En un mundo donde los derechos de los animales están comenzando a ser reconocidos y valorados, el papel de las fuerzas del orden se vuelve crucial. Recientemente, un grupo de agentes de la Policía Nacional, la Guardia Civil y policías locales ha hecho eco de una importante preocupación. Y sí, han hecho esto no juntos con gritos de sirena, sino con una reunión seria y constructiva con el Ministerio del Interior. ¿El motivo? Aumentar la formación relacionada con los derechos de los animales para estos agentes. Este paso es fundamental para asegurarse de que todos ellos sepan cómo actuar en situaciones de maltrato, rescate, o protección de mascotas en emergencias. ¿No es un alivio saber que quienes están en la línea frontal de la seguridad pública también se están preocupando por nuestros amigos de cuatro patas?
Una propuesta desde el corazón: la voz de los agentes
La voz de esta iniciativa se encuentra en Eduardo Justa, presidente de la Asociación de Policías por la Defensa de los Animales (APDA). Con un enfoque que no deja lugar a dudas, Justa señala: “No sirve de nada crear normas si quienes la tienen que aplicar no las conocen bien”. En un sentido, esto es tan obvio como que el cielo es azul, pero sorprendentemente se ha dejado de lado por mucho tiempo. La APDA, que aglutina a unos cien agentes de distintos cuerpos —nacionales y autonómicos—, ha propuesto incluir un tema relacionado con el derecho animal desde la base de la formación policial.
Imaginen por un momento a futuros policías aprendiendo no solo a detener a un delincuente, sino también a realizar un rescate de un perro atrapado en un arbusto porque, bueno, ha tenido un día de esos. Es vital que desde el inicio de su carrera, los aspirantes a convertirse en policías tengan en su temario cuestiones esenciales sobre la protección de los animales. La pregunta es: ¿qué tan lejos estamos de lograr que esto sea una realidad?
Cambiando las reglas del juego
La APDA recuerda que los temarios de formación policial evolucionan con la sociedad. ¿Sabían que hace un tiempo se incorporó un tema sobre derechos LGTBI en las oposiciones? Esto sucedió después de la aprobación del matrimonio igualitario. Ahora que se ha aprobado la ley de bienestar animal, es más que lógico que suceda algo similar en el ámbito de la formación policial. Justa menciona un ejemplo muy relevante: en La Rioja, ya se incluye este requisito para la Policía Local. ¿No sería increíble que este modelo se replicara en todo el país?
Simplemente imaginen a los agentes abordando situaciones en la calle, sabiendo que pueden hacer la diferencia para un animal que sufra en un coche caliente. ¡Eso es poder! De acuerdo con Justa, no hay lugar a dudas de que es crucial que todos los agentes, no solo los del Seprona, estén familiarizados con la ley de bienestar animal y otras normativas sobre maltrato animal. ¡Menos mal que no se requiere formar parte del “Club de los Animales Rescatadores” para hacerlo!
Entre la falta de información y la desesperación
Pero aquí viene la parte complicada; hasta ahora, muchos de los agentes carecen de la formación específica necesaria para manejar situaciones que involucran a animales. Esto, sin duda, puede resultar en dificultades para aplicar correctamente la ley. Imaginen la frustración de un ciudadano que multa a un dueño de perro irresponsable, solo para oír al agente decir que “no está muy seguro de qué hacer”.
Esta falta de formación no solo genera confusión, sino que también alimenta una sensación de impunidad entre quienes maltratan a los animales, sabiendo que tal vez no habrá consecuencias. El desconocimiento generalizado de las normativas puede dar pie a diversos problemas, y lo que se busca aquí es educar desde la raíz. Como bien dice Justa, “no tiene sentido que recibas un trato distinto dependiendo de la sensibilidad y empatía de la persona que te atienda”. ¡Toma fenómeno!
Un paso hacia adelante, pero ¿será suficiente?
La reciente reunión entre los miembros de la APDA y representantes del Ministerio del Interior es, sin duda, un paso hacia adelante. Me imagino a los representantes del ministerio tomando notas como si estuvieran en un exámen, quizás preocupados por la responsabilidad que tienen en sus manos. María Dolores Gimeno Durán, teniente coronel de la Guardia Civil, y José Antonio Puebla, comisario de Policía Nacional, escucharon atentamente las inquietudes de la asociación. Se mostraron receptivos ante la propuesta, aunque eran conscientes de la amplia normativa ya exigida a los opositores.
Este aumento en la formación especializada es fundamental, pero también planteo la pregunta: ¿serán suficientes estas medidas para cambiar una cultura enraizada en el maltrato animal? ¿O solo serán acciones simbólicas? La APDA ha estado trabajando desde 2015 para concienciar a los agentes sobre la importancia de la sensibilidad con los animales y la biodiversidad. ¿Cuánto tiempo más deberá transcurrir para que veamos un cambio real?
Más allá de los titulares: la importancia del cambio cultural
Vamos a ser honestos: el cambio no ocurre de la noche a la mañana. Necesitamos un cambio cultural que fomente el respeto hacia todos los seres vivos. No se trata solo de leyes, sino de valores. Cada vez que una historia de maltrato animal sale a la luz, nuestros corazones se quiebran. La angustia que sentimos ante una injusticia debería trasladarse a una acción colectiva. Al final del día, todos queremos un mundo donde los animales no sean simplemente accesorios, sino miembros valiosos de nuestra familia.
¿Acaso no hemos tenido suficiente? ¿No es nuestra responsabilidad asegurarnos de que aquellos que proteção nuestra sociedad también protejan a nuestros amigos peludos? La formación a los cuerpos de seguridad es solo una parte de la ecuación, la otra es que todos, como sociedad, mantengamos nuestras voces activas. Si de algo me he dado cuenta, es que cada acción cuenta, y cada voz puede hacer eco.
Reflexionando hacia el futuro: un llamado a la acción
Para cerrar este capítulo, quiero dejar una pregunta en el aire: ¿cómo podemos, como ciudadanos, contribuir a que nuestros agentes tengan mejor formación en derechos de los animales? Hay muchas formas de involucrarse: desde prestar atención a los cambios propuestos en la legislación, apoyar a organizaciones como la APDA, hasta educar y concienciar a nuestro círculo cercano sobre la importancia del respeto hacia los animales.
A medida que avanzamos hacia un futuro donde los derechos de los animales sean respetados y promovidos, no perdamos de vista que son los pequeños esfuerzos los que cuentan. Entonces, la próxima vez que veamos un agente interaccionando con un animal, no olvidemos la importancia de la empatía, el conocimiento y la formación.
El cambio está al alcance de nuestra mano. Juntos, podemos asegurar que nuestras fuerzas de seguridad no solo estén preparadas para enfrentar situaciones normales, sino también para ser defensores apasionados de aquellos que no pueden hablar por sí mismos. ¡Sigamos adelante hacia un futuro donde todos, humanos y no humanos, puedan coexistir en armonía!
Y así, entre la duda, el rayo de esperanza y el compromiso colectivo, la rueda comienza a girar hacia un mundo donde los derechos de los animales son parte de nuestra cultura. ¡Por los animales, por la justicia y por un futuro mejor!