La tecnología ha revolucionado nuestras vidas en formas que apenas comenzamos a comprender. Ahora, más que nunca, las naciones compiten ferozmente para posicionarse como líderes tecnológicos en la era del digitalismo. India, en su afán por emular a su vecina China, está construyendo ciudades tecnológicas masivas con la esperanza de atraer a gigantes tecnológicos como Apple y Samsung. Sin embargo, a medida que se despliegan estas visiones futuristas, nos encontramos con un obstáculo innegable: la falta de interés tanto de empresas extranjeras como locales para establecerse en estas ciudades fantasma. ¿Qué está sucediendo realmente detrás de este sueño tecnológico?

La gran apuesta de India por la tecnología

Con aproximadamente 1.4 mil millones de personas, India tiene un recurso que es, sin duda, su mayor activo: su talento humano. Pero, como destaca la reciente experiencia con Bangabandhu Hi-Tech City, tal vez no se trate solo de atraer inversiones, sino de crear un ecosistema que nutra y mantenga a los trabajadores locales. Desde que se empezó a gestar la idea de Bangabandhu en 1999, se han dado pasos significativos para hacer de este un centro tecnológico de renombre. Sin embargo, no todo lo que brilla es oro.

Un sueño desvanecido

Imaginen por un momento una ciudad construida para albergar hasta 100,000 trabajadores. En teoría, suena espectacular, ¿verdad? Sin embargo, la realidad de Bangabandhu Hi-Tech City es un tanto diferente. La idea era que se convirtiera en una ciudad vibrante y bulliciosa, pero, ¡sorpresa! Se ha transformado en un laberinto de edificios medio vacíos, donde la naturaleza parece haber tomado el control. Según algunos reportes, la belleza arquitectónica de la ciudad se asemeja más a una película de ciencia ficción post-apocalíptica que a un centro tecnológico próspero.

¿Dónde está el talento?

A pesar de tener un potencial humano inmenso, uno de los grandes fracasos de este ambicioso proyecto es la falta de personal calificado. Las empresas se encuentran en una encrucijada, intentando contratar a ingenieros con experiencia en inteligencia artificial, ciberseguridad y otras áreas de alta demanda. Sin embargo, no solo es un problema de demanda, sino también de ubicación. Muchos ingenieros son reticentes a abandonar la comodidad de las ciudades por trabajos en medio de la nada. Puedes imaginarte a un ingeniero sentado en el tráfico, lamentándose: «¿Por qué habría de mudarme aquí cuando puedo trabajar desde casa y tener mejor calidad de vida?».

La burbuja burocrática

Si la ubicación ha sido una barrera significativa, la burocracia se ha alzado como la rival más formidable. Según testimonios de empresas como DataSoft, los complicados trámites burocráticos han echado a perder sus planes iniciales. ¿Quién quiere pasar días y semanas tratando de conseguir permisos cuando puedes simplemente quedarte en casa y hacer tu trabajo? Eric puede ser un desarrollador brillante, pero si se ve obligado a moverse y enfrentar un mar de papeleo, probablemente prefiera seguir siendo un telaraña en la tranquilidad de su casa.

La crisis de la infraestructura

Y si la ubicación y la burocracia no son suficientes, a principios de 2024, Bangabandhu experimentó un apagón que duró 12 días. Es como si el horóscopo del parque tecnológico estuviera escrito en esos truenos y relámpagos, ¿no? Esto es un gran inconveniente que atenta contra las bases mismas de un parque que pretende atraer inversiones. Así que, una vez más, nos encontramos ante la pregunta: ¿realmente es viable construir ciudades tecnológicas en entornos donde la energía es más inestable que un gato en una tienda de porcelana?

La soledad del Silicon Valley de Bangladés

Al igual que Bangabandhu, el Parque Tecnológico de Software Sheikh Hasina fue presentado como «el Silicon Valley de Bangladés». ¿La gran ironía? Este parque también se encuentra en una situación precaria, con solo 1,600 de los 20,000 puestos de trabajo esperados ocupados. Nunca había sido tan necesario preguntar: ¿qué secreto tienen las grandes ciudades, como Daca, que mantienen a los talentos lejos de estas promesas tecnológicas?

¿Es esto solo una cuestión de tiempo?

Algunos optimistas sostienen que, con el tiempo, estas incertidumbres se resolverán. La infraestructura mejorará, la burocracia cambiará y más empresas comenzarán a llegar. Pero aquí es donde la risa puede ayudar a aligerar la carga: «Si los trenes hicieran un poco más de ruido y la electricidad no jugara al escondite, ¿quién sabe? Tal vez un día veamos un lugar lleno de ingenieros en lugar de edificios vacíos».

El futuro de la tecnología en India

Si India quiere realmente convertirse en la nueva potencia tecnológica global, necesita dejar de lado las ideas románticas y enfocarse en los desafíos reales que enfrenta. Esto implica reconocer las deficiencias gubernamentales y, lo más importante, la falta de infraestructura adecuada.

Por supuesto, el optimismo y la disposición para trabajar en equipo son esenciales. Pero en un mundo donde la carga administrativa frequentemente aplasta el espíritu creativo, corresponde a los líderes de este país repensar sus estrategias. Eso sí, ¡necesitamos a esos ingenieros y trabajadoras para que no se harten de esperar en la estación de tren!

Reflexiones finales

El objetivo de crear ciudades tecnológicas en India y en otras partes del mundo es atractivo y lleno de potencial. Pero eso no significa que sea fácil. Bangabandhu Hi-Tech City y otros proyectos similares son un recordatorio de que los sueños no se hacen realidad por sí mismos. Requieren esfuerzo, determinación y, sobre todo, un entorno que permita que el talento florezca.

Así que, si conoces a alguien que tenga la respuesta mágica para solucionar problemas de infraestructura y atraer talentos, ¡díselo a la administración india! Hasta entonces, parece que estos parques tecnológicos permanecerán atrapados en un ciclo de aspiraciones no cumplidas. ¿Podrá la India peeling back the layers? La única forma de averiguarlo es seguir mirando hacia el futuro. ¡Disfrutemos el viaje!


Hasta aquí nuestra exploración del fascinante y tumultuoso intento de India de transformarse en una potencia tecnológica a través de la creación de ciudades tecnológicas. Me encantaría saber tu opinión sobre este tema. ¿Crees que India logrará superar estos desafíos? ¿O crees que estos parques tecnológicos quedarán como meros monumentos a las aspiraciones no cumplidas? ¡Déjame tus pensamientos en los comentarios!