Cuando los chatbots comenzaron su andanza, se pensó que serían una moda pasajera. Sin embargo, aquí estamos, hablando de Ernie Bot, el chatbot de IA más popular de China, creado por el gigante Baidu. Si te parece que el mundo de la inteligencia artificial sólo pertenece al ámbito de las apps que utilizamos para averiguar el clima o de esos asistentes que casualmente saben que te gusta el café, déjame decirte que estamos ante una revolución silenciosa… y particularmente ideológica. Pero, ¿qué significa esto realmente, y por qué deberías tener un ojo puesto en esta historia?
La explosión de los chatbots en China
China se ha convertido en un hervidero de actividad en lo que respecta a la inteligencia artificial. Según estadísticas, 230 millones de usuarios habían utilizado alguna forma de IA generativa a finales de junio de este año. Eso es más de un cuarto de la población. En un mundo de redes sociales donde cada clic cuenta, ¿qué tiene Ernie Bot que no tengan otros bots como ChatGPT o Gemini?
La respuesta es simple: se trata de un sistema que ha sido diseñado pensando en la cultura y la política locales, y por lo tanto, resuena con un público muy específico. Si bien ChatGPT es apreciado por su ingenio y versatilidad, Ernie parece haber entendido la clave del éxito: hablar el idioma de su público, incluso en un sentido más literal. Hablando de idiomas, me recuerdo cuando intenté aprender mandarín con una app, y no, no fue precisamente un éxito. Nos reímos, pero lo realmente cierto es que la comprensión cultural está en el corazón de cualquier herramienta de comunicación efectiva.
La competencia en el mundo del chatbot
A pesar de la abrumadora popularidad de Ernie, el juego no se detiene ahí. Otros jugadores, como ChatGPT que, aunque con restricciones legales en China, aún tienen un 7% de usuarios que los prefieren, y el emergente Gemini con un 3,8%, están luchando por un pedazo del pastel. Sería como si fuéramos a un buffet de postres y tuviéramos que elegir entre un suculento pastel de chocolate, tiramisú y frutas frescas. Para algunos, la experiencia de Ernie es la más dulce, pero para otros, los postres occidentales aún tienen su encanto.
Ernie Bot y su nuevo enfoque ideológico
Puesto que se me ha agradecido en mis años de bloguero por no restarle importancia a la crítica constructiva, hablemos de cómo Ernie Bot se vuelve más consciente del ideario comunista. Ahora, gracias a una colaboración con Xuexi Qiangguo, el chatbot puede generar textos utilizando documentos gubernamentales oficiales. Imagínate un bot que no sólo te diga cómo hacer una receta de cocina, sino que además hable de los 10 principios del comunismo. Es un combo que muchos no veían venir.
La nueva herramienta: Asistente oficial de documentos
La herramienta que ha sorprendido a más de uno se llama, nada menos, que “Asistente oficial de documentos de Xuexi Qiangguo”. Esta nueva capacidad permite que el chatbot no sólo genere textos, sino que cite directamente fuentes oficiales de los medios de comunicación estatales, afirmando que “la información está estrictamente revisada y verificada”. Si tuvieras que elegir entre saber si la Tierra es plana o redonda a partir de fuentes confiables, creo que te inclinarías por lo segundo, ¿verdad?
En un mundo donde la desinformación abunda por doquier, esto parece un alivio, pero cuidado, porque lo que se define como información «revisada y verificada» está profundamente vinculado a la propaganda del Partido Comunista Chino. Este es un punto que podría despertar la curiosidad (y la preocupación) de muchos. ¿Es posible crear sistemas de inteligencia artificial que también sirvan para promover ideologias? Este es un dilema que nos toca a todos.
Más allá de un simple chatbot
Lo impresionante de Ernie Bot no se limita únicamente a su habilidad para generar textos ideológicos, sino que forma parte de un ecosistema mucho más amplio. La empresa Baidu no está simplemente creando un chatbot; está utilizando Ernie como un puente hacia un futuro donde la inteligencia artificial se puede integrar en la vida cotidiana de los ciudadanos chinos. Desde artículos hasta imágenes, pasando por auriculares que transcriben reuniones y gafas inteligentes. ¡Es como si el futuro estuviera aquí, y no nos hubiéramos dado cuenta!
El dilema de la privacidad
Al hablar de Baidu, es difícil ignorar los escollos en su camino. La empresa está buscando establecer alianzas, incluso con gigantes tecnológicos como Apple. Sin embargo, el conflicto principal radica en las políticas de privacidad que limita la capacidad de Baidu para gestionar datos de usuarios de iPhone. Es curioso cómo estos gigantes tecnológicos navegan por las aguas turbias de la privacidad en un mundo donde la información es poder. ¿Demasiado riesgo para una empresa que quiere crecer o una oportunidad de ser innovadora?
Ernie Bot y el futuro de la IA
Entonces, ¿qué hay en el horizonte para Ernie Bot y otras tecnologías de inteligencia artificial en China? El país ha demostrado ser un semillero de innovación, pero también es necesario señalar los límites y las restricciones que acompañan a esta tecnología. La colaboración entre tecnología y política puede dar lugar a avances, pero también puede levantar cuestiones éticas sobre el control y la manipulación de la información.
Hacer un paralelismo aquí: en un mundo donde un “like” puede determinar el destino de un influencer, una palabra mal colocada por un chatbot podría hacer que un discurso se deslice en la dirección equivoca. Así que, mientras disfrutamos de los avances, preguntar sobre las implicaciones éticas es un must.
Reflexiones finales
En conclusión, Ernie Bot no es solo otro chatbot en un mar de aplicaciones; es un símbolo de cómo la tecnología puede usarse para manifestar ideologías y servir como una herramienta de comunicación altamente especializada. La pregunta que me queda es, ¿hacia dónde vamos como sociedad cuando la IA empiece a dejar de ser «neutral» para alinearse con visiones políticas y virales? La historia de Ernie Bot es un recordatorio de que el futuro es emocionante, pero también puede ser desconcertante.
Así que, querido lector, la próxima vez que utilices un chatbot, recuerda que detrás de esa cortina de inteligencia artificial, se esconden tanto posibilidades amplias como decisiones difíciles. Y si alguna vez ves que el bot cita a Xi Jinping en una conversación sobre el clima, no te sorprendás. ¡Bienvenidos al futuro… o al menos a la versión china de él!