¿Alguna vez te has preguntado qué pasaría si una de tus aplicaciones favoritas desapareciera de tu teléfono? Imagina el horror de abrir TikTok y que, en vez de un divertido video de un gato, solo encuentres un triste mensaje que dice: “Lo siento, esta aplicación ha sido prohibida”. Bueno, eso es exactamente lo que le podría suceder a TikTok en Estados Unidos muy pronto. Si como yo, eres de los que pasan horas navegando por videos de bailes absurdos, tutoriales de cocina y secretos de moda, sigue leyendo, porque este tema apenas comienza a calentar.

La espada de Damocles sobre TikTok

El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha respaldado una ley que podría obligar a TikTok a cerrar sus operaciones en el país antes del 19 de enero. Genial, ¿verdad? Es como si le dijeran a una adolescente que su madre va a revisar su teléfono en cualquier momento. Esa ansiedad constante y el miedo al desastre inminente.

La cuestión es que TikTok no se ha desvinculado de su empresa matriz, la china ByteDance. Esto plantea un dilema no solo para los usuarios, sino también para la economía digital de Estados Unidos, donde la aplicación cuenta con aproximadamente 170 millones de usuarios. Pero no te preocupes, los que ya tienen la aplicación podrían seguir usándola, aunque no se podrá actualizar el código, lo que significa un colapso inminente en sus servicios. En otras palabras, sería como tener un coche de lujo sin gasolina.

¿Qué hay detrás de esta decisión?

Todo esto surge de un profundo temor por la seguridad nacional. Los datos de los usuarios de TikTok podrían estar en manos del gobierno chino, algo que muchos senadores consideran inaceptable. Así, un grupo de senadores demócratas ha solicitado al presidente Biden una prórroga de 90 días para dar un respiro a ByteDance. “No podemos permitir que eso suceda”, argumentan ellos. Al escuchar eso, no puedo evitar pensar en lo que se siente recibir una segunda oportunidad después de haber hecho una travesura en la escuela.

La encrucijada de ByteDance

Sin embargo, lograr esta prórroga no será una tarea fácil. ByteDance necesitaría demostrar que está trabajando en un plan de separación y, como bien sabemos, deshacer lo que se ha construido —como una relación tóxica— no es precisamente pan comido. La negativa del gobierno chino a deshacerse de TikTok complica aún más la situación. Las reglas que tienen sobre la venta de tecnología a empresas extranjeras son bastante estrictas, casi como los límites que le impones a tu pareja en una relación abierta.

Donald Trump y Xi Jinping: charlas de café

Hablemos un poco del otro lado del océano. Donald Trump se ha comunicado con Xi Jinping, presidente de China, para hablar sobre TikTok, entre otros temas. “Haremos todo lo posible para que el mundo sea más pacífico y seguro”, proclamó Trump. Si solo esto fuera tan sencillo como decir “quiero paz en el mundo”. Pero, ¿no es irónico que esos dos estén hablando de paz mientras tienen a TikTok en el centro del huracán?

En esta charla, Trump mencionó la preocupación por los datos de los usuarios. Es como si el capitán de un barco en medio de una tormenta decidiera hablar sobre la importancia de usar salvavidas… mientras su propio barco hace agua.

Los nuevos “refugiados de TikTok”

Con el miedo de la prohibición en el aire, no es sorprendente que algunos usuarios estén comenzando a buscar alternativas. Al parecer, ya han comenzado a emigrar a la versión china de Instagram, conocida como Kuaishou. Estos “refugiados de TikTok” han hallado un nuevo hogar en la red social. Aquí la cuestión, ¿son acaso más felices en su nuevo espacio?

Es difícil determinar si el cambio de plataforma será significativo. Pero claro, todos los que han tenido un ex que no soportaban desequilibrarse en una nueva relación pueden entender este cambio. Quizás la nueva aplicación les ofrezca la frescura y emoción que necesitaban, aunque la nostalgia difícilmente se vaya.

¿Qué pasaría si TikTok desaparece?

Tener una aplicación como TikTok parado en sus operaciones no solo afectará a los individuos, sino a una vasta comunidad de influencers que dependen de esta plataforma para sus ingresos. ¿Te imaginas ser una de esas personas que ha construido su carrera sobre videos de bailes y tendencias? Se sentirían como un malabarista al que se le quita la pelota justo antes del gran lanzamiento. Esto podría resultaría en “graves consecuencias para millones de estadounidenses”, como han señalado los senadores.

La realidad es que TikTok se ha vuelto parte de nuestra cultura digital. Es similar a cuando llamamos a algo “Googlear” simplemente porque es más fácil que buscar en otro lugar. Y ahora, quitar una parte de esta cultura sería como arrancar una hoja de un árbol: por mucho que se quiera seguir creciendo, siempre habrá una cicatriz que recordar.

El dilema de la privacidad

Esto nos lleva a otro punto importante: la conversación sobre la privacidad de datos. La controversia en torno a TikTok también resalta la creciente preocupación sobre cómo están manejados nuestros datos personales en plataformas sociales. Cada vez que deslizamos hacia arriba e interactuamos en la aplicación, estamos entregando un pedazo de información valiosa, muchas veces sin darnos cuenta.

En un mundo donde los anuncios personalizados podrían parecer agradables, ¿realmente nos sentimos cómodos poniendo nuestros datos en manos de compañías que no verían un problema en vendérselos al mejor postor? Esto es, potencialmente, un dilema ético en el que todos tenemos un rol que desempeñar. Como diría una abuela sabia: “Si no quieres que te roben, cuida tus cosas”.

Reflexiones finales

A medida que la fecha para la posible prohibición de TikTok se acerca, es difícil no sentir una mezcla de ansiedad y emoción. Desde la leve risa de un video hilarante hasta la profunda conmoción de un testimonio en vivo, TikTok se ha convertido en un espacio único donde todos podemos expresar nuestra creatividad. Sin embargo, la sombra de la política se cierne sobre nosotros, mostrando cuán frágil puede ser esta conexión.

¿Acabará todo esto en un dramático ‘adiós’ a TikTok? ¿O quizás podríamos tener una conversación razonable que impulse cambios viables para el futuro de la plataforma en Estados Unidos? Al final del día, todos queremos sentir que nuestro rincón de la red es seguro, divertido y, sobre todo, humano. Lo que está en juego no es solo una aplicación, sino nuestro derecho a conectarnos.

Entonces, mientras contemplamos lo que puede ser el futuro de TikTok, tomemos un momento para reflexionar sobre cómo la tecnología puede unirnos —o separarnos—. Y recordemos que, aunque la vida puede ser impredecible, siempre podemos encontrar una forma de bailar, ya sea en TikTok, Kuaishou o incluso en un formato más clásico como la danza en la cocina (con un ligero toque de humor, por supuesto).