Año tras año, la crisis demográfica en Corea del Sur se asemeja a esa película en la que el protagonista se encuentra atrapado en un bucle interminable, tentando a la suerte una y otra vez. Mientras se acerca el final de la historia, parece que el guion no se está reescribiendo ni un poquito. En este artículo, nos sumergimos en las últimas iniciativas del gobierno surcoreano para abordar su dramática caída de la tasa de natalidad. ¡Prepárate para una travesía llena de sorpresas, un poco de humor y tal vez un par de reflexiones sobre lo que significa ser padres en el mundo moderno!
Un panorama desalentador
Hablemos de cifras. En enero de 2025, tras una larga serie de descensos, Corea del Sur tuvo 243.000 nacimientos, un pequeño aumento del 3,1% en comparación con 2024. ¡Albricias, ¿verdad?! Pero aquí está el giro cómico: a pesar de este ligero repunte, el país todavía se aferra a un descenso implacable, dado que hace apenas diez años, en 2015, contabilizaba casi 444.000 nacimientos. Hablando de una caída libre, ¿eh?
Lo que quizás no saben es que, según los datos del World Bank Group, la tasa de fecundidad en Corea del Sur ha caído de un preocupante 5,9 en 1960 a un desolador 0,8 en 2023. ¡Wow! Para los que no están familiarizados con las estadísticas de natalidad, eso es como intentar llenar una piscina con una manguera que tiene más agujeros que una red de pesca.
Pero más allá de los números, lo que realmente resuena aquí es el impacto en la sociedad surcoreana. Con una población cada vez más envejecida y un panorama laboral que se enfrenta a la escasez de mano de obra, el país se encuentra ante un desafío monumental. Como padres, ¿alguna vez han sentido que las expectativas son tan altas que prefieren ver a su gato en lugar de tener un bebé? ¡Eso es precisamente lo que Corea del Sur está tratando de cambiar!
Medidas desesperadas: un enfoque innovador
Aquí es donde se desarrolla la parte interesante de nuestra historia. El gobierno de Corea del Sur ha lanzado una serie de iniciativas creativas para intentar revertir esta tendencia. Me hace recordar a mi amigo Manuel, quien cada vez que se queda sin dinero en su billetera, comienza a vender cosas de su casa (como una lámpara de pie de los años 70 que juró que tenía «valor histórico»). Así que, ¿qué medidas ha propuesto el gobierno surcoreano?
Subsidios para horarios flexibles
La primera de esas medidas es una oferta de subsidios a pequeñas y medianas empresas. A partir de marzo, en la ciudad de Suwon y la provincia de Gyeonggi, las empresas que permitan que los padres de niños en primer grado comiencen a trabajar a las 10 a.m. podrán recibir hasta 600.000 wones (aproximadamente 450 dólares) por empleado durante dos meses. La idea aquí es aliviar la carga de cuidado infantil durante una etapa crítica de la vida escolar.
Imaginemos el rostro de un padre después de pasar toda una mañana vestirse, alimentar a los niños y lidiar con sus múltiples dramas, y de repente se siente como si estuviera en una escena de una película de acción, ayudando a un pequeño a prepararse para el primer día de clases. Este subsidio no solo ayuda a las familias a sobrellevar esa etapa, sino que también se siente como un pequeño respaldo del universo. ¿No gustaría que hubiera un subsidio para sobremesas familiares sin discusiones también?
Carne premium para nuevas mamás
¿Y qué tal si les dijera que está en juego una versión de ‘Supermarket Sweep’ pero con… ¡carne premium? La provincia de Gyeonggi expandirá su programa piloto que ofrece paquetes de carne premium hanwoo a las madres que registren el nacimiento de sus hijos. Imagínense a una nueva madre, agotada tras una larga noche con el recién nacido, recibiendo un paquete de carne. Es un alivio que, en comparación con los pañales, suena más que atractivo. ¡Vamos a ser sinceros!
Además, debido a la inflación (gracias 2023), el presupuesto destinado a este proyecto aumentó para cada paquete de 50.000 a 100.000 wones, beneficiando a unas 40.000 mamás en 2024. ¿Quién diría que la carnicería podría convertirse en una aliada en la maternidad? Aunque eso sí, la trampa es que estas ofertas no están disponibles en las principales ciudades, ¡así que si vives en Suwon estás un poco más afectado que los demás! ¿Por qué no podemos incluir a todos en la fiesta de la carne?
Otras iniciativas en la mesa
Este combo de incentivos no puede considerarse el primer rodeo de Corea del Sur. A lo largo de los años se han implementado diversas iniciativas, desde contratar niñeras extranjeras hasta programas de citas y propuestas para que las niñas comiencen el colegio antes. Es un poco como ver un puñado de cartas en la mesa y esperar a que una de ellas sea un triunfo definitivo.
Las propuestas varían desde la manera en que las parejas pueden ser alentadas a tener más hijos hasta cómo el gobierno busca hacer que la crianza sea más accesible, en un contexto donde la preservación de la vida familiar se convierte en una necesidad. Por ejemplo, cientos de propuestas engrosan la lista de intentos por hacer que cualquier persona que decida formar una familia reciba un empujón en la dirección correcta.
Un futuro incierto
Entonces, llegamos a la pregunta del millón: ¿Son suficientes estas iniciativas para revertir la tendencia a largo plazo? ¡Ah, la eterna lucha entre el optimismo y la realidad! Sin duda, el panorama demográfico de Corea del Sur no se resolverá con una varita mágica. E incluso con la carne premium y los subsidios, es necesario aplicar cambios más profundos en la cultura laboral y social del país.
Para aquellos que son padres en este momento, lo que se necesita es un cambio mental más que físico. Pienso en aquellos padres solitarios que navegan en la crianza y tratan de ser el superhéroe perfecto, a menudo sintiendo que es un trabajo a tiempo completo con turnos adicionales. La sociedad necesita evolucionar hacia una que apoye integralmente a la familia, que incluya una empatía genuina hacia sus necesidades.
Reflexiones finales
Como hemos visto, la lucha gloriosa y a menudo frustrante por mejorar la tasa de natalidad en Corea del Sur es un reflejo de desafíos universales que enfrentan muchas naciones. Nos recuerda que la paternidad hoy se ha vuelto un acto de fe, de resistencia y, a veces, de desesperación.
Al final del día, no hay un enfoque mágico para recuperar lo que se ha perdido en términos de paternidad y crianza. Pero, ¿quizás la clave sea seguir intentando, innovando y creyendo en que, con un poco de carne premium y un subsidio, cada familia pueda encontrar su lugar en el cuento de hadas de la vida moderna? ¿Ustedes qué piensan?
Es fácil reírnos de las medidas inusuales, pero es importante entender el trasfondo humano que hay detrás. La lucha de Corea del Sur por mejorar su tasa de natalidad no solo se trata de números, sino de construir un futuro donde las familias puedan crecer y prosperar. Y, aunque suene un poco irónico, quizás un paquete de carne premium no sea tan mala idea al final, sobre todo si puede despertar el apetito por la paternidad.