La historia tiende a ser un gran ventilador que sopla polvo sobre aquellos relatos que, a pesar de su crucial importancia, acaban en el olvido. ¿Alguna vez has sentido que tu historia no es suficiente? Que tus aportaciones, por valiosas que sean, no se cuentan con el peso que merecen. A muchos de los cubanos que lucharon en la guerra civil española les debió suceder algo muy parecido. Pero, afortunadamente, el cineasta canario Miguel G. Morales ha decidido remover ese polvo y arrojar luz sobre estas figuras olvidadas con su documental Escuchar la sombra.

En una época donde las luchas por la justicia social resurgen en todo el mundo, el documental de Morales es un faro en la oscuridad de la ambigüedad histórica, un recordatorio de que cada pueblo tiene un papel en la defensa de la humanidad.

La historia detrás de ‘Escuchar la sombra’

La premisa de Escuchar la sombra es tan simple como poderosa: los cubanos que cruzaron el océano para unirse a las Brigadas Internacionales en defensa de la II República Española. No eran simplemente soldados, eran vencedores en su espíritu, a pesar de lo que la historia convencional nos ha contado. Miguel G. Morales se adentra en esta historia durante tres años de ardua investigación y, a través de su trabajo, nos ofrece un tesoro visual sin precedentes, con un 80% de imágenes inéditas.

Recuerdo la primera vez que vi un documental que cambió mi perspectiva. Como espectadores, a veces pensamos que ya lo hemos visto todo. Pero este documental, con un enfoque fresco y un toque de poesía, logra que los crujidos de la historia retumben en nuestro interior. Morales menciona que esta película no se propone ser una obra historiográfica; más bien, es como un ensayo visual, un canto a aquellos que sacrificaron su vida sin buscar reconocimiento.

La revolución femenina en el relato histórico

Una de las características más destacadas de Escuchar la sombra es el papel preponderante que las mujeres desempeñaron durante la guerra civil. Es fascinante pensar en cuántas veces las narrativas históricas han eclipsado sus voces. “Me interesaba reflejar a las líderes que había en ese momento”, enfatiza Morales, recordándonos que la historia de la guerra civil no se trató solo de héroes guerreros, sino también de heroínas que lucharon por la libertad y la justicia.

Cuando escuché sobre la invisibilidad de estas mujeres en la narrativa histórica, pensé en mi propia vida. A menudo, las voces femeninas quedan relegadas al silencio, como si sus contribuciones no fueran lo suficientemente importantes. Pero la verdad es que, como también nos recuerda la película, no hay verdadero avance social sin la participación activa de las mujeres.

La investigación detrás de la historia

Cualquier historiador te dirá que la historia es solo tan buena como la investigación que la sustenta. En el caso de Morales, su labor de recopilación de información estuvo marcada por una búsqueda incansable en los archivos. Fue un obrero de las imágenes que, valiéndose de su conexión con expertos y materiales inéditos, logró dar vida a relatos apagados.

Desde la Universidad de Nueva York hasta la Filmoteca de Catalunya, Morales exploró fuentes que muchos considerarían olvidadas. ¿Te imaginas pasar horas y horas rebuscando entre montañas de documentos y fotografías? Es un trabajo arduo que solo puedo describir como un viaje hacia el pasado, un intento casi personal de recuperar lo que el tiempo ha querido borrar.

Reconocer a los olvidados

En su aclamado documental, Morales se centra especialmente en los cubanos que dejaron su hogar y, a pesar de sus condiciones adversas, se unieron a la lucha. La cifra es asombrosa: se estima que aproximadamente 1.400 cubanos se unieron a la lucha, un número notable teniendo en cuenta que el país era en ese momento una colonia española. Esta realidad hace que sus contribuciones se sientan aún más significativas, ya que lucharon por un ideal que no era propio, pero que creyeron que merecía ser defendido.

Morales confronta la clara desigualdad en la narrativa histórica, marcada por el hecho de que EUA tenía una mayor representación en los relatos sobre las Brigadas Internacionales. Las historias de los brigadistas cubanos no solo merece ser escuchadas, sino que tienen un peso simbólico en el contexto actual de lucha contra el fascismo en el mundo.

Más allá de la guerra: un mensaje universal

Una de las frases más impactantes en el documental proviene de un combatiente cubano: “Nosotros íbamos a luchar por la humanidad.” No se trata solo de una declaración en un contexto histórico; es un recordatorio poderoso de que hay una lucha constante por valores que, a veces, parecen perderse en el ruido del presente.

Como espectadores, quizás hemos experimentado momentos en los que nos sentimos impotentes. Es en esos momentos cuando historias como la de los brigadistas cubanos resuenan, al mostrarnos que cada acción cuenta. La lucha por la justicia, la igualdad y la dignidad humana no es solo un ideal romántico; es una responsabilidad que todos compartimos.

El contexto actual y su relevancia

En un mundo donde volvemos a ver el resurgimiento de ideologías autoritarias, Morales se pregunta abiertamente sobre la pertinencia de revivir relatos de lucha. “Ahora mismo, en todo el planeta, el fascismo se está apoderando de todo”, dice convencido. A medida que vemos cómo se repiten las lecciones del pasado, es fundamental que historias como Escuchar la sombra tengan su oportunidad de brillar, no solo para honrar el sacrificio de quienes nos precedieron, sino también como un llamado a la acción.

El proceso de creación del documental

La creación de un documental no es un camino pavimentado. Un proyecto como Escuchar la sombra necesitó el apoyo de diversas instituciones, así como de la colaboración de un equipo diverso en La Habana y las Islas Canarias. Desde la dirección de producción hasta la música, cada elemento se unió para contar una historia plural y rica en matices.

Además, hay un hermoso simbolismo en el vínculo que Morales ha desarrollado con Cuba, a través de sus raíces familiares y su formación académica. ¿No es curioso cómo las historias personales pueden entrelazarse con grandes relatos históricos? Esto le ha permitido crear una atmósfera en la que las imágenes, los sonidos y los testimonios construyen un relato cautivador.

La importancia de las imágenes

Uno de los aspectos más destacados de Escuchar la sombra es el uso de imágenes inéditas. Estas capturas son más que documentación; son relatos en sí mismas. Cada foto, cada video, cuenta una historia de resistencia y valentía. Morales ha logrado, a través de su investigación, rescatar y dar voz a estos momentos que habían permanecido a la sombra, nuestras sombras.

Así, el director se convierte en un “catalizador de sentido”, como él mismo lo describe, devolviendo a las imágenes su lugar en la historia, y, por ende, a los cubanos que fueron parte de ella.

Conclusión: un homenaje a la memoria colectiva

En un tiempo donde somos bombardeados con información y noticias a cada minuto, es vital recordar y valorar las historias que nos han forjado. Escuchar la sombra no solo es un homenaje a los brigadistas cubanos, sino una invitación a reflexionar sobre nuestro papel en el mundo actual.

La lucha por la humanidad es una constante, y aunque los tiempos cambien, el latido de esas historias siempre regresará a nosotros. Morales nos recuerda que, aunque algunas voces puedan ser opacadas, nunca están verdaderamente vencidas. Este documental es un acto de resistencia—y también de amor.

Así que, ¿estás listo para sumergirte en la historia de aquellos que se negaron a ser olvidados? Como hemos aprendido de esta conmovedora película, cada historia cuenta, y es nuestra responsabilidad asegurarnos de que se cuenten.