En el tiempo que llevo escribiendo sobre temas de inclusión y diversidad, he aprendido que cada pequeño esfuerzo cuenta. Pero cuando una campaña como ‘Contrata Sin’ se relanza con más fuerza y propósito, evidentemente hay algo emocionante en el aire. Imagina que de repente, todas esas barreras invisibles que muchas veces colocamos entre nosotros y un mundo más justo, empiezan a desvanecerse. ¿No es maravilloso pensar en eso? Hoy, vamos a profundizar en la importancia de esta iniciativa, que tiene su mirada puesta en grupos que suelen ser despreciados en el mundo laboral: los jóvenes, las personas mayores de 45, las mujeres y los migrantes.

¿Qué es la campaña ‘contrata sin’?

Desde su lanzamiento en 2020, la campaña ‘Contrata Sin’ ha tenido un papel destacado al promover la inclusión en el ámbito empresarial. Ahora, se enorgullece de actualizar su imagen y hacer más visible el talento diverso. En el corazón de la campaña, Cruz Roja, junto con la Asociación de Hostelería y Turismo de Toledo, busca hacer un llamado a la conciencia empresarial: el talento no tiene edad, ni origen, ni género.

Cuando escucho que «el talento no tiene edad», me recuerda a mi abuela, que a los 70 años comenzó a hacer mirmeladas artesanales para vender. ¡Quiero decir! Nunca es demasiado tarde para aprender y contribuir. Nos hace reflexionar: ¿por qué no podemos dar más oportunidades a quienes parecen ser menos favorecidos en el ámbito laboral?

Impacto tangible: aceite para el cambio

Una de las estrategias clave para difundir el mensaje de ‘Contrata Sin’ ha sido la distribución de 6.000 botellitas de aceite a 60 establecimientos en la provincia de Toledo. Este gesto, aunque parecería trivial al principio, tiene un impacto emocional y simbólico increíble. Es un recordatorio constante de que cada empleo ofrece a una persona la oportunidad de cambiar su vida.

Al respecto, Pilar Gómez Elez, vicepresidenta de Cruz Roja en Toledo, lo resume perfectamente: «Un contrato de trabajo supone una oportunidad que cambia la vida de las personas». Es como una semilla plantada en tierras fértiles: lo que parece un simple aceite puede florecer en muchas oportunidades.

La voz de la experiencia: el testimonio de María

Hablando de oportunidades, quiero compartir la historia de María, una joven de 23 años que, tras formarse en Cruz Roja, logró un contrato tras sus prácticas en el Complejo Palomarejos Golf. Lo mejor de su historia es que desafía estereotipos. “Ser mujer y de etnia gitana no ha sido una barrera para demostrar mis competencias gracias a una empresa que me ha dado la oportunidad”, dijo.

Personalmente, esto me resuena profundamente. Recuerdo una vez, en mi primer trabajo, que una compañera enfrentaba comentarios inapropiados porque era madre joven. Sin embargo, su ética de trabajo y habilidades hablaban mucho más que esos comentarios. Eso nos lleva a preguntarnos: ¿Cuántas historias inspiradoras están ocultas detrás de prejuicios sin fundamento?

Compromiso empresarial: un paso hacia la inclusión

Tomás Palencia, presidente de la Asociación de Hostelería y Turismo de Toledo, resalta que la inclusión forma parte de la esencia de muchas de las plantillas en el sector. ¡Qué refrescante es escuchar esto! Cada vez más empresas están rompiendo moldes y expandiendo su noción de lo que significa un empleado ideal. Esto no es solo un deber moral; hay una fuerte evidencia de que los equipos diversos son más innovadores y productivos.

¿Por qué es esto importante? Porque nos beneficia a todos. Cada vez que una persona se siente valorada y aceptada, eso se traduce en un mejor rendimiento en el trabajo y, a su vez, en un mejor servicio a los clientes. ¿No deberíamos, entonces, celebrar cada vez que una empresa adopta este enfoque?

Cambiando la narrativa: el desafío de los estereotipos

La campaña ‘Contrata Sin’ no solo busca promover la inclusión; también tiene el claro objetivo de cambiar la narrativa que rodea a ciertos colectivos. Por ejemplo, a menudo se asocia a las personas mayores con la ineficiencia y a los jóvenes con la falta de experiencia. Ambas generalizaciones son absurdas. Así que, ¿por qué seguimos perpetuándolas?

Una de las mejores formas de desmantelar estereotipos es a través de la educación y la empatía. Cuando las empresas comienzan a abrir espacios para que estas historias sean vistas y escuchadas, se crea un cambio no solo en sus ambientes laborales, sino también en la sociedad. Es un ciclo virtuoso que conduce, inevitablemente, a una cultura laboral más rica y diversa.

La inclusión no es un favor: es una necesidad

En el fondo, lo que muchas personas parecen olvidar es que la inclusión no se trata solamente de hacer un favor a ciertas poblaciones. Se trata de una necesidad empresarial. Las empresas que no abrazan la diversidad pueden enfrentarse a severas limitaciones. Pensemos en grandes nombres como Google y Microsoft, que han visto un aumento de su creatividad y su rendimiento tras implementar prácticas de inclusión efectiva.

Además, al hacerlo, se generan comunidades más robustas y resilientes. Al final del día, todos queremos vivir en un mundo donde se valoren las diferencias, donde la diversidad de pensamiento y experiencia sea la norma y no la excepción.

La conexión entre diversidad e innovación

Está demostrado que una fuerza laboral diversa alimenta la innovación. Las empresas que incluyen voces de diferentes orígenes tienen más probabilidades de desarrollar productos y servicios que resuenen con una amplia gama de consumidores. ¿Y quién no querría estar en el lado correcto de la innovación?

Hablemos un poco de la tecnología: cuando personas con diferentes experiencias se sientan a la mesa, a menudo se les ocurren soluciones innovadoras que, de otro modo, podrían haber pasado desapercibidas. Por lo tanto, la diversidad no solo es buena; también es lucrativa.

La responsabilidad colectiva: impactar a la sociedad

Como dice el viejo adagio: «La unión hace la fuerza». La campaña ‘Contrata Sin’, con su enfoque en la diversidad y la inclusión, es un reflejo de cómo cada uno de nosotros puede marcar la diferencia. Ya sea a través de nuestro papel como empleadores, colegas o simplemente como miembros de la comunidad, todos tenemos la responsabilidad de apoyar programas como este.

Espero que al leer esto, sientas la misma energía que aprecio: la idea de que estamos todos juntos en esto, empujando hacia un futuro más brillante. Cuando una persona consigue un trabajo, no solo cambia su vida; también transforma las vidas de los que les rodean. Esa conexión es potente.

En conclusión: un llamado a la acción

Finalmente, te dejo con una pregunta: ¿qué puedes hacer tú para apoyar la inclusión en tu entorno? Recuerda que cada pequeña acción cuenta. Ya sea recomendando a alguien para un trabajo, siendo un mentor o simplemente hablandole a un amigo sobre la importancia de la diversidad, puedes ser parte de este cambio.

La campaña ‘Contrata Sin’ es un recordatorio de que, aunque las presiones sobre los grupos desfavorecidos son reales, las oportunidades están esperando a ser creadas. Así que abramos nuestras mentes, nuestros corazones y, ya que estamos, ¡nuestras puertas! Porque lo único que realmente se interpone entre nosotros y un futuro más diverso es nuestra inacción.

Aquí estamos, celebrando el talento en todas sus formas. La diversidad no solo enriquece el entorno laboral, sino que también alimenta nuestras comunidades. ¡Salud por un futuro donde cada persona tenga la oportunidad de brillar!