La segunda semana de octubre en Sevilla no solo marca un hito en el calendario religioso de la ciudad, sino que representa una oportunidad perfecta para sumergirse en la rica herencia cultural y espiritual que esta localidad ofrece. Desde los besamanos de la Virgen de Araceli en San Andrés hasta las espléndidas exposiciones que las hermandades tienen preparadas, parece que cada rincón de la ciudad se transforma en un escenario donde la devoción se encuentra con el arte. Pero, ¿qué es lo que hace que esta semana cofrade sea tan especial? Acompáñame en este recorrido que no solo busca informar, sino también conectar emocionalmente con lo que significa vivir estos momentos.

¿Qué son los besamanos y por qué son tan importantes?

Si alguna vez te has preguntado por qué tanta gente dedica tiempo a participar en los besamanos, aquí va una pequeña lección sobre esta tradición. En esencia, un besamanos es un acto de veneración en el que los fieles pueden acercarse a las imágenes de los santos o vírgenes, en este caso, a la Virgen de Araceli, por ejemplo, y besarlas o tocarlas. Es una forma de acercamiento emocional que se ha cultivado durante generaciones.

Recuerdo la primera vez que participé en un besamanos, era un día soleado y la atmósfera estaba impregnada de un bonito sentimiento de comunidad. La gente se reunía, no solo para rendir homenaje a la imagen, sino también para reencuentros familiar, anécdotas compartidas y, por supuesto, alguna que otra risa. Ese día, mi abuela me contó la historia de una promesa que había hecho a la Virgen de la Piedad, “cuando el Sevilla gane la liga, iré a darle un beso”, reía mientras recordaba lo que parecía una historia de décadas atrás. ¿Ves? Las tradiciones dan pie a historias que son puro oro emocional.

Un itinerario repleto de eventos cofrades

Viernes 11 de octubre: el viaje comienza

El primer día de esta semana de celebraciones comienza con la exposición «Cien años de Hermandad» organizada por los Estudiantes. Si eres como yo, que siempre está buscando aprender más sobre la rica historia de la Semana Santa en Sevilla, este tipo de exposiciones son verdaderas joyas del conocimiento. Ubicada en el Real Círculo de Labradores y Propietarios, tendrás la oportunidad de ver la evolución de la hermandad a lo largo de un siglo. Así que, armándome de una buena dosis de curiosidad y, por qué no, también de unas cuantas empanadillas de la feria, ¡allá que voy!

Besamanos y donaciones

El viernes también es notable por el besamanos a la Virgen de Araceli en la parroquia de San Andrés. Este evento no solo representa la devoción de los fieles, sino que también se convierte en un momento para la comunidad. ¿Quién puede resistirse a una buena misa? Personalmente, me encanta escuchar las historias que surgen durante estas reuniones. Como el año pasado, cuando un anciano, visiblemente emocionado, compartió cómo había dejado de lado muchas diferencias en sus relaciones familiares mientras hacía fila para besar a la virgen.

No se olviden, además, de la fantástica donación de sangre que tendrá lugar en unión con el Centro de Transfusiones Sanguíneas. Este tipo de eventos no solo rescatan el espíritu solidario que nos caracteriza, sino que también permiten hacer un bien tangible, ¿verdad?

Sábado 12 de octubre: un día enérgico

Si pensabas que el viernes era un día ajetreado, ¡espera a ver lo que el sábado tiene reservado! El rosario de la aurora con la imagen de la Virgen del Rosario comienza a las 7 horas. ¿Te imaginas la belleza de ese amanecer con el ir y venir de las velas y los devotos? Es una experiencia que se te queda grabada en el alma.

Entre la algarabía, también se lleva a cabo el besamanos a la Virgen del Rosario en la parroquia de la Milagrosa. Desde luego, si buscas un espacio de paz y reflexión en medio del bullicio, este es el lugar perfecto. Aquí es donde muchas personas sienten una conexión directa con lo sagrado. Este fin de semana me encontré con un amigo, tras terminar su apoyo a la parroquia voluntariamente: “es un lugar que alimenta el alma”, dijo. No puedo estar más de acuerdo.

Exposiciones artísticas

La exposición del Baratillo cobrará vida en la fundación Cajasol, donde se presentará el patrimonio dedicado a la Virgen de la Piedad. ¡Un adelanto! Si eres amante del arte, la visita a esta exposición te llevará por un viaje visual que explora no solo la cultura religiosa, sino también la maestría de los artistas que han plasmado su fe en diversas formas.

Domingo 13 de octubre: consolidando la fe

El domingo no se queda atrás. Luego de los besamanos, la parroquia de San Julián se prepara para recibir también a los devotos. La exposición «Cien años de Hermandad» sigue abierta, así que si no has tenido la oportunidad de visitarla, ¡aún tienes tiempo!

En este día, también se llevará a cabo un curso de lectura en Misa, impartido por un periodista y profesor de manera gratuita. Es un recordatorio de que la educación y la espiritualidad pueden ir de la mano. ¿Cuántas veces hemos oído que la fe sin obras es muerta? Esta es una oportunidad perfecta para darle vida a esa frase.

La magia de la música y la devoción

No podemos olvidarnos de la parte musical de la celebración. Las bandas de música que acompañan los pasos procesionales traen una mezcla exquisita de sentimiento y emoción. Desde la banda de música «María Stma. de la Victoria» hasta los sones más tradicionales, cada melodía evoca la herencia de un pueblo que ha sabido fundar sus tradiciones en notas que resuenan a lo largo de los años.

La experiencia emocional de unirse a la comunidad

Al final del día, ¿qué es lo que hace que todo esto valga la pena? La respuesta es sencilla: la comunidad. Las tradiciones cofrades no solo son actos de devoción, sino también celebraciones comunitarias que permiten a las personas conectar, compartir y recordar. En tiempos inciertos y difíciles, es revitalizador ver a tantos reunidos en nombre de la fe y la cultura.

Como anécdota personal, recuerdo un año en el que una fuerte lluvia amenazó con arruinar el rosario. Sin embargo, a pesar de las inclemencias del tiempo, los devotos salieron a las calles. Aquella imagen de la comunidad unida bajo un paraguas, cantando y rezando, se quedará conmigo para siempre. La fe de las personas pertenece a una categoría única, donde lo imposible puede llegar a ser posible.

Reflexiones finales

Así que, si tienes planes para este segundo fin de semana de octubre, te insto a que te sumerjas en la experiencia cofrade. Cada besamanos, cada misa y cada exposición cuenta una historia que ha pasado de generación en generación. En una era donde a menudo nos sentimos desconectados, la Semana Cofrade en Sevilla se convierte en un recordatorio viviente de que la tradición, el arte y la fe están entrelazados en la esencia misma de nuestra comunidad.

Recuerda, hay magia en el aire. Así que, mientras recorres las calles de Sevilla, escucha con atención; cada canción, cada oración y cada susurro tiene algo que contar. Como decía mi abuela, “la fe se cultiva como una planta: con amor y atención.” Y en esta hermosa ciudad, la fe florece, especialmente en octubre. ¿Te atreverás a descubrirla?

Si deseas más información sobre estos eventos, echa un vistazo a la agenda completa en Pasión en Sevilla. Quedarás cautivado, lo prometo.