Netflix ha revolucionado la forma en que consumimos contenido. La plataforma se ha convertido en un sinónimo de maratones serios de series y películas que están a la vanguardia de la narración moderna. Pero, como en cualquier relación, llega un momento en el que uno se pregunta: ¿estamos llegando al final de algo? Con la reciente decisión de Netflix de retirar la mayoría de sus contenidos interactivos, son muchas las voces que se alzan para lamentar la pérdida de una forma de narrar que prometía cambiar nuestro vínculo con las historias.

Un vistazo al fenómeno de la interactividad

Cuando ‘Bandersnatch’ se lanzó en 2018, el mundo se volvió loco. Esa primera «película interactiva» fue un soplo de aire fresco para aquellos que buscaban algo más que una narrativa lineal. La premisa era simple: tomas decisiones que afectan la trama. Y ahí estaba yo, sentado en el sofá un viernes por la noche, sintiéndome como el rey del universo mientras elegía entre dos opciones. Cada clic se sentía como una jugada estratégica. ¿Debo hacer que el protagonista se suicide o que se vea involucrado en un conflicto con malas consecuencias? ¡Vaya presión!

¿Te has sentido alguna vez tan inmerso en un contenido que olvidaste que estaba viendo algo ficticio? Si no, entonces quizás no comprendiste el poder que tenía esta nueva forma de narración. Aunque, para ser honesto, he tenido momentos en los que he deseado tener una segunda opción en la vida real, como el día en que decidí probar una receta familiar que no salía bien. A veces, una pizca de interactividad sería un gran alivio.

¿Por qué Netflix está dando marcha atrás?

La reciente decisión de Netflix de reducir sus esfuerzos en el ámbito de los contenidos interactivos ha dejado a muchos con una serie de preguntas. Chrissy Kelleher, de Netflix, ha declarado que «la tecnología sirvió a su propósito, pero ahora está limitando» los esfuerzos de la compañía. ¿Qué significa esto para el futuro del entretenimiento interactivo? ¿Es una señal de que el público ha perdido interés, o simplemente es un giro estratégico hacia otras innovaciones tecnológicas?

No se puede negar que la tecnología ha avanzado rápidamente. Cuando se lanzó ‘Bandersnatch’, todos hubiéramos hipotecado nuestra casa para ver más narrativas de ese estilo. Pero a medida que el tiempo ha pasado, el brillo de la interactividad ha comenzado a desvanecerse en comparación con otros avances, como la inteligencia artificial (IA) y la realidad virtual (VR). ¿Es posible que estemos avanzando hacia un futuro donde la tecnología interactiva sea dejada de lado en favor de ejercicios más «tradicionales»?

La interactividad en auge y caída

A lo largo del tiempo, Netflix lanzó varios esfuerzos por mantener viva la chispa de la interactividad. Desde ‘El gato caco’ hasta ‘La flipante Opció-O-Rama del Capitán Calzoncillos’, lo hemos visto todo. Pero con el tiempo, muchos de estos programas comenzaron a ser olvidados, como esos viejos juguetes que se guardan en el rincón de la habitación. Uno se siente nostálgico de vez en cuando, pero la vida sigue adelante, ¿verdad?

Pero la noticia más impactante llegó con el anuncio de que solo cuatro títulos interactivos sobrevivirán: ‘Bandersnatch’, ‘Unbreakable Kimmy Schmidt: Kimmy contra el reverendo’, ‘Sobrevivir es el reto’ y su secuela con Ranveer y Bear Grylls. Se podría argumentar que el resto es historia… una historia que se está apolillando en el fondo de un archivo digital. Con cada eliminación, me siento un poco como si estuviera viendo a los sobrevivientes de una serie realmente mala ser eliminados uno a uno.

Y no puedo evitar preguntarme: ¿es el enfoque de Netflix en la IA el siguiente paso lógico o simplemente una ridícula intención de seguir la corriente? La decisión de reorientar los esfuerzos hacia la inteligencia artificial puede parecer un Cero a la Izquierda para algunos, pero para otros es un paso hacia adelante para la innovación.

Contenidos interactivos: un legado en peligro

Los contenidos interactivos podrían considerarse un tesoro escondido en la vasta biblioteca de Netflix. Aunque solo se presentan en una pequeña fracción de la plataforma, han demostrado ser innovadores en un mundo que ama las narrativas lineales. En algún lugar entre las decisiones que tomaron los espectadores y las ramificaciones narrativas, encontramos un enfoque fresco y atractivo.

Uno de los aspectos más importantes de la interactividad es que pone al espectador en el asiento del conductor. Eso está muy bien hasta que llega el momento en que compruebas cómo tu elección llevó a un desastre total. ¿Alguna vez has visto a alguien tomar una mala decisión en una película y gritar “¡No, no, no!” a la pantalla? ¡Eso somos nosotros con cada elección que hacemos en un contenido interactivo!

Sin embargo, parece que la nostalgia por estas experiencias se presentará una vez más, ya que pronto olvidaremos la ansiedad de elegir el próximo movimiento. Pero, ¡vamos! ¡No podemos olvidar lo que nos ofrecieron, aunque ahora parezca que ha quedado en el olvido!

¿Adiós a la interactividad o un nuevo comienzo?

Siempre he creído que las cosas suceden por una razón. Tal vez esta decisión de reducir los contenidos interactivos sea parte de un ciclo mayor. Puede que Netflix esté buscando algo más allá de la narrativa interactiva y esté invirtiendo en un futuro más impulsado por la IA. Hablar de escenarios en los que la inteligencia artificial pueda reescribir guiones en tiempo real suena emocionante, ¿no crees?

Imagínate que, en lugar de hacer clic en una opción, puedas interactuar con personajes e influenciar los diálogos. Sin embargo, eso viene con sus propios desafíos. Un mal algoritmo podría transformarse en un desastre narrativo y arruinar la magia de los cuentos. ¡Que alguien firme una cláusula de no responsabilidad justo aquí!

Reflexiones finales sobre la interactividad en Netflix

Si bien la experiencia de interactuar con historias se ha reducido a cuatro escasos títulos, queda duda sobre cómo influirá esto en el futuro del entretenimiento. Volviendo a esa noche en el sofá, con el control remoto en mano, me hace reflexionar sobre las historias que se perdieron.

Podríamos despedirnos de los caminos inciertos que ofrecían las decisiones del espectador, pero no sin recordar lo fascinante que fueron esos momentos. No sé tú, pero yo aprecio lo que ofreció ‘Bandersnatch’—la tragedia, la comedia y las decisiones impulsivas que tomé. Aunque el futuro de la interactividad en Netflix sea incierto, lo cierto es que siempre quedará un rincón en nuestros corazones para aquellos momentos en los que nos atrevimos a tomar el control… aunque solo fuera por un par de horas.

¿Quizás seremos testigos de un renacimiento? Solo el tiempo lo dirá, pero mientras tanto, me despido de las elecciones que me hicieron sudar en la oscuridad de la noche y espero, con un toque de optimismo, que algún día regresen, aunque sea en otro formato más emocionante. Por ahora, disfruta de lo que queda y recuerda que el mundo del entretenimiento siempre está evolucionando. ¡Hasta la próxima!