¿Te has preguntado alguna vez por qué la gente se excita tanto con cada nuevo lanzamiento del iPhone? Yo lo hice por primera vez cuando vi a un amigo enloquecer por la llegada de un nuevo modelo mientras yo apenas podía distinguir entre el anterior y el actual. Apple ha logrado crear un culto en torno a su tecnología, y el iPhone 16 Pro no es la excepción. ¿Pero vale la pena todo el alboroto? Vamos a desglosar lo que trae esta nueva joya de la tecnología.


Un diseño que evoca familiaridad

Si has estado siguiendo la evolución del iPhone en los últimos años, lo primero que notarás al ver el iPhone 16 Pro es que su diseño es tan familiar como un viejo amigo. En términos de medidas, el iPhone 16 Pro se encuentra en la misma línea que el 15 Pro, con la diferencia de que ha crecido ligeramente en peso y en tamaños de pantalla. Pasamos de un tamaño de 6,1 a 6,3 pulgadas. Recuerdo haber oído a un amigo decir que tenía que hacer un ejercicio en el gimnasio solo para cargar su nuevo iPhone, y ahora parece terminar siendo una carrera hacia la sala de urgencias. ¿Son realmente estos cambios necesarios?

¡Sí, sí lo son! Lo que Apple ha hecho es crear una ligera mejora en el peso y el diseño, al mismo tiempo que se siente como un teléfono «compacto». Pese a sus 199 gramos, el nuevo modelo sigue siendo fácil de manejar. El titanio sigue presente en los laterales, marcando una elegancia que sigue sin igualar a otros competidores. No hay nada como un iPhone en la mano para elevar tu estatus social un par de escalones, ¿no?


Pantalla: Una extensión de tu visión

Pero, ¿más brilloso?

El Super Retina XDR se renueva para ofrecer un brillo de hasta 2,000 nits, un deleite visual si piensas en tomar fotos en días soleados. Pero, honestamente, no hace tanto “wow” como podrían las especificaciones. Aunque el brillo en exteriores es impresionante, no se siente particularmente revolucionario. ¿Has escuchado ese viejo refrán, «si no está roto, no lo arregles»? Pues parece que Apple se lo ha tomado demasiado al pie de la letra esta vez.

Aun así, la calidad de la pantalla sigue siendo excepcional, con la fluidez del ProMotion a 120Hz haciendo que todo se sienta más ‘suave que mantequilla sin untar’. Pero hay algo inquietante en poder hacer scroll y preguntarte si realmente necesitas esa tasa de refresco de 120Hz, o si más bien es otra forma de Apple de hacernos gastar más dinero.


Sonido: Un salto hacia la calidad

La música nunca suena tan bien

Apple ha afirmado que el audio en este iPhone va a ser un cambio radical. Como amante de la música, aplaudo esta iniciativa. Los nuevos micrófonos y altavoces hacen un trabajo excepcional. Puedo compartir un pequeño secreto: mientras hacía las pruebas, me olvidé por completo de mi música previa, ya que el iPhone 16 Pro convirtió incluso una aburrida charla en una experiencia acústica envolvente. Ahora, si tuviera que calificarlo, diría que el sonido es como ese amigo que siempre tiene el playlist perfecto en una fiesta. Un grato descubrimiento.

Y para aquellos que son como yo y disfrutan un poco de audio analógico, los AirPods Pro 2 mejoran la experiencia, haciendo que te olvides de que te encuentras en el tren y no en un concierto en vivo. Pero, ¿deberíamos necesitar un dispositivo adicional para mejorar lo que deberían ser los altavoces de nuestros teléfonos?


Rendimiento: Más rápido, no que “sin sangre”

El chip A18 Pro renueva la promesa de rendimiento

El chip A18 Pro promete un rendimiento un 15% más rápido y un 20% más eficiente en términos de energía en comparación con su predecesor. ¿Pero realmente lo he notado? En mis pruebas, me he dado cuenta de que el chip es una bestia. Jugar a «Resident Evil» y realizar multitasking nunca ha sido tan elogiable.

Sin embargo, me quedé pensando: ¿realmente necesitamos este nivel de potencia? ¿Acaso no podemos disfrutar de nuestras redes sociales y hacer scroll sin sufrir un ataque al corazón por la falta de velocidad? Mi viejo iPhone 11 se lleva bien con el día a día, y la sinceridad nos dice que quizás el A18 Pro es un pequeño lujo más que una necesidad.


Fotografía: ¿Más de lo mismo?

Un nuevo botón para nuestra cámara

Un gran protagonista de la cámara es el nuevo botón de Control de Cámara. Un botón que básicamente hace lo que ya sabías, pero ahora con un poco de redundancia y el riesgo de que accidentalmente se active mientras intentas tomar una selfie. La pregunta quedaría: ¿realmente necesitamos un botón solo para tomar fotos? Tal vez sería mejor un botón que, en lugar de disparar automáticamente, nos sirviera un café para enfrentar nuestras vidas. Ahora eso sería una innovación.

Aunque sea un alivio que la calidad de las cámaras se mantenga alta, las mejoras no son radicales. La cámara principal continúa con un sensor de 48 MP, pero no esperes una diferencia al comparar fotos entre el iPhone 15 Pro y el 16 Pro. Hablando en términos de calidad, es como cambiar de una pizza deliciosa a otra. Sigue siendo buena, pero no hay nada que realmente haga explosión dentro de ti.


Autonomía: Esta vez un pequeño respiro

Más horas y menos carga

La autonomía ha mejorado, llegando a ofrecer hasta cuatro horas más de reproducción de vídeo. Para aquellos que pasan el día buscando un enchufe, esto es música para sus oídos. En mi caso, con un uso normal, el día se convierte en una carrera que, intuirás, termina sin apuros. No más esa ansiedad de tener que guardar tu batería para la llamada más importante de la semana.

¿Pero a qué costo? Con este iPhone, tienes un compañero fiel, pero también una advertencia silenciosa: si isola un poco la carga en un tuit de 280 caracteres, no te preocupes, el día joven se va a acabar más rápido que el café en este artículo.


Conclusión: Familiar pero diferente

El iPhone 16 Pro se siente como una evolución menor. Si vienes de un iPhone 15 Pro, probablemente te preguntes si realmente merece la pena el cambio. Sin embargo, si estás dando el salto de modelos anteriores, apreciarás las mejoras en autonomía, sonido y algunas funciones de cámara. En resumen, el iPhone 16 Pro es ese amigo que siempre mejora un poco pero que en el fondo, siempre ha sido el mismo.

¿Es el mejor smartphone del mercado? La competencia sin duda se ha intensificado, y en mi opinión, no es el único campeón. Pero como todo lo que hace Apple, está diseñado para cautivar y hacerte sentir que estás en una comunidad especial. ¿Y qué más podría querer uno que ser parte del ‘club de los iPhone’?

Así que, ¿merece la pena dar el salto? Esa respuesta queda en tu mano. O en tu bolsillo.


Espero que encuentres esta reflexión sobre el iPhone 16 Pro útil para decidir si te unes a la nueva ola de Apple o prefieres seguir navegando por mares más tranquilos con dispositivos más viejos. ¡La elección es completamente tuya!