En el mundo de los alquileres turísticos, las comunidades de propietarios y los dueños de inmuebles han estado en una especie de guerra fría. La reciente decisión del Tribunal Supremo de España sobre los pisos turísticos ha agitado esta controversia, y es hora de sentarnos a charlar sobre lo que realmente significa esta sentencia para todos nosotros.

¿Qué dijo el Tribunal Supremo?

Hace poco, el Tribunal Supremo estableció que solo se pueden prohibir los pisos turísticos si las comunidades de propietarios lo establecen explícitamente en sus estatutos. Esto significa que si tu comunidad de vecinos no se ha tomado el trabajo de incluir una cláusula clara en sus documentos que impida el alquiler turístico, entonces, tecnicamente, eres libre de alquilar tu propiedad sin temor a represalias.

Esto puede sonar como una victoria para algunos, pero antes de lanzar confeti y poner la música a todo volumen, déjame poner las cosas en perspectiva.

La importancia de los estatutos

Los magistrados del Alto Tribunal fueron muy claros: «la mera descripción del inmueble, con la indicación del destino de sus pisos o locales, no supone una limitación del uso o de las facultades dominicales». Esto quiere decir que, si los estatutos solo prohíben actividades como clínicas de enfermedades contagiosas o consultorios de dentistas, no hay razones sólidas para prohibir un alquiler turístico, ¡por mucho que a algunos les moleste!

Pero… ¿quién no ha tenido un vecino ruidoso? En mi época de estudiante, un colega alquiló un apartamento en un edificio donde la mayoría eran personas mayores. Recuerdo que las quejas sobre las fiestas (que eran más bien cenas con amigos) llegaban a un nivel épico, y la tensión se podía cortar con un cuchillo. La pregunta es: ¿dónde está la línea entre disfrutar de tu vida y ser la pesadilla de tus vecinos?

Contexto de la decisión: un caso particular

El caso que llevó a esta decisión empezó cuando una comunidad de propietarios decidió dar un paso adelante para frenar lo que consideraban «una actividad molesta e incómoda». Al parecer, los pisos turísticos no estaban bien vistos por todos, y decidieron llevarlo a los tribunales.

Los juzgados de primera instancia de Madrid desestimaron la demanda, y eso sí que fue un jarro de agua fría para los opositores al alquiler turístico. Pero no pasó mucho tiempo antes de que la comunidad apelara, y la Audiencia Provincial de Madrid declaró que el alquiler turístico sí contravenía los estatutos del inmueble. Un par de pasos adelante y dos atrás, ¿verdad?

Finalmente, el propietario, que solo quería alquilar su segundo hogar (o lo que sea que representara su inversión), llevó el caso al Tribunal Supremo, que observó que los estatutos no contenían una prohibición expresa para el uso turístico. Voilà, un triunfo para el dueño del piso.

Las interacciones de los vecinos: ¿romance o guerra?

La vida en una comunidad de propietarios puede ser tan divertida como una comedia romántica… o tan tensa como una película de terror, dependiendo de cómo lo mires. A veces se forman alianzas inesperadas; otras, los pasillos se convierten en campos de batalla.

Es interesante notar que los magistrados también hicieron hincapié en que, en diciembre de 2023, habían dejado claro que también es válida la prohibición cuando en los estatutos se veta expresamente que las viviendas se usen para ejercer una actividad económica. ¡Imagínate eso! Luchar por un sueño de Airbnb y luego descubrir que tu comunidad tiene esas restricciones ocultas. Es como comprar un coche y luego encontrar que en realidad no puedes conducirlo porque no tienes la licencia pertinente.

¿Qué significa esto para ti?

Si eres propietario de un piso y has estado considerando entrar en el mundo del alquiler turístico, esta sentencia es un pilar. Sin embargo, no te olvides de mirar más allá del horizonte. Los estatutos de tu comunidad son solo una parte de la historia. Aquí hay algunas preguntas que deberías hacerte:

  1. ¿Cómo saben mis vecinos que estoy alquilando? Si decides dar el paso, asegúrate de que tu imagen no sea como la de un villano con un plan malévolo. Mantén la comunicación abierta para que no se sientan traicionados.

  2. ¿Qué pasa si mis vecinos no están contentos? Siempre hay una o dos personas que parecen tener un radar especial para situaciones problemáticas. Quizás un gesto amable, como unas galletas o una invitación a una cena, pueda ayudar a suavizar tensiones.

  3. ¿Es realmente rentable? Antes de hacer malabares con precios, asegúrate de que el alquiler turístico realmente sea lo que quieres. Enfrentarte al estrés de malentendidos puede salir más caro que un alquiler tradicional en muchos casos.

  4. ¿Tendría sentido hacer cambios en los estatutos? Si vuelves a la comunidad de propietarios y propones un cambio, asegúrate de que se escuche tu voz. Después de todo, ¡no hay nada peor que esperar ésa conversación de «te lo advertí» al final!

Soluciones para las comunidades de propietarios

Si eres parte de una comunidad que está reconsiderando sus estatutos, esta es una buena oportunidad para hacer las cosas bien. Hacer un inventario de las quejas puede ser un buen primer paso. Un formulario en línea, un grupo de WhatsApp, o incluso una reunión por Zoom pueden ayudar a que tu piso no sea el único que esté bajo el radar.

Prohibiciones constructivas

Discutir sobre qué actividades deberían estar prohibidas puede resultar incómodo, pero es esencial. Recuerda que, al final del día, todos quieren vivir en un ambiente confortable. Tal vez incluso podrías organizar una reunión social para discutir temas delicados, aunque es muy probable que al final terminen hablando del último ganador de un reality show.

¿Qué nos espera en el futuro?

Con esta decisión, el Tribunal Supremo ha dejado varias preguntas importantes en la mesa. La tendencia continua hacia la regulación de alquileres turísticos en ciudades grandes como Madrid y Barcelona nos dice que esto es solo el principio.

El equilibrio entre los derechos de propiedad y la necesidad de las comunidades de vecinos de disfrutar de su hogar seguirá siendo un tema candente. Sin duda, seguiremos viendo conflictos en este campo en el futuro. ¿Quién sabe? ¡Tal vez un día recibamos una carta de un juez que declare que cada propietario debe hacer promociones de cenas de pizza para vecinos! Claro está, eso podría solucionar uno de los mayores problemas relacionados con el alquiler turístico: ¡el buen espíritu comunitario!

Reflexiones finales

En resumen, el reciente fallo del Tribunal Supremo sobre los pisos turísticos marca una nueva era en la gestión de comunidades de propietarios en España. Aunque es una victoria para algunos, será importante que los dueños de inmuebles y los vecinos encuentren maneras constructivas de convivir. Así que recuerda: la vida en comunidad puede ser un gran lugar… si todos podemos aprender a escuchar y dejar de lado nuestras diferencias.

Celebremos cada pequeña victoria y enfrentemos cada desafío con una sonrisa (y quizás una buena copa de vino), porque, al fin y al cabo, en este espectáculo llamado vida, todos estamos en el mismo escenario.

Entonces, ¿estás listo para alquileres turísticos? ¿Te unes al festín? ¡Es tu decisión!