La noche de los Emmy 2024 estuvo marcada por sorpresas, emociones y, como siempre, ese aire de competencia que sólo se siente en eventos donde la creativa industria de la televisión se reúne para celebrar sus propias hazañas. En esta ocasión, shogun y the bear fueron los titanes de la noche, levantando una guerra de estatuillas que podría hacer que cualquier otra serie se sintiera un poco… bueno, pequeña. ¿Qué pasó exactamente en esta gala? Póntelo cómodo, agarra unas palomitas—porque como espectador de estos premios, tú también formas parte de esta narración.

Todo comenzó con una ceremonia fluida y amigable

La gala, celebrada en el Teatro Peacock de Los Ángeles, despegó con la energía de un espectáculo de comedia stand-up. Los anfitriones de la noche, Eugene y Dan Levy, comenzaron con un discurso que podría llenar cualquier espacio vacío. Si alguna vez te has preguntado cómo sería el comienzo de tu programa favorito, imagina risas, algunos chistes malos y un toque de ternura familiar. Y, por cierto, ¿alguien más notó que su química es digna de una sitcom de larga duración? No estoy insinuando que deberían tener su propio programa, pero oye, no sería la peor idea.

Por cierto, mientras escribo esto, tengo que hacer una confesión: nunca he asistido a una ceremonia de premios. Para mi, cada gala se asemeja a una misión imposible. Pero me imagino que entre el respingo de luces, la orquesta a cuestas y la ropa deslumbrante, uno podría sentir que está dentro de un cuento de hadas… o al menos de una serie de televisión de alta gama.

La batalla de los titanes: shogun vs. the bear

Las cifras hablan por sí solas

The Bear llegó a la gala con una nada despreciable 23 nominaciones, la cifra más alta en la historia de los Emmy. Y por otro lado, shogun acumuló un admirable 25 nominaciones. Ciertamente, ambos contendientes son como esos dos amigos que cada vez que se encuentran en un bar, terminan haciendo una apuesta para ver quién puede tragarse más tacos en una sentada. ¿Y el resultado? En lugar de descubrir quién es el verdadero rey de los tacos, terminamos todos preguntándonos qué hicieron estos chicos para entregarse tanto a su arte.

Así fue como la noche avanzó, dejando claro que el espectáculo es mucho más grande que los números, porque al final, el cine y la televisión son sobre contar historias que resuenen con nosotros. A medida que avanzaba la gala, la tensión iba en aumento. ¿Ganaría el aclamado the bear o se consolidaría como un clásico shogun?

Y el ganador es…

En medio de risas y alguna que otra lágrima, la gran sorpresa de la noche llegó al anunciarse el ganador de mejor comedia: hacks. Los creadores y el público presentes se miraron entre sí con una mezcla de sorpresa y entusiasmo, como si todos quisiéramos aplaudir al mismo tiempo pero no supiéramos dónde estaba la próxima mesa de snacks. Este triunfo fue como esos momentos de vida donde todos están tan felices que sólo un uf colectivo puede describirlo. En otras palabras, fue un momento épico.

Los momentos más emotivos de la noche

Jeremy Allen White: Un triunfo personal

Si bien the bear no se llevó el premio a mejor comedia, no llegó con las manos vacías. Jeremy Allen White, en una actuación conmovedora, ganó el premio a mejor actor principal. Su emoción era palpable. Casi me emocioné—y si me ves en la vida real, sabes que no soy de esos que sueltan una lágrima fácilmente. «Esta serie me ha cambiado la vida,» dijo él. A veces, uno se pregunta cómo los actores se ven tan relajados en pantalla, pero ahí tienes la respuesta: están dejando todo su corazón en ello.

La historia de Liza Colón-Zayas

Pero quizás el momento más desgarrador de la noche fue cuando Liza Colón-Zayas recibió su primer Emmy a los 52 años. Eso es dar un claro mensaje: ¡no importa cuántas veces te diga la vida que no lo lograrás! “¿Cómo es posible, en presencia de Meryl Streep?”, se preguntó, entre lágrimas. Aquí es donde me viene a la mente la famosa frase: «No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy.» Si alguna vez has tenido una envidia tonta hacia la carrera de alguien más, recuerda que el viaje es lo que cuenta.

El legado de las series limitadas

En una época en la que todos tenemos más opciones de serie de televisión que tiempo para verlas, los Emmy también hicieron un homenaje a las series limitadas. Mi reno de peluche, la peculiar serie de Netflix, se llevó el premio a mejor serie limitada, junto con otros galardones para su elenco. Un aplauso merecido a Richard Gadd, quien incluso recordó a aquellos que han atravesado tiempos difíciles, citando que “nada dura para siempre”. La vida sigue dando giros inesperados, y eso es algo que todos podemos aplaudir, aunque a veces sientas que has perdido tu nerdo o tu lugar en la fila del café.

La inclusión y el futuro de la televisión

No podemos obviar que la noche de los Emmy también fue un llamado a la inclusión. Cris Abrego, el primer latino en presidir la Academia de Televisión, se subió al escenario y aunque no habló en español, resonó el mensaje de que la hora de contar historias diversas es ahora. Así que, ¿qué pasa con las historias de grupos excluidos? El actor y presentador John Leguizamo no se anduvo con rodeos: “se necesitan más historias inclusivas.” Las palabras en el aire parecen siempre más poderosas cuando provienen de alguien que ha estado ahí, haciendo malabares entre la lucha y la ambición.

Humor y conexión

En medio de tanto brillo y glamour, es fácil perderse en el espectáculo. Pero los Emmy son más que una pasarela: son un lugar donde las vidas se conectan con la risa y el dolor. ¿Alguna vez te has encontrado con un viejo amigo en un evento como este y te preguntas qué es lo que realmente han estado haciendo con sus vidas? Sin duda, el mundo del espectáculo tiene su encanto, pero la vida cotidiana—con nuestro desorden, deseos y conexiones humanas—es lo que realmente nos une a todos.

Al final de la noche, cuando los focos se apagan y el público comienza a disiparse, la pregunta constante es: ¿qué hemos aprendido? Quizás la respuesta resuena en la entrega de cada actor cuyas historias se cruzaron en la pantalla. Además de divertirnos, cada programa que vemos se convierte en una pieza de nuestra propia historia.

Reflexiones finales

Las historias siguen fluyendo en la era de la televisión actual, con personajes que se sienten más reales que nunca. Desde las victorias hasta las sorpresas, los Emmy 2024 fueron un recordatorio de que, aunque algunas historias pueden no siempre triunfar, cada una de ellas es parte de un todo. ¿Quién crees que será el próximo gigante que se enfrentará en la batalla de los Emmy?

Mientras tanto, sigamos viendo, disfrutando y apoyando el arte de contar estas historias que nos mantienen pegados a la pantalla, porque, al final del día, todos merecemos un lugar en la narrativa de la vida.


Si quieres seguir explorando el mundo de las series y dramas que han capturado tu corazón (y tus horas de sueño), no dudes en compartir tus recomendaciones o tus pensamientos sobre esta emocionante gala. ¡Hasta el próximo episodio!