Al aproximarnos al año 2024, el mundo del cine está lleno de sorpresas, giros inesperados y, para algunos, sufrimientos. Hoy vamos a hablar de ‘Joker: Folie à Deux’, una película que ha despertado mucha expectativa, pero que se enfrenta a un complicado panorama tras su estreno. Así que, ponte cómodo, quizás con un poco de palomitas, que aquí viene una historia llena de drama, tensiones creativas y un toque de humor.
El contexto inicial: un éxito abrumador
Para entender el descalabro que ha sufrido ‘Joker: Folie à Deux’, veamos primero el contexto. La primera entrega de ‘Joker’, lanzada en 2019, fue una sensación en taquilla. Con Joaquin Phoenix brillando en el papel del Joker, la película recaudó más de mil millones de dólares, convirtiéndose en la película con clasificación R más exitosa de la historia… hasta que Deadpool y Logan decidieron entrar en la disputa. Si bien el contenido era oscuro y a menudo incómodo, la historia resonó en el público. ¿Quizás todos tenemos un poco de Joker en nuestro interior? O al menos, en esas tardes de desasosiego frente al televisor.
Recuerdo que cuando se estrenó la primera película, fui a verla con unos amigos. Al salir del cine, el ambiente era completamente electrizante. Todos hablaban sobre la actuación de Phoenix, la dirección de Todd Phillips, y cómo logró dar un nuevo enfoque al personaje icónico de DC. Fue un momento de cine verdaderamente transformador. Nadie esperaba que una cinta de cómics pudiera tocar temas tan profundos y relevantes sobre la sociedad moderna.
La montaña rusa de ‘Folie à Deux’
Sin embargo, en el segundo acto de nuestra historia, las cosas se complican. ‘Joker: Folie à Deux’ llegó a las pantallas con altas expectativas, pero su estreno no fue el que todos esperaban. En medio de un ambiente tenso, comenzaron a emerger informes sobre los problemas en la producción. El director Todd Phillips y los líderes de DC, James Gunn y Peter Safran, fueron protagonistas de una serie de fricciones que impactaron en la película.
¿A quién le suena eso de «soy el capitán de mi propio barco»? Parece que Phillips tomó esa frase al pie de la letra al rechazar todo tipo de interferencia en su trabajo. Decidió distanciares deliberadamente del universo DC, algo así como intentar hacer una ensalada sin un solo ingrediente verde. Esta decisión no sólo se notó en la narrativa, sino también dejó a muchos fans rascándose la cabeza, preguntándose si aún estaban viendo un film de DC o una especie de misterio independiente.
La falta de conexiones: ¿Traición a los fans?
La primera ‘Joker’ contenía elementos que resonaban con los fanáticos: referencias al canon de DC y una atmósfera que evocaba Gotham. Pero en la secuela, Phillips optó por dejar de lado esas referencias, reduciendo la conexión a un mero cameo del futuro Dos Caras. Vaya, eso le dejó a muchos fans sintiéndose un poco abandonados, como cuando tu mejor amigo elige a un nuevo grupo en la secundaria.
Una de las líneas más impactantes de la película —que me hizo pensar en la multitud de estos abandonos— es cuando Arthur Fleck, interpretado nuevamente por Joaquin Phoenix, exclama que siente que el Joker no existe, sino que solo desea ser él mismo. ¡Hablando de una crisis de identidad! Lo irónico es que este mensaje parece haber “ahuyentado a la manada” en las salas de cine. Imagínate a un grupo de fans emocionados, solo para salir sintiéndose un poco traicionados. Eso es, más o menos, lo que la gente comenzó a expresar en redes sociales y foros.
La ruptura con la alta dirección
Si pensabas que la historia no podía volverse más intrigante, espera a escuchar que Todd Phillips se encontró en medio de un escándalo de conflictos con la alta dirección de Warner Bros. La compañía, renovando su enfoque de futuras producciones, infundió aire fresco en la dirección creativa, llevando adelante a James Gunn como uno de sus arquitectos. Phillips se comprometió a quedarse lejos de las interferencias directivas, pero eso no detuvo a Gunn de dejar claro que ‘Folie à Deux’ no fue la última película de Phillips para DC. Este tira y afloja fue un claro ejemplo de la lucha por el control creativo en un entorno cada vez más competitivo.
