La noticia se ha propagado como la pólvora entre los amantes del teatro y la cultura hispana en Londres: el Cervantes Theatre, ese faro brillante del teatro en español, ha cerrado sus puertas. ¿Quién podría haber imaginado que un espacio tan vital para la comunidad hispana se vería obligado a bajar el telón por falta de apoyo económico? Hace unas semanas, Jorge de Juan y Paula Paz, los confundadores de este icónico teatro, anunciaron la triste noticia con un tono que resonaba entre la frustración y la resignación.
Un espacio que brilló con luz propia
Desde su apertura en 2016, el Cervantes Theatre se convirtió en un rincón mágico del Southwark, en Londres. Este teatro no solo ofrecía un escaparate para obras clásicas y contemporáneas en español, sino que también se convirtió en un punto de encuentro para la comunidad hispana en el Reino Unido. Por más de siete años, sus arcos resonaron con las palabras de Lorca, Almodóvar, y un sinfín de dramaturgos que encontraron en este lugar un hogar.
Recuerdo la primera vez que pisé ese teatro: la energía vibrante del lugar, el eco de las risas y las lágrimas del público, y, por supuesto, el aroma del canelón que había disfrutado en una de las pequeñas trattorias cercanas. Era imposible no sentir que formabas parte de algo especial. ¿No es curioso cómo un simple teatro puede crear un espacio de pertenencia?
Pero al igual que muchas historias conmovedoras, esta llegó a su punto de quiebre.
La lucha contra viento y marea
Imagínese la escena: un grupo de apasionados artistas se reúne para llevar a cabo la misión de dar vida al teatro en español en una ciudad que, a primera vista, parece alejada de sus raíces culturales. A pesar de los obstáculos, el Cervantes Theatre logró presentar 106 estrenos, 42 autores y atraer a miles de espectadores, incluyendo a 14,000 estudiantes británicos que aprendieron español a través de la magia de Lorca y otros grandes. Sin embargo, incluso en medio de tanto éxito, el corazón del teatro comenzó a flaquear por problemas económicos.
Como mencionó Jorge de Juan, “Hemos tenido que rechazar la ayuda de 80,000 euros para la programación de Acción Cultural Española porque no hemos podido cubrir el alquiler ni los gastos estructurales.” Esto me recuerda a esos momentos en la vida en los que tienes tantas metas y sueños, pero las circunstancias simplemente no juegan a tu favor. ¿Quién no ha estado allí, tratando de hacer malabares con el tiempo y los recursos?
La lucha constante contra los desafíos económicos y la pandemia fue un verdadero testimonio de la determinación de Jorge y Paula. Su capacidad de aceptar la realidad de la situación con una honestidad impactante es admirable.
La tristeza entre los artistas
Las reacciones entre la comunidad artística, tanto en España como en Reino Unido, fueron unánimes: “¿Cómo es posible?”, se preguntan. Es casi como si toda la comunidad hispana hubiera perdido un miembro querido de la familia. Es difícil imaginar la vida en Londres sin ese hilo cultural que ofrecía el teatro. La tristeza que emana de Paula Paz al decir: “Siempre es triste ver cerrar un teatro”, resuena profundamente.
Es fascinante cómo los teatros son espacios que trascienden el arte. Al menos, eso siento yo. Son lugares donde se tejen emociones, se forjan amistades y se abren horizontes. Para muchos, el Cervantes Theatre no solo era un punto de encuentro, sino un refugio, un lugar donde las risas y las lágrimas convergían en una experiencia compartida.
¿Qué podría haber hecho la comunidad?
Cuando se trata de causas y luchas comunitarias, a menudo nos encontramos preguntándonos: ¿Qué más podríamos haber hecho? Hoy en día, hay tantas organizaciones y campañas que podrían haber apoyado al Cervantes Theatre. Tal vez fue una falta de promoción, una desconexión entre la comunidad y los posibles inversores, o incluso la falta de estrategias de generación de ingresos. La realidad es que, en este caso, la comunidad no pudo proporcionar el soporte necesario para mantener vivo un sueño tan importante.
La falta de una transferencia anual de 200,000 euros fue un golpe devastador. Apenas suficiente para cubrir gastos básicos, pero cualitativamente crucial para mantener el espíritu y la misión del teatro. Al fin y al cabo, ¿por qué deberían las instituciones culturales depender del viento favorable de la financiación internacional?
La esencia del Cervantes Theatre
Una de las cosas más destacadas de la Spanish Theatre Company y el Cervantes fue su capacidad para conectar a la comunidad en Londres con el teatro español. Capturaron un interés creciente por el arte y la cultura hispana, creando un espacio donde autores contemporáneos y obras clásicas coexistían y se entrelazaban. Esto, sin dudas, llevó la experiencia teatral a un nuevo nivel.
Imagine la experiencia de ver “El amor de don Perimplín y Belisa en el jardín” en vivo, o la zarzuela “Black el Payaso”. No era simplemente un espectáculo; era una celebración de la cultura, una oportunidad para experimentar y aprender en un mismo espacio.
Si hay una lección que esta historia nos deja, es que no podemos dar por sentado lo que contribuimos al paisaje cultural de nuestras ciudades. ¿Qué pasará con las futuras generaciones de artistas que anhelen encontrar su voz? La salud de un sector teatral depende de todos nosotros, no solamente de las instituciones.
El futuro de Jorge y Paula
Mientras Jorge de Juan vuelve a su faceta de actor en España con algunas series de Netflix, y Paula Paz se embarca en proyectos de dirección en Madrid, ambos mantienen en sus corazones la tristeza de haber visto caer el telón del sueño que compartieron. La vida avanza, pero el impacto de este cierre se sentirá en el tiempo.
Quizás en el fondo del túnel oscuro en el que ahora se encuentran, existe una ligera esperanza. Desde el cierre, ya se han escuchado voces que abogan por reactivar algún tipo de programación artística en Londres. Esto podría significar que, de alguna manera, el Cervantes Theatre renazca en otro formato, otra localización, o quizás otras propuestas que surjan de la comunidad que tanto lo apoyó y lo hizo suyo.
La importancia de seguir luchando por la cultura
El adiós del Cervantes Theatre es un recordatorio de la fragilidad de los espacios culturales y la vital importancia de seguir luchando por ellos. Cada actuación, cada evento y cada obra son un ladrillo en la construcción de la cultura que compartimos. La cultura no es solo entretenimiento; es un tejido social que une a las comunidades, en este caso a las hispanohablantes en Londres y al público británico en general.
Es triste pensar en lo que se ha perdido, pero también es importante reflexionar sobre el futuro y la forma en que podemos apoyar y crear un ecosistema que permita que lugares como estos existan. ¿Cuántas historias aún les quedan por contar?
En tiempos en que los espacios culturales están bajo presión, es crucial que todos nos involucremos y apoyemos a aquellos que alimentan nuestras almas con su arte. Tal vez no podamos traer de vuelta al Cervantes Theatre, pero sin duda podemos contribuir a que la cultura y el teatro sigan vivos en Londres. Al final del día, esto es lo que realmente importa.
Así que, amigos, la próxima vez que enfrenten la oportunidad de apoyar un teatro local, una exposición o cualquier evento cultural, ¡hagan el esfuerzo! Quizás un pequeño gesto de apoyo hoy se convierta en el cimiento de grandes historias mañana. El Cervantes Theatre nos dijo adiós, pero su legado debe seguir vivo en nuestros corazones y acciones.