Hacer ejercicio es una de esas actividades que se supone debe dejarnos sintiéndonos renovados y llenos de energía. Sin embargo, después de una buena sesión de entrenamiento, a menudo nos encontramos con otros desafíos: el sudor, la piel que parece necesitar una paliza de cuidados y, por supuesto, el cabello que se transforma en un enredo digno de un cuento de hadas. ¿Te suena familiar? Si has pasado por esto, sigue leyendo. Aquí, exploraremos los mejores consejos sobre cómo cuidar tu piel y cabello después de hacer ejercicio, mezclando anécdotas personales y un poco de humor para que sea más ameno.
¿Es bueno hacer ejercicio para la piel?
Primero, hablemos de los beneficios del ejercicio físico. Desde tiempos inmemoriales, se ha creído que practicar alguna actividad física tiene beneficios no solo para el cuerpo, sino también para nuestra piel. Según expertos como la dermatóloga Mar Luque, «el ejercicio estimula la circulación sanguínea, mejora el aporte de oxígeno y nutrientes y ayuda a retrasar la aparición de los signos de envejecimiento prematuro». ¿No es eso algo digno de un aplauso?
Recuerdo la primera vez que decidí hacer ejercicio en casa. Estaba siguiendo los icónicos videos de Jane Fonda, sintiéndome como una estrella de cine. Por supuesto, no duré mucho antes de rendirme al sofá, pero al menos esa sesión me hizo sudar, y mis amigas me hicieron bromas al respecto. “¡Ten cuidado, potencial modelo de portada al final del ejercicio!”
Prepararse para el ejercicio: rutina de cuidados previos
La verdad es que, antes de lanzarnos a hacer ejercicio, hay ciertos cuidados que debemos considerar. Lo primero es limpiar el rostro. Si eres de las que piensa que un poco de maquillaje no hace daño, permíteme decirte que es una idea errónea. Según la esteticista Cristina Galmiche, es esencial comenzar el entrenamiento con la piel limpia, de lo contrario, los poros pueden obstruirse y propiciar brotes de acné. ¡No queremos eso!
Así que, a todas mis amigas que se presentan al gimnasio con una máscara perfecta de maquillaje, les diría que es momento de dejar esa costumbre a un lado. Después de todo, la única sombra que debería estar en tu rostro es la del sudor, ¿verdad?
Luego, para aquellos que prefieren ejercitarse al aire libre, no olvides usar protector solar. ¡Es tu amigo! La dermatóloga Mayte Truchuelo recomienda una protección de amplio espectro con un factor de 50+. A veces creo que ponerme protector solar me hace sentir como un superhéroe que se prepara para salir a la batalla. La batalla de no quemarse, claro.
Durante el ejercicio: hidratación y cuidado
Ahora, cuando estamos a punto de hacer ejercicio, es posible que no pensemos en cómo cuidar nuestra piel al sudar. Según mi experiencia personal, durante una de mis sesiones de yoga, la instructora recomendó usar un spray de agua termal para mantener la piel hidratada. Confieso que nunca había oído hablar de eso hasta ese día, así que decidí probarlo. ¡Fue como un sorbo de agua fresca para mi piel!
Es importante refrescar y enriquecer la piel durante la actividad. Personalmente, siempre llevo un botecito de spray de agua para rociarme y sentirme rejuvenecida. Pero, ojo, no te vayas a secar el sudor arrastrando la toalla, ¡eso es un crimen contra la piel! Una palmadita suave y listo.
Sobre el uso de perfumes, les diré esto: no lo hagan. La última vez que intenté ponerme un poco antes de ir al gimnasio, terminé olfateando como si me estuviera preparando para una cita, no para romperla en el ejercicio. Los perfumes pueden ser irritantes al sudar y causar reacciones adversas. Así que, como dicen ¡guardar lo bueno para después!
El gran final: cuidado de la piel y el cabello después del ejercicio
Llegamos a la parte más gratificante de la rutina. ¡Has terminado tu entrenamiento! Pero aquí viene la parte crucial: ¿Cómo cuidas tu piel y cabello tras la pesada sudada? La rehidratación es imperativa. Después de ducharte, es bueno emplear una crema humectante que ayude a restaurar la barrera cutánea.
Me he sentido muchas veces tentada a dejar esta parte de lado por la sencillísima razón de que me apetece comer algo después del ejercicio, ¡pero no lo hagas! La piel y el cabello merecen todo tu amor y cuidado, tal como tú te mereces ese trocito de chocolate después de una buena sesión de levantamiento de pesas.
Al limpiar el rostro, los expertos recomiendan que lo hagas con productos suaves. A mí me encanta la leche limpiadora de Cristina Galmiche, es mi elección predilecta porque me hace sentir que estoy tratando a mi piel como una reina.
En cuanto al cabello, surgen las preguntas frecuentes: ¿debería lavarme el cabello todos los días? La respuesta no es tan sencilla, depende de varios factores, como el tipo de cabello y la cantidad de sudor. He notado que, tras los entrenamientos, mi cabello se siente más indirectamente afectado por el sudor, así que particularmente lo aclaro bajo agua para eliminar los productos químicos si he estado nadando.
También es recomendable alternar los lavados tradicionales con un acondicionador, o utilizar champú seco en ciertas ocasiones. Una vez, después de un extraordinario día de surf, conocí a alguien que se había estado lavando el cabello con champú tan a menudo que lo había dañado. Definitivamente me dejó pensando.
Resumen de la rutina de cuidados post-ejercicio
Para que quede claro, aquí está un resumen sencillo de lo que debes tener en cuenta para cuidar tu piel y cabello después de hacer ejercicio:
- Limpia tu rostro: Usa una leche limpiadora suave después de sudar.
- Hidrata tu piel: Aplica tu crema humectante preferida.
- Cuida tu cabello: Lava solo cuando sea necesario (según tu tipo de cabello) y aclara siempre después de nadar o sudar mucho.
- Evita productos irritantes: No uses perfumes o productos que pueden sensibilizar tu piel.
Como conclusión, cuidar la piel y el cabello durante y después del ejercicio requiere un poco de esfuerzo, pero es completamente posible. Estos pequeños rituales no solo te ayudarán a lucir bien, sino que también mantendrán tu piel y cabello saludables.
Entonces, la próxima vez que hagas ejercicio, piensa en el beneficio que le estás dando a tu piel y cabello. Recuerda, todo esfuerzo cuenta, y con un poco de humor y amor propio, ¡cada sesión puede ser más que solo sudar! Así que, ¿quién está lista para romper la rutina y combinar el ejercicio con un buen cuidado personal? ¡Yo ya estoy lista para la siguiente sesión de yoga!
