Las redes sociales ardían con las últimas noticias sobre el Partido Popular de la Comunidad Valenciana (PPCV). Motivo de esa efervescencia: un manifiesto lanzado por militantes afines al expresidente de la Generalitat, Francisco Camps. Pero, ¿qué ha llevado a este grupo a exigir un congreso ordinario del partido, programado para el próximo mes de julio? En este artículo, vamos a desglosar la situación del PPCV y lo que podría significar para el futuro político de la región.

Contexto actual del PPCV: ¿un partido en crisis?

Desde que el PP gobernó en la Comunidad Valenciana, mucho ha cambiado. El cerco se ha ido cerrando sobre el actual presidente, Carlos Mazón, quien ha visto cuestionada su gestión, especialmente tras la reciente dana del 29 de octubre. Aparentemente, los vientos políticos no soplan a su favor, y el manifiesto de los afines a Camps podría ser un síntoma de un descontento más profundo. ¿Es este el último intento del PPCV por recuperar su singularidad y liderazgo en la política valenciana?

Los firmantes del manifiesto abogan por «reconstruir el PPCV» y devolverlo a su papel de líder en la región. Sin embargo, esto plantea una pregunta fundamental: ¿es posible revivir un partido que ha estado en minoría desde julio del año pasado, tras la ruptura con Vox? Cuando un barco empieza a hundirse, ¿debería ser la tripulación la que decide a quién salvar, o estaríamos hablando de un egoísmo colectivo?

La llamada a la unidad y el liderazgo

El manifiesto es un claro llamado a la unidad entre los militantes, un grupo que parece estar dispuesto a dejar atrás sus diferencias internas. «El PPCV ha de ser lo que sus militantes quieran que sea», exigen los autores del texto. Esta frase me resuena al recuerdo de una conversación que tuve con un amigo sobre la importancia de la cohesión en cualquier grupo. Recuerdo la anécdota sobre un equipo de baloncesto que, tras perder varias veces, decidió cambiar de estrategia y escuchar a cada uno de sus miembros. Resulta que descubrieron que todos tenían algo valioso que aportar. Un líder eficaz no solo guía; escucha y aprende.

Los militantes que apoyan a Camps han identificado valores que desean recuperar: unidad, liderazgo y lealtad a España. Es evidente que buscan reactivar a un partido que necesita la participación activa de toda su militancia. Lo que no queda del todo claro es si esto será suficiente para captar la atención del electorado. ¿Sabrán realmente los votantes del PPCV qué desean en este momento, o es todo un juego de palabras para quedar bien con el público?

La historia del PPCV en Comunidad Valenciana

No se puede hablar de la Comunidad Valenciana sin mencionar la historia del PPCV. Fue bajo su liderazgo que la región logró trascender en varios ámbitos, desde la Fórmula 1 hasta la America’s Cup. Este tipo de logros han sido fundamentales para marcar una identidad valenciana única, y los firmantes del manifiesto no tienen miedo de recordarlo: «Cuando el PP gobernó, la Comunidad Valenciana lideró proyectos que aportaron a España una proyección internacional».

Esto me recuerda a uno de mis días de turismo por Valencia, donde visité el Oceanogràfic. Mientras admiraba los delfines, pensaba en cómo esos impresionantes proyectos, promovidos en su momento por el PPCV, siguen atrayendo a millones de visitantes. Sin embargo, la pregunta que flota en el aire es: ¿puede un partido que ha estado en la cuerda floja volver a vivir de sus glorias pasadas, o debe promover un cambio genuino?

Un llamado a las bases: ¿es el congreso la solución?

El manifiesto pide la convocatoria del Congreso ordinario, donde se espera que los militantes elijan directamente su presidencia y dirección. ¿Por qué esto sería un cambio tan significativo? Dado que el partido ha estado gobernando en minoría, es crucial que las bases se sientan comprometidas y escuchadas. Cuando los miembros de un partido sienten que su voz cuenta, hay mayor potencial para una resurrección política. Despertar ese sentido de pertenencia podría ser la clave para recuperar la confianza del electorado.

Recuerdo una charla que tuve hace tiempo con un viejo amigo que trabaja en una ONG. Me contó cómo las decisiones que involucran a las bases pueden transformar por completo la dirección de un proyecto. En su organización, cada voluntario tenía la oportunidad de opinar sobre los objetivos, y eso les permitió crecer y adaptarse a las necesidades de la comunidad. ¿Podría ser el mismo enfoque lo que el PPCV necesita ahora?

La incertidumbre de la política actual: ¿puede Mazón sostenerse?

Mientras el PPCV se tambaleará con sus conflictos internos, Carlos Mazón se enfrenta a otro nivel de presión: la incertidumbre. Desde su cuestionada gestión durante la crisis de la dana, ha sido objeto de críticas, y la vicepresidenta Susana Camarero se ha mostrado esquiva en cuanto a referirse a esas tensiones internas. «No tengo nada que opinar», ha dicho. Eso suena más a una evasión que a una verdadera postura política.

Aquí es donde entramos en el delicado baile que es la política. Mientras los militantes piden un regreso a las raíces, ¿Mazón será capaz de mantener su liderazgo o encontrará su caída inevitable? En política, a veces es más fácil echar la culpa al mal tiempo que asumir la responsabilidad de un camino que ha llevado a aguas turbulentas.

Conclusiones: ¿el futuro del PPCV se encuentra en manos de sus militantes?

El manifiesto lanzado este martes suena como un llamado a la acción colectiva más que a un simple grito vacío. Los afines a Camps no solo están buscando recuperar el antiguo esplendor del PPCV, sino que también quieren que sea un espacio inclusivo donde la opinión de todos cuente. La magnitud de esta tarea es Hercúlea, especialmente cuando los ecos de la historia pasada y las expectativas del presente chocan.

El futuro del PPCV podría depender en gran medida de cómo se gestionen estos conflictos internos en el congreso próximo. Si logran “reunificar” a los votantes que antaño confiarían en sus siglas, podrían estar sentando las bases para un renacer político. Pero esto no es sencillo: se requiere empatía, escucha activa y un deseo genuino de evolucionar.

Y, por último, pregunto a los lectores: ¿Qué opinión tienen sobre el futuro del PPCV? ¿Pueden realmente volver a ser los líderes que una vez fueron? La historia del PPCV no se ha escrito del todo —y tú, como votante, podrías ser parte de esa narrativa.