El euríbor, ese término que puede sonar como si hubiera salido de un libro de ciencia ficción, es en realidad el índice al que se ajustan muchas hipotecas variables en España. Desde hace un tiempo, ese índice ha estado en una queja constante de descensos. ¿Pero qué significa esto para nosotros, los humildes mortales que solo queremos entender de una vez por todas cómo ese número impacta en nuestras vidas? Aquí te lo contamos todo en un viaje que promete ser tan interesante como el último capítulo de tu serie favorita.

Contexto actual del euríbor: la montaña rusa emocional

En el último año, el euríbor ha estado en una montaña rusa emocional. Si bien en sus días más oscuros podría haber sido el antagonista de muchas familias (voy a referirme a él como el «villano» de nuestra historia), hay que admitir que los últimos cambios parecen indicarnos que ha decidido poner su lado más amable.

Desde que el Banco Central Europeo (BCE) empezó a cambiar su política monetaria, el euríbor ha ido cayendo, casi como si hubiera tomado la decisión consciente de ser más amable con el ciudadano de a pie. Recuerdo cuando revisé mis condiciones hipotecarias por primera vez. La emoción de recibir la carta del banco era similar a abrir regalos en Navidad, pero, en mi caso particular, el «regalo» vino con un incremento en la cuota. Ahora, sin embargo, parece que la historia podría ser diferente para muchos.

¿Qué ha estado sucediendo?

Desde hace más de un año, la tendencia es a la baja. En diciembre de 2023, el euríbor se ubicaba en un 2.43%, una cifra que no veíamos desde hace más de dos años. Esto puede parecer un número muy técnico, pero lo que realmente significa es que muchos de nosotros estamos a punto de ver una rebaja en nuestras mensualidades —sí, suena como música para nuestros oídos—.

En términos más claros, si tomamos un préstamo medio para vivienda de 150,000 euros a 25 años con un interés del euríbor + 1%, el cambio en la mensualidad es nada menos que 104 euros menos al mes. Esto se traduce en un ahorro anual de 1,248 euros. ¡Eso sí que es un alivio! A veces pienso en todas esas cosas que podría hacer con ese dinero. ¿Un viaje? ¿Una cena con amigos? O quizás comprarme un par de zapatos que he estado mirando.

¿Dónde vamos desde aquí?

De acuerdo con los análisis de entidades financieras, la tendencia a la baja parece que seguirá en 2024 y 2025. Con recortes previstos en los tipos de interés del BCE, el euríbor podría descender hasta el 2% en la segunda mitad de 2024 e incluso tocar la cifra de 1.75% hacia finales de 2025. ¡Eso es un cambio muy emocionante!

Pero, espera un momento. Aún queda una incógnita en toda esta historia: ¿Cuántas bajadas de tipos hará el BCE y cuán agresivas serán? Ahí es donde los analistas parecen tener sus dudas, como cuando intentamos predecir el final de una buena serie de Netflix. Pero siguen adelante con sus proyecciones, y no podemos dejar de sentirnos intrigados.

El efecto de las nuevas hipotecas

Es importante recordar que estas caídas en el euríbor no solo afectan a quienes ya tienen hipotecas variables. También impactan a quienes buscan nuevas hipotecas, ya que los bancos, al ver que el índice cae, deciden ser más generosos en sus ofertas. Es un ciclo: el euríbor baja, las hipotecas se abaratan, los consumidores sonríen. Y, sinceramente, todos necesitamos un motivo para sonreír en estos días, ¿no crees?

Reflexión final

Puede que al final de esta lectura te sientas un poco más informado, o al menos sobre cómo cada milésima de cambio en el euríbor afecta tu economía familiar. De verdad creo que entender esto es como un superpoder que nos permite tomar decisiones más informadas sobre la hipoteca y la casa de nuestros sueños. Lo único que necesito ahora es un poco más de café y quizás una siesta—eso suele ayudar a procesar toda esta nueva información.

Sin embargo, hay un pequeño pero importante recordatorio. Aunque estos descensos en el euríbor son una buena noticia, no debemos olvidar otros factores en juego. Como la creciente tendencia al encarecimiento de la vivienda en España, que podría poner un freno a nuestras esperadas bajadas de hipoteca. Como dice el viejo dicho: «No hay almuerzo gratis».

Así que, mientras celebramos la caída del euríbor, no perdamos de vista todo el contexto. Y tú, ¿te sientes aliviado por estas noticias? ¿O prefieres que las cosas sigan igual? ¡Déjanos saber tus pensamientos!