Cuando hablamos de música, es difícil no pensar en los artistas que nos han acompañado a lo largo de nuestras vidas, como Manuel Carrasco. Acabo de escuchar su nuevo sencillo «Pueblo Salvaje», y, si bien podría hacer una crítica musical clásica, prefiero empezar con una pregunta retórica: ¿cuántas veces has sentido que lo auténtico se pierde en este mundo digital? Si la respuesta es «demasiadas», entonces este artículo es para ti.

La visita de Manuel Carrasco a ‘El Hormiguero’

El otro día, mientras me preparaba un café (con mi taza de «Me ignoran, pero no me importa»), me topé con la aparición de Manuel Carrasco en El Hormiguero. Aún puedo visualizar su expresión de sencillez y sinceridad, contrastando con el bullicio habitual del programa. Allí, el cantante explicó el trasfondo de su nueva canción: un proyecto que lleva la misma etiqueta que su álbum venidero, «Pueblo Salvaje».

La mística de ‘Pueblo Salvaje’

Manuel Carrasco comenzó su charla reflexionando sobre el concepto detrás de «Pueblo Salvaje». En sus propias palabras, es «una vuelta al origen y a lo natural de la vida». ¿Recuerdas aquellos días en los que caminabas al aire libre, sin la preocupación de capturar el momento en una selfie? Para Carrasco, ese «Pueblo Salvaje» es el yo más profundo, el que todos llevamos dentro, libre de la contaminación que proviene de las redes sociales.

Esto nos lleva a una cuestión fundamental: ¿hemos perdido la conexión con nosotros mismos en la búsqueda de aprobación externa? La respuesta parece obvia, y el propio Carrasco no dudó en reconocerlo. Honestamente, a veces me siento como si estuviera atrapado en una carrera de ratones, persiguiendo «likes» en Instagram en lugar de disfrutar de un buen libro o una copa de vino.

La crítica a lo superficial en la sociedad actual

Durante la entrevista, Manuel Carrasco lamentó que «el poder está fuera de nosotros«. Este punto resuena con muchas de nuestras experiencias diarias. Desde el momento en que comenzamos una aventura y nuestra primera acción es tomar una foto en lugar de disfrutarla, parece que hemos sido educados para priorizar lo superficial sobre lo esencial.

Recuerdo una vez, en un viaje a la playa, cuando todo el mundo estaba más preocupado por sus publicaciones que por el sonido de las olas. ¡Incluso yo! Tal vez deberíamos plantearnos: ¿qué pasaría si un día, en lugar de postear, simplemente disfrutáramos del momento?

La peligrosa influencia de las redes sociales

La conversación entre Carrasco y Pablo Motos se tornó más intensa cuando el presentador agregó que «los músicos y escritores, más que crear cultura, ahora escriben para gustar en las redes». Esto se traduce en una cultura donde el algoritmo decide qué es bueno o malo, dominando nuestras realidades creativas. Como si cada expresión artística tuviera que pasar una especie de «prueba de popularidad».

Eso me trae a la mente un divertido episodio de mi juventud, donde me esforzaba por escribir poesía, y el único «feedback» que recibía era: «Eso no pega, deberías incorporar más referencias a memes». ¡Ah, la ironía de que los memes, generalmente humorísticos, se convirtieran en métricas de éxito!

Reflexiones sobre la autenticidad en la música

Hablando de autenticidad, me viene a la cabeza otra pregunta: ¿cuántos artistas realmente se atreven a ser sinceros en una era en la que ser «diferente» se vuelve un estándar? Muchos de ellos, como Carrasco, buscan regresar a lo genuino. En realidad, su sencillo «Pueblo Salvaje» no solo es una obra musical, sino una invitación a la introspección. Cuántas veces hemos sentido el impulso de ser algo que no somos, todo por encajar en un molde que no hemos diseñado.

Mientras conversaba sobre esto con una amiga, ella lanzó: «La vida no es un concurso, pero las redes te hacen sentir que sí». Y, en esencia, eso es lo que Carrasco está tratando de evocar en su música: la necesidad de reconectar con lo que realmente somos.

El papel de la música en nuestras vidas

Me gustaría resaltar un aspecto que a menudo pasamos por alto: la música como refugio y guía. En momentos de confusión o dolor, una canción puede recordarte quién eres realmente. En mi vida, he tenido fases en las que me he perdido, y la música se ha convertido en mi compañero más fiel.

Manuel Carrasco entiende bien este tema, y su música siempre ha reflejado un viaje personal. Al compartir su visión del «Pueblo Salvaje», él nos pide que reflexionemos sobre el ruido externo y sobreponernos a él.

Nuevas realidades y viejos problemas

Así como Facebook y Twitter nos han prometido «conectar con quienes amamos», Carrasco nos recuerda que a veces nos desconectamos de nosotros mismos. En este sentido, uno relativiza el término «conexión», ya que a menudo las conexiones virtuales nos alejan de las humanas.

Hablando de ello, pude notar que muchas de mis interacciones en línea han venido acompañadas de emojis, memes y breves comentarios de 280 caracteres, dejando a un lado las conversaciones profundas y significativas. ¡Cuánto valor hay en sentarse frente a alguien, mirarlo a los ojos y realmente escuchar! Aunque, honestamente, con la forma en que la atención se fragmenta actualmente, a veces parecemos estar más pendientes de nuestros teléfonos que de las personas a nuestro alrededor.

La esencia de la crítica musical

Finalmente, la crítica que se hace a la cultura actual, y en particular a la música, es que, gracias a las redes sociales, hemos reemplazado la creatividad con la obsesión por la popularidad. Como espectadores, es fácil caer en esta trampa y, como consumidores, también. Sin embargo, recordar la esencia de lo musical nos ayuda a distinguir el ruido del arte real.

La perspectiva que Carrasco ofrece sobre su nueva canción es un llamado a la acción: un recordatorio de que lo realmente importante radica en la autenticidad y lo genuino. Tal vez deberíamos hacer un esfuerzo consciente por dejar de lado las redes y volver a momentos como los de antes, tener conversaciones con nuestros amigos, familiares y, ¿por qué no?, con nosotros mismos.

Reflexiones finales y un llamado a la acción

Al final del día, la aparición de Manuel Carrasco en El Hormiguero y su nueva canción «Pueblo Salvaje» nos invitan a cuestionar el lugar que ocupan las redes sociales en nuestras vidas. Si simular nuestro interés en lo que es «popular» nos aleja de nuestra esencia, ¿vale realmente la pena?

Así que aquí está mi humilde consejo: la próxima vez que sientas el impulso de capturar un momento, detente un segundo. Tómate un respiro y pregúntate: «¿Qué es lo que realmente importa aquí?» Lo auténtico siempre tendrá más valor que cualquier «like» que puedas conseguir en lujosas redes sociales.

Recuerda: al final de todo, la música de artistas como Manuel Carrasco nos recuerda la importancia de la conexión, no solo con los demás, sino con nosotros mismos. Así que escuchémosla, no solo con los oídos, sino también con el corazón. ¡Porque de eso se trata realmente la vida!