Hola, hoy quiero hablarles de algo que ha hecho eco en mis pensamientos por días. ¿Sabían que el extraordinario escritor de ciencia ficción, China Miéville, nos ha regalado una reinterpretación contemporánea del «Manifiesto comunista»? Sí, tal cual lo leen, es ese galardonado escritor cuyo trabajo se destaca por su originalidad y claridad de pensamiento en la creación de mundos de fantasía.
Eh voilà… en vez de una nueva novela, Miéville nos presenta ahora «Un espectro recorre el mundo – Sobre el Manifiesto Comunista», publicado por Akal. ¿No es fascinante? Es, como si Miéville hubiera decidido por un momento apartar las gafas de la ciencia ficción y nos ha invitado a dar otro vistazo a ese antiquísimo panfleto escrito por Marx y Engels. Un viaje a las raíces de su ideología de izquierdas que siempre ha formado parte de su obra.
Pero, ¿por qué China Miéville y el «Manifiesto comunista» en el mismo plato? Bendita sea la serendipia. No están tan alejados como podríamos pensar estos dos mundos. Ambos son áreas de estudio que exploran la naturaleza humana y sus limitaciones y capacidades. Y, como persona comprometida con sus ideales, Miéville sabe algo de esto.
Entonces, ¿quién es este China Miéville?
Si somos honestos (como siempre me gusta ser), lo primero que pensé cuando me enteré de este raro matrimonio entre Miéville y el «Manifiesto comunista» fue «¿China qué?». Miéville es uno de los escritores más populares de lo que se llama «ciencia ficción new weird», famoso por sus singulares historias y un listado de premios literarios del cual cualquiera estaría orgulloso. Él podría ser dejado en el mismo saco con Tolkien, pero prefiere no hacerlo. Su obra raramente cumple con lo que podríamos considerar los estándares del «género».
Especialmente, la trilogía de Bas-Lag, es intrigante. Magia y tecnología steampunk conviven en estos livros, y su última obra, escrita en colaboración con Keanu Reeves, lleva con orgullo el violento título de ‘The Book of Elsewhere’.
«Un espectro recorre el mundo – Sobre el Manifiesto Comunista»
Dicho esto, después de leer «Un espectro recorre el mundo», te das cuenta de que tiene una afición singular por traer lo antiguo a lo moderno. En este texto de Miéville no solo se revisa, sino que se invita a la reflexión que el «Manifiesto comunista» aún tiene validez hoy día. No hay miedo por parte de Miéville en desafiar a sus lectores a romper ciertas ideas preconcebidas sobre este célebre panfleto y a la vez trae al presente preguntas necesarias para nuestra realidad contemporánea.
Este libro no va por los clichés. Aborda mitos como el supuesto rechazo comunista a la propiedad privada (una confusión común), o la creencia de que el comunismo está a favor de las dictaduras. No está destinado a ser una lectura ligera, sino un viaje a través de la historia del comunismo y su desarrollo y efecto en nuestra sociedad moderna.
La verdad es que nuestras percepciones del «Manifiesto comunista» están a menudo nubladas por prejuicios históricos y políticos. Lo interesante de este viaje con Miéville es que, en lugar de ignorar estos sesgos, él los reconoce y desmonta. Ni siquiera el «Manifiesto Comunista» queda intacto de sus críticas y la objetividad histórica no carece en este trabajo.
Por supuesto, este análisis del «Manifiesto comunista» no es un paseo en el parque. Este es un libro para aquellos que realmente quieren entender cómo esta antigua pieza de literatura ha llegado a ser lo que es hoy. Dicho esto, si te gustan los desafíos y estás dispuesto a poner a prueba tus creencias, deberías darle una chance a este libro.
Al final, este libro demuestra que el «Manifiesto comunista» sigue siendo relevante hoy. Así que, no importa tu ideología, este libro puede ofrecerte una nueva comprensión de un viejo texto. Quizás incluso te inspire a ver las cosas desde una nueva perspectiva. Como siempre digo, el cambio verdadero inicia con la comprensión.
Así que, ¿me uno a ustedes en leer algunas páginas de este viaje copiloteado por el galardonado novato China Miéville y los veteranos Marx y Engels? ¿Por qué no? ¡Basta de cháchara y a leer se ha dicho!