La Feria del Libro de Sevilla 2024 ha llegado a su fin, y parece que este año ha dejado huella de una manera muy particular. Si no tuviste la oportunidad de asistir, no te preocupes; aquí te cuento lo más destacado. Prepárate, porque esto va a ser como un maratón literario: a veces rápido, a veces reflexivo, y, por supuesto, sin perder la parte divertida.
Un cierre de altura con Juan Gabriel Vásquez
Juan Gabriel Vásquez, reconocido por muchos como el escritor en español más prominente de nuestro tiempo (¡toma eso, Vargas Llosa!), ha puesto un broche de oro a este festival. Imagine esto: un escritor tan influyente que puede hacer que todos nos detengamos un momento y reflexionemos sobre nuestras vidas a través de la literatura. En la conversación que tuvo, abordó un tema que a todos nos preocupa, como un elefante en la sala: la relación entre la realidad y nuestras percepciones de ella en la era de las redes sociales.
Pero, ¿y si te dijera que a veces siento que mis redes sociales son un monstruo que me devora? Ahora, no me malinterpretes, me encanta ver fotos de gatos y memes sobre café a las 3 a.m., pero he notado que, con cada scroll, la realidad parece volverse más difusa. Vásquez también lo notó (puede que él tenga un poco más de autoridad