitos.
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Fotos | Xataka
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Artículo original | Xataka