Cuando pienso en el CES 2015, me estremezco. Hace solo diez años, cuando entré en la sala repleta de tecnología brillante, sentí que estaba en el futuro. Recuerdo perfectamente estar rodeado de dispositivos que prometían transformar nuestra vida cotidiana. Pero, ¿qué ha quedado de aquel despliegue de innovación? ¿Algunas de esas maravillas han perdurado? ¿O se han convertido en meros espejos rotos de su potencial? Hoy nos embarcaremos en un viaje reflexivo a través de esos productos, explorando lo que se ha mantenido relevante, lo que se ha desvanecido y, tal vez, lo que merece una segunda oportunidad.

El desembarco de los teles OLED 4K: un amor a primera vista

En el CES de 2015, las pantallas fueron las verdaderas estrellas del espectáculo. Los televisores OLED 4K hacían su entrada triunfal. Recuerdo cómo, al ver una de estas maravillas, pensé en lo que sería ver mi serie favorita con esos colores vibrantes. ¿Realmente podría la tecnología hacer que la televisión fuera tan impresionante? La respuesta ha sido un rotundo sí.

  • Tendencia 4K: Una década después, no podemos dejar de notar que más de un hogar cuenta con televisores 4K. Aunque en un principio existía confusión sobre si llamar a estos modelos “4K” o “UHD”, han logrado afianzarse en el mercado, señalando que, al final, lo que importa son las experiencias que crean, no los nombres.

  • El fenómeno de la inteligencia: Con el tiempo, estos dispositivos no solo han mejorado en calidad de imagen, sino que también han evolucionado en características. Hablando de experiencias, ¿quién no ha lanzado un «¡guau!» mientras muestra a sus amigos un streaming en 4K? Esa es la magia del entretenimiento moderno.

La curva de la nostalgia

Sin embargo, no todo lo que reluce en el mundo de la tecnología mantiene su brillo. Un ejemplo perfecto de esto son los dispositivos de pantalla curva. En 2015, parecía que todo era «cool» si tenía una curva. Samsung hizo gala de su modelo curvado, el G Flex 2, una exhibición alucinante. Pero, seamos sinceros, aunque la primera impresión fue impresionante, la realidad era un poco diferente.

  • La práctica supera la estética: La gran verdad detrás de la tendencia de los dispositivos curvos es que, en la práctica, ofrecían escasas ventajas. ¿Quién necesita una pantalla curva en su móvil cuando la mayoría del tiempo tenemos que usarlo con una funda? Un par de años después, los consumidores demostraron que preferían las líneas rectas y funcionales.

Grabando la vida: ¿una necesidad o una moda pasajera?

Durante el CES 2015 se presentó el Narrative Clip 2, un diminuto dispositivo que prometía capturar nuestra vida en video, una belleza de 30 segundos a la vez. En ese momento, me imaginaba a mí mismo llevando este artefacto y siendo el «Steve Jobs» de la grabación personal. Pero, spoiler: no tuvo éxito.

  • La resistencia a ser grabados: Hay algo inquietante en la idea de grabar cada segundo de nuestra vida. Uno podría pensar que ser nuestro propio documentalista sería emocionante, pero pronto se vuelve una gran incomodidad. ¿Realmente queremos revivir los momentos más aburridos de nuestro día a día? Después de todo, la espontaneidad tiene su encanto.

Pantallas sin marcos: la revolución de Dell

Si hay algo que no se puede negar es que las pantallas sin marcos, como la Dell XPS 13, marcaron un antes y un después. Recuerdo la primera vez que vi uno de estos portátiles: era delgado, elegante y casi parecía magia que pudiera existir algo tan ligero. En serio, parecía un portal hacia un nuevo mundo de elegancia tecnológica.

  • Funcionamiento y diseño: Non solo eliminaron el marco, sino que también mejoraron la razón de ser de un portátil, haciendo que una pantalla de 13 pulgadas ocupase el mismo espacio que una de 11. ¿A quién no le gustaría un poco más de espacio en su vida? ¡Gracias, Dell!

Diez años después, todavía tengo mi Dell XPS 13. De hecho, mi hija ahora se lo lleva al colegio. Observarla usarlo es una mezcla de orgullo y nostalgia. ¿Cómo es posible que el tiempo pase tan rápido? La verdad es que todos nos hemos vuelto un poco más exigentes con nuestras herramientas tecnológicas.

Curiosidades y fracasos notorios

La feria de CES 2015 no solo dejó un legado de éxitos, también nos brindó productos que probablemente nos hicieron hacernos preguntas existenciales. Dispositivos como el ASUS ZenFone 2 y el Intel Compute Stick son ejemplos perfectos de cómo hasta los gigantes tecnológicos pueden tropezar.

  • Un amor no correspondido por el Intel Atom: Recuerdo cuando Intel trató de sorprendernos con su línea de chips Atom en el ZenFone 2, que decía «¡Soy diferente y mejor!» Sin embargo, ARM se mantuvo firme, y no hay nada más doloroso que una ruptura prematura. Con el tiempo, Intel abandonó sus esfuerzos en móviles. ¡Oops!

  • El optimismo de la IoT: La apuesta de Intel por la Internet de las Cosas fue otra de esas cosas que nos hizo soñar. Presentaron el Curie, que prometía llevar la conectividad a todos los rincones de nuestra vida. Por desgracia, no todo puede pegar. ¿Demoledora realidad, verdad?

El renacimiento y los perdedores en el limbo tecnológico

Mientras algunos productos naufragaron, otros han navegado hacia el éxito. ¿Quién no ama las unidades SSD portátiles? Samsung fue pionero con su SSD T1, un regalo del cielo para quienes buscan velocidad en un mundo de almacenamiento lento. Ahora, las SSD son tan comunes que a veces olvidamos que no siempre fue así.

Condensando todo esto, la experiencia del CES 2015 nos deja un importante recordatorio: la tecnología es un viaje, no un destino. A medida que avanzamos, encontraremos caminos llenos de maravillas y desilusiones.

Reflexiones finales: una década de cambios en Texanismo

En este recorrido por los últimos diez años, es fácil reirse de los productos que no triunfaron o de los que apuntaron muy alto y terminaron cayendo en picado. Sin embargo, también es posible reflexionar sobre cuánto hemos ganado.

La tecnología no solo ha cambiado, sino que ha adaptado nuestras vidas de formas que no podríamos haber imaginado al principio. De las teles OLED 4K que nos mantienen pegados en el sofá a la eliminación de los marcos en los portátiles, hemos recorrido un camino emocionante.

Así que al mirar al futuro y recordar el CES 2015, no podemos evitar preguntarnos: ¿Cuáles serán los next big things que se presentarán en el próximo CES? Mi pronóstico: un mundo donde la tecnología nos ayude a vivir mejor, en lugar de solo hacernos sentir fascinados. Al final del día, eso es lo que realmente queremos, ¿no?