La música es un arte que, al igual que la vida misma, evoluciona, muta y a menudo se reinventa. En este sentido, Subterfuge Records ha sido un protagonista que ha surcado los mares del indie en España desde su fundación en 1989. ¡Imagina un mundo sin esta discográfica! ¡Pobre de nosotros! No tendríamos a Dover, a Los Planetas ni a esa horda infinita de bandas que han hecho vibrar nuestros corazones y nuestros pies en las noches de fiesta. En este artículo, haremos un recorrido por la trayectoria de Subterfuge, desde sus humildes comienzos hasta su actualidad celebrando 35 años de historia.

La génesis de un sueño: un fanzine hecho realidad

Carlos Galán y su compañera Gema del Valle no tenían idea de lo que sería su futuro cuando se aventuraron a editar su primer número de un fanzine en aquella Madrid de los 90, donde la Movida daba sus últimos suspiros. «El circuito indie era aún un bebé en pañales», recuerda Carlos en una entrevista reciente. Era la época en la que los colores flúor ya estaban empaquetados y enviados al olvido, y en su lugar surgía un movimiento donde Malasaña se convertía en El Dorado de muchos jóvenes ávidos de música y cultura.

El descubrimiento de una escena

Imagina esto: 40 o 50 jóvenes, todos con esas camisetas de bandas que son más que ropas; son un estandarte de pertenencia y rebeldía. Dover, Fangoria, Los Fresones Rebeldes, ellos eran los ídolos, pero también eran amigos, compañeros de juerga. ¿Quién no ha hecho amigos en esos garitos pequeños llenos de misticismo? Carlos confiesa que se conocían todos y que la vida giraba en torno a los conciertos en lugares emblemáticos como La Vía Láctea. Era el inicio de todo, y cada acción parecía cargada de potencial.

Un golpe de suerte: la revolución indie

El año 1993 marcó un hito: Subterfuge lanzó «Pizza Pop» de Australian Blonde, un disco que no solo catapultó a la banda, sino que ayudó a definir el sonido de una generación. En ese momento, un grupo de bandas emergentes como Los Planetas, Sexy Sadie y El Inquilino Comunista comenzaban a tejer un espacio en el que el indie se consolidaría.

Pero, ¿cómo fue vivir ese momento? Amparo Llanos, guitarrista de Dover, recuerda el día en que conocieron a Carlos. «Nos citamos tan tarde que llegamos exhaustas. No teníamos idea de que lo que estaba por suceder cambiaría nuestras vidas por completo», dice, riendo. «Era excitante y aterrador a la vez». ¿Alguna vez has sentido la presión de decidir tu destino justo antes de firmar un contrato?

La explosión de Dover

Cuatro años después, la historia vuelve a girar. En 1997, Dover lanza «Devil Came to Me». En una semana, la banda había vendido más copias de lo que cualquier otra banda en el sello había hecho en un año. «Fue digno de estudio sociológico», reflexiona Amparo, «fue como si España se volviera loca con esta bola de nieve, creciendo cada vez más». Carlos, por su parte, añade que fue un momento de satisfacción y alegría, pura adrenalina.

Una relación extraordinaria

Carlos y Gema han llevado bastante bien esa fama repentina. Ellos cuentan cómo navegar a través de ese maremoto de éxito fue una aventura llena de aprendizajes e historias. «Sobrevivir al éxito de Dover fue una proeza increíble», comenta Carlos. ¿Y a quién no le gustaría ser parte de una pequeña discográfica que de repente se convierte en la sensación del momento?

Subterfuge hoy: una historia sin fin

Este aniversario no es solo una celebración del pasado. A lo largo de los años, Subterfuge ha sabido adaptarse y experimentar. Desde el surgimiento del formato digital hasta la creación de podcasts, el espíritu de innovación sigue vivo. «En 2025, seguimos disfrutando de lo que hacemos», afirma Galán, «nunca hemos perdido de vista nuestra esencia». La compañía ahora también gestiona Subterfuge Radio y el festival iberoamericano de creación sonora Estación Podcast. ¿Hay algo que no se atrevan a tocar?

Una mirada a la cultura actual

Hoy, artistas como Niña Polaca, La La Love You, y Colectivo da Silva forman parte del repertorio fresco y diverso que tiene Subterfuge. Y no olvidemos que, a pesar de transformaciones, el amor por la música independiente se mantiene intacto. “Hemos evolucionado a la par de Madrid”, dice Galán, “¡estamos enamorados de nuestra ciudad!”. Sin embargo, reconoce que hay algo triste: el uso y abuso del término «indie». «Me apena que se diluyan los términos», confiesa.

Celebrando una historia vibrante

Así como cualquier buena historia, Subterfuge no es solo acerca de números y éxitos. Es un ejercicio constante de amor, pasión y un poco de locura. Orquestar el lanzamiento de un nuevo disco es un proceso lleno de retos, decisiones difíciles y sobre todo, una comunidad vibrante de artistas, fans y creativos que siguen alimentando esa llama.

A cada paso, estas tres décadas y media de Subterfuge han estado marcadas por la autenticidad y la valentía de ser diferentes. Ya saben, esas decisiones a veces difíciles pero necesarias que nos llevan al siguiente nivel.

Reflexiones finales

¿Qué nos lleva a considerar la música como parte integral de nuestro ser? ¿Cómo una pequeña discográfica puede moldear no solo una industria, sino también la cultura de un país? Subterfuge, con su mezcla de determinación y deseo de celebrar lo nuevo, ha demostrado que el espíritu de la independencia y la creatividad sigue vivo.

Así que la próxima vez que escuches un disco de Dover, de Los Planetas o de algún nuevo artista emergente, recuerda que detrás de cada melodía hay una historia, un viaje recorrido y un sueño que sigue creciendo. Un aplauso para Subterfuge. ¡Que vengan otros 35 años más!

¿Y tú, quién es tu artista indie favorito que no deberíamos dejar pasar? ¡Cuéntamelo en los comentarios!