La historia del champán está llena de anécdotas de celebraciones, burbujas chispeantes y un toque de lujo. Pero, en medio de todo este esplendor, hay un nombre que destaca: Krug. No hay que ser un sommelier para saber que esta maison francesa es sinónimo de excelencia. Hoy nos adentraremos en la fascinante transformación de Krug, que no solo preserva su herencia, sino que se reinventa constantemente. Así que, ¡abramos una botella (o dos) y acompáñame en este viaje burbujeante!

La nueva bodega de Krug en Ambonnay: un guiño al futuro

Recientemente, Krug inauguró su nueva bodega en Ambonnay, una pequeña localidad en la región de la Champagne. Si antes pensabas que una bodega era solo un lugar donde se almacenaban barricas de vino, ¡prepárate para cambiar de idea! Esta bodega, moderna por fuera y tradicional en su esencia, es un testamento tanto a la visión de su fundador, Joseph Krug, como a la determinación del equipo actual de mantener viva su legado.

La enóloga jefa, Julie Cavil, describe esta transformación mejor que nadie: «Hemos cambiado todo para que nada cambie». Esa frase, aunque un poco enigmática, plantea una realidad a la que muchos nos enfrentamos. ¿Cuántas veces hemos cambiado muebles de lugar en nuestra casa, pero al final la esencia sigue siendo la misma? La modernización de la bodega ha sido un proceso de siete años, y parece que fue una tarea titánica. Sin embargo, aquí está Krug, con una bodega que hace que la antigüedad y la modernidad coexistan de manera espectacular.

El Clos d’Ambonnay: una joya culinaria

Ahora, hablemos de Clos d’Ambonnay, una de las mayores joyas de Krug. Con solo 7,000 metros cuadrados de viñedos, se producen a mano alrededor de 15,000 botellas al año, y lo mejor de todo: ¡cada una de ellas cuesta 3,000 euros! Quizás en este momento, estés preguntándote si vale la pena o si simplemente es champagne para las élites. Apoco que si tienes la oportunidad de degustar una, simplemente cederías ante su sabor celestial; ¿verdad?

Krug se esfuerza por producir vinos que reflejen la esencia de la tierra. Utilizando un 100% de Pinot Noir, este vino no solo es raro, sino que también encarna el arduo trabajo y la dedicación de quienes están detrás de él. No puedes evitar maravillarte de cómo una pequeña parcela puede generar un producto tan increíble.

Innovaciones y métodos: la magia detrás de las burbujas

En la nueva bodega, el proceso de producción pasa por varias etapas que incluyen el prensado, la fermentación y el embotellado. Un sistema innovador diseñado para mantener la calidad, a la vez que respeta el legado de años y la inclusión de las variedades Pinot Noir, Meunier y Chardonnay. Es como el perfecto equilibrio en una receta familiar que no te atreves a tocar, pero que aún así encuentras formas de modernizar.

Cada año se producen botellas de Grande Cuvée, una obra maestra que representa cerca de 600,000 botellas anuales, de las cuales medio millón son Grande Cuvée. Y a mí, como amante de las burbujas, me agrada saber que cada edición puede contar con hasta 300 vinos de distintas añadas, ensamblados con maestría.

¿Qué tal si comparáramos esto con la música? Julie compara la producción de champán con una orquesta sinfónica. «Grande Cuvée es la misma música interpretada por distintos músicos». Puede que no tengamos a Beethoven al mando, pero cada año se presenta una nueva sinfonía de sabores.

La historia familiar y el legado de Joseph Krug

¿Sabías que la bodega que existía antes de la nueva inauguración estaba en la residencia familiar de los Krug, en el centro de Reims? ¡Casi pone la piel de gallina pensarlo! Ahí, en un entorno familiar, la historia se entrelaza con los recuerdos de Olivier Krug, quien ahora se encuentra a cargo de la dirección de la maison, tras haber viajado por el mundo en busca de sus “krug lovers”.

Olivier, el mayor de cinco hermanos, confiesa que su padre lo mandó a recorrer el mundo para aprender sobre el amor por el champán. Es un poco como cuando tus padres te dicen que salgas a “ver mundo” antes de tomar decisiones importantes. Eso sí, su “mundo” estaba lleno de vinos y experiencias culturales que abrieron puertas a nuevos mercados, especialmente en Japón, donde hoy en día representa el 30% de sus ventas.

Nuevos lanzamientos: variedades que conquistan el paladar

Si hablamos de novedades, es imposible no mencionar el lanzamiento de la edición 172 de Grande Cuvée y la ** edición 28 de Krug Rosé**. ¿Quieres impresionar a tu pareja en una cena elegante? ¡Sírvele uno de estos champanes!

La edición 172 es particularmente fascinante, compuesta de 146 vinos de hasta 11 años diferentes. Con un 44% de Pinot Noir, 36% de Chardonnay y 20% de Meunier, este champán se puede disfrutar con una amplia gama de platos, desde jabugo hasta tarta tatin. 314 euros por esta experiencia, pero sería un delito no probarla en algún momento importante de la vida. ¿Acaso no merece un brindis?

Por otro lado, el Krug Rosé edición 28 cuenta con 32 vinos de seis años diferentes y se recomienda disfrutar con foie gras o cordero. ¡Definitivamente no es para servirlo con el postre! Con un precio de 450 euros, no es el champán que tomarías en un picnic al aire libre, a menos que quieras dejar a tus amigos boquiabiertos.

Reflexiones finales sobre el legado de Krug

El viaje de Krug es, sin duda, una reflexión sobre la importancia de fusionar la tradición con la innovación. La maison ha encontrado formas de adaptarse al cambio climático y modernizar sus instalaciones sin perder la esencia de lo que significa ser Krug. Al final del día, somos un poco como el champán, ¿no? En la vida, tenemos nuestros momentos de efervescencia y también esos momentos planos; la clave es cómo los manejamos.

En un mundo que avanza a pasos agigantados, donde todo se siente efímero, hay algo reconfortante en saber que Krug está comprometido a seguir produciendo champán de excelencia por siglos. ¿Te imaginas estar aquí dentro de 100 años celebrando con una botella de Krug guardada desde hoy? Como diría Joseph, «el mejor champán que pudiera ofrecer cada año».

Así que la próxima vez que levantes tu copa, recuerda la historia que hay detrás de cada burbuja, el esfuerzo de generaciones y un legado que sigue vivo y vibrante en cada botella. ¡Salud! 🍾