La industria del cine siempre ha tenido una fascinación particular por los duelos de rivalidad. Piensa, por ejemplo, en esos entrañables enfrentamientos entre dos personajes -tan similares y a la vez tan distintos- que terminan por descubrir que tienen más en común de lo que creían. Ahora, imagina que esos personajes son interpretados por Brad Pitt y George Clooney, dos gigantes de Hollywood cuyas carreras han estado llenas de hitos memorables. Y así, con esta premisa, llega a nuestras pantallas Wolfs, una comedia negra que, a pesar de sus momentos brillantes, a veces se siente como si nos estuviera entregando más de lo mismo.

Una comedia negra con un toque de nostalgia

Wolfs, dirigida por Jon Watts, se estrena en Apple TV+ tras su paso por el último Festival de Venecia. La premisa es simple pero intrigante: dos «profesionales de la limpieza» se ven envueltos en un lío inesperado que involucra un asesinato. Aquí ya nos atrapan a todos, ¿verdad? Pero antes de dejarnos llevar por la emoción de ver a nuestras estrellas preferidas, es esencial desmenuzar qué hace que esta película funcione… y dónde le falta ese toque especial que todos esperábamos.

Un guión predecible en la era de lo inesperado

Como ya mencionamos, la historia comienza cuando el «hombre de Pam» (Brad Pitt) y el «hombre de Margaret» (George Clooney) son llamados para limpiar desastres, aunque el desastre en sí se convierte en el más inesperado de los problemas. Sin embargo, a medida que avanza la trama, nos encontramos con un guion que se siente, lamentablemente, predecible. Es un poco como cuando intentas abrir un frasco de mermelada y simplemente no se da; no importa cuánto lo fuerces, hay algo que simplemente no encaja. (¿Acaso no hemos visto esto antes?)

Si te gustan las sorpresas en las películas (¿a quién no?), puede resultar decepcionante ver cómo algunos giros de la trama son, en el mejor de los casos, familiares. El humor es sutil y aunque hay bromas, no son tan agudas como uno esperaría de un equipo de comediantes tan talentosos. Es casi como si la película dijera: «Vamos a hacer lo básico y a ver qué ocurre».

Dos grandes actores, pero se sienten un poco perdidos

Ver a Pitt y Clooney juntos nuevamente, después de su exitosa colaboración en Quemar después de leer (2008), evoca cierta nostalgia. «¿Recuerdas esos viejos tiempos?» parece susurrar la película. No obstante, en este viaje, ambos actores parecen estar demasiado cómodos en sus papeles y, aunque garantizan un espectáculo visual, falta la chispa mágica que solían tener.

En un principio, podrías pensar que verlos en situaciones ridículas podría llevar a alguna autoparodia hilarante. Sin embargo, el guion no parece atreverse a llevarlos a esa dimensión. A veces parece que están más preocupados por su imagen de actores A-list que por divertirse y ofrecernos un buen espectáculo.

Una perspectiva refrescante sobre la edad y la rivalidad

Un aspecto interesante de Wolfs es cómo aborda el tema de la rivalidad entre personajes mayores, que se niegan a aceptar que la juventud no se mide solo en años, sino en actitud. En un momento de la película, uno de los personajes habla de la importancia de mantenerse activo y de no rendirse. «¡Eso es lo que quiero, una competición de marcapasos!» grita casi de manera jocosa. Aquí hay un guiño sutil a la realidad -los tiempos han cambiado, y la competitividad masculina ha tomado formas distintas, pero a veces su esencia sigue siendo la misma.

No puedo evitar pensar en mis propios encuentros con amigos, esos momentos donde una simple conversación se convierte en una contienda épica. ¿Quién puede contar la mejor anécdota? ¿Quién tiene el mejor consejo? En ese sentido, Wolfs refleja esas pequeñas batallas que todos luchamos, aunque a veces fallan en capturar ese espíritu fresco que una vez hizo que estas narrativas fueran tanto cómicas como conmovedoras.

Una estética que brilla, pero no ilumina

Desde el punto de vista visual, Wolfs tiene su atractivo. Las escenas nocturnas están elegantemente bien estructuradas, y las luces y sombras juegan un papel crucial para establecer el tono. Pero ¿es suficiente? A veces, parece que la película se queda atrapada en su propia belleza visual. Se siente como un cuadro bien enmarcado que, aunque atractivo, no tiene una historia que contar.

Cuando recuerdo algunas de las comedias clásicas de los años sesenta, como aquellas que protagonizaban Frank Sinatra y Dean Martin, no puedo evitar contrastar sus momentos de improvisación y sus ingeniosas réplicas con lo que nos ofrece Wolfs. ¡Vaya! Debería haberme traído alguna de esas comedias para ver cómo se hace. La energía vibrante que ofrecían esos actores mágicos parece estar un poco apagada en esta nueva entrega.

Potencial sin aprovechar

A medida que los personajes luchan por salir del enredo en el que se encuentran, hay destellos de humor genuino y conexión. La química entre Pitt y Clooney sigue presente, y se puede sentir la camaradería entre ellos. Pero también es en esos momentos donde la película parece darse cuenta de su propia pereza. Podrían haber apostado más fuerte por esa dinámica y haberla utilizado para catapultar la trama a un nivel superior.

En serio, ¿quién no ama ver a sus estrellas favoritas en situaciones absurdas? La falta de riesgo en el humor puede dejar a los espectadores sintiéndose un poco vacíos. Aquí está la oportunidad de ver a estos dos actores jugar con lo absurdo, y, lamentablemente, la mayoría de las veces parece que han elegido el camino más fácil.

La banda sonora y el epílogo

Finalmente, llegar al clímax de la película es como ver una carrera de caracoles: un poco tediosa pero llena de momentos de calma. Al final, mientras escuchamos Just the Two of Us interpretada por Grover Washington Jr., se siente un aire de conclusión que podría haber llegado mucho antes. Es como si la película finalmente se diera cuenta de que había estado dando vueltas en círculos: «Ah, sí, ¡ahora vamos a hacer un bonito cierre!»

Reflexiones finales sobre ‘Wolfs’

Wolfs tiene sus momentos, y ver a Pitt y Clooney juntos es un deleite que no se debe menospreciar. Pero, en una era en la que la audiencia está más ansiosa que nunca por reacciones inesperadas y humor auténtico, esta película puede quedar un poco fuera de lugar, como uno de esos viejos VHS que encuentras en tu desván: nostálgico, pero con poco que ofrecer más allá de eso.

Al final del día, ¿de qué sirve ver a estos grandes actores si no están dispuestos a arriesgarse? Nos hemos acostumbrado a ver a Pitt y Clooney hacer magia en la pantalla, y aunque Wolfs tiene el potencial de ser un proyecto memorable, se siente incompleto, como un rompecabezas al que le falta una pieza. Solo espero que en su próxima colaboración, nos brinden el banquete que hemos estado esperando.

Entonces, la pregunta que queda es: ¿merece tu tiempo ‘Wolfs’? Depende: si lo que buscas es una buena risa y una trama original, puede que quieras esperar a que esté en tu plataforma de streaming preferida en lugar de hacer un viaje al cine. Pero si solo quieres ver a tus ídolos en acción, quizás te lleves un par de sonrisas. ¿Quién necesita un marcapasos cuando tienes a Brad Pitt y George Clooney robándote el corazón?