¿No lo ves? Es como si dos equipos de fútbol se enfrentaran, cada uno intentando demostrar quién tiene el mejor juego estratégico. En lugar de unirse y crear algo épico, resultaron disputándose el balón, mientras los espectadores (es decir, los fans, en este caso) se sentían más confundidos que nunca.
La fe de uno en los altos sueldos
Otra parte dramática de esta historia son los sueldos desmesurados. Todd Phillips y Lady Gaga cobraron 20 millones de dólares, casi un cuarto del presupuesto total de la película. En un momento donde Warner vivía cambios turbulentos, uno se pregunta: ¿realmente era necesario esos gastos astronómicos?
Personalmente, me he sentido un poco indignado a veces al ver a actores cobrar cifras exorbitantes por trabajos que parecen, un poco, fuera de lugar. Y me pregunto, ¿qué tal si esos millones se reinvierten en nuevos talentos? O incluso, en mejores efectos especiales. Después de todo, no se trata solo de lucir bien, sino de contar una buena historia.
Un filme que pone en duda su lugar
El remolino de decisiones erróneas de producción culminó en una falta de interés palpable por parte del público. Si bien algunos pueden argumentar que la valiente decisión de alejamiento del estilo convencional de las películas de superhéroes debería ser aplaudida, otros sienten que la estrategia fue un desastre total. Es como intentar hacer un pastel de chocolate sin chocolate. Puede que salga un parche comestible, ¡pero no será lo que esperabas!
A medida que se desvanecen las luces del estreno y se ven los resultados en la taquilla, la serie de decisiones tomadas durante la producción son recordadas como un ejemplo de lo que puede salir mal cuando se intenta innovar sin tener en cuenta a los fans. A veces, la lección más dura es la que viene de la realidad: debemos escuchar al público.
La crítica al estrellato del género superheroico
La caída de ‘Joker: Folie à Deux’ ha desatado un conversación interesante sobre el estado actual del género superheroico. Algunos críticos argumentan que esta película debería haber sido un enfoque fresco y distintivo en un ámbito dominado por historias de superhéroes cada vez más predecibles. Sin embargo, Warner no logró cimentar la secuela como un proyecto completamente separado del universo DC, lo que provocó una crisis de identidad tanto para la película como para su público.
Con el reciente auge de las películas de superhéroes, uno se puede preguntar: ¿Estamos cansados de ver siempre las mismas historias?. Personalmente, he llegado a disfrutar de un buen blockbuster, pero a veces siento que me llevan en un viaje sin rumbo fijo, como cuando te subes a un autobús, sin saber a dónde ir.
Reflexiones finales: ¿Qué nos queda de todo esto?
Aunque ‘Joker: Folie à Deux’ ha hecho que muchos se cuestionen su valor y se sintieran decepcionados, es importante recordar que en la industria del cine siempre habrá altibajos. Algunas películas resonarán con nosotros, mientras otras terminarán en el limbo de la mediocridad. Aunque esta secuela no haya logrado capturar la magia de su predecesora, nos ofrece un claro recordatorio sobre cómo el arte es subjetivo y, en última instancia, está destinado a resonar de manera diferente para cada espectador.
Así que, antes de apagar la luz y retirarte a tu sofá después de leer esto, reflexiona sobre lo que esperas de tus películas favoritas. A veces, puede que lo que necesitamos es un poco más de cuidado en lo que elegimos ver. Y así, con una pizca de ironía, podemos aprender a disfrutar de todo un poco, incluso cuando significa una caída en la taquilla.
Al final del día, ¿no es eso lo que realmente importa? Disfrutar de las historias tal como son, incluso cuando las cosas no salen como planeamos.
¿Y quién sabe?, quizás en el camino hacia el año 2025, tengamos una nueva historia gloriosa que nos sorprenda a todos. ¡La sala de cine siempre está abierta!