La noche del 10 de febrero de 2023, mientras muchos de nosotros disfrutábamos de una tranquila cena, un terremoto de 4.9 grados de magnitud despertó a la localidad de Ksar el-Kébir, al norte de Marruecos. Este temblor no solo impactó su epicentro, sino que también se dejó sentir en diversas provincias del sur de España, desde Sevilla hasta Málaga. Y te preguntarás, ¿qué significan realmente estos eventos para nosotros?

¿Qué pasó exactamente?

El Instituto Geográfico Nacional informó que el terremoto tuvo lugar a las 23:49 horas, a una profundidad de 34 kilómetros. En un abrir y cerrar de ojos, las casas comenzaron a temblar y las personas se encontraron buscando respuestas a este fenómeno natural. Sin embargo, sorprendentemente, no hubo reportes de daños personales ni materiales, lo que puede sonar como una buena noticia, pero ¿qué ocurre cuando el siguiente terremoto es más fuerte?

Los efectos del seísmo en España

Este “…donde el río suena, agua lleva”, como diría mi abuela, se hizo palpable en varias localidades andaluzas. Desde Alcalá de Guadaíra, hasta Dos Hermanas y Córdoba, los ciudadanos sintieron el temblor con intensidades que variaban entre II y III. Pero, ¿alguna vez has sentido un terremoto? Permíteme compartirte una pequeña anécdota.

Recuerdo una vez que vivía en un bonito apartamento en Sevilla. Era un día normal, y de repente, mientras preparaba un café para lidiar con la montaña de trabajo que me esperaba, la tierra empezó a temblar. En un instante, pensé que había dejado el café en el fuego demasiado tiempo y la olla había hecho de las suyas. La sensación de incertidumbre y confusión es indescriptible. Lo que quiero decir es que, aunque este evento puede parecer distante, en realidad puede colarse en nuestras vidas en un instante.

¿Qué hacer en caso de un terremoto?

Seguro que piensas: “bueno, afortunadamente no pasó nada”. Pero, amigos, este tipo de eventos nos recuerda la importancia de estar preparados. Así que, aquí van 20 cosas que hacer antes, durante y después de un terremoto. ¡Agárrate, que esto será útil!

Antes del terremoto

  1. Crea un plan de emergencia: ¿Cómo te encontrarías con tu familia si algo sucediera? Tener un punto de encuentro claro puede ser vital.

  2. Preparar un kit de emergencias: Incluye agua, comida no perecedera, linterna y baterías. No se necesita ser un boy scout para pensar en esto.

  3. Educación y entrenamiento: Ir a cursos de primeros auxilios puede no parecer emocionante, pero cuando alguien se corta, ¡deseas saber qué hacer!

  4. Revisar tu hogar: Asegúrate de que los muebles pesados estén bien sujetos. La última de tus preocupaciones debería ser si la estantería caerá sobre ti.

  5. Comunicación: Asegúrate de tener contactos de emergencia y cómo comunicarte con ellos si se presenta una situación crítica.

Durante el terremoto

  1. Mantente calmado: Víctor, mi compañero de trabajo, me dice que lo urgente es no entrar en pánico. “La gente suele olvidar que la calma fluye”, dice él, un maestro zen.

  2. Busca un lugar seguro: Este debe ser un espacio donde haya algo que te proteja. Abajo de una mesa resistente es ideal.

  3. Evita ventanas y objetos colgantes: Nunca es buena idea intentar tomar una selfie con un espejo en medio de un temblor. Sino, terminas como meme.

  4. Protégete la cabeza y el cuello: Utiliza un cojín, tu mochila, o si eres lo suficientemente rápido, incluso tu gato.

Después del terremoto

  1. Revisa a los demás: Si vives con otras personas, haz un conteo rápido. No queremos que el gato se quede en el tejado.

  2. Identifica daños: Puede que tu casa haya sobrevivido el temblor, pero veamos si hay que llamar a un arquitecto para una inspección.

  3. Sigue las instrucciones de las autoridades: Mantente informado a través de fuentes oficiales de noticias. Nadie necesita rumores alarmantes.

  4. Ayuda a tus vecinos: Comunidades solidarias son comunidades fuertes. A veces una simple llamada puede hacer la diferencia.

  5. Reporta cualquier problema: Si ves daños en redes eléctricas o agua, infórmalo. Tu participación puede salvar vidas.

  6. No uses el teléfono a menos que sea necesario: Durante estos eventos se crítica que las líneas estén ocupadas. A veces es mejor enviar un mensaje corto.

  7. Esperar después del temblor: Sé paciente con las réplicas. No sonrías si el suelo tiembla un poco más. Usa tu sentido común.

  8. Sigue revisando tu salud: Cualquier síntoma inusual podría ser estresante. Tu salud física y mental son claves.

  9. Documenta todo: Si hay daños, fotografía y registra. Esto será útil para el seguro. También podría haber sido un curioso episodio de tu vida.

  10. Prepárate para futuros temblores: Reflexiona sobre cómo te sientes. Muchas veces, incluso los temblores más pequeños pueden dejarnos con experiencias duraderas.

  11. Ríe y cuenta anécdotas: Con el tiempo, estos incidentes pueden parecer graciosos. Sin embargo, recuerda que detrás de cada risa hay valiosas lecciones aprendidas.

Conclusiones y Reflexiones Finales

Un terremoto puede parecer algo distante, un evento que ocurre en rincones olvidados del mundo hasta que se presenta en nuestra puerta. La falta de daños en esta última situación es un alivio, pero no podemos permitirnos dormirnos en los laureles. La preparación y la consciencia son nuestras mejores aliadas.

Así que, ¿tú has pensado qué harías si el suelo comenzara a temblar contigo en medio de una serie de Netflix? A menudo, la vida nos llama a actuar en momentos en los que menos lo esperamos. La incertidumbre no tiene más que una respuesta, y esa respuesta es la preparación.

Si hay algo que aprendí a base de temblores y risas, es que la vida es incierta, pero también increíblemente rica en lecciones. ¿Cuál es tu plan de acción para lo que venga? Solo recuerda, ante cualquier evento inesperado, ¡mantén la calma y sigue adelante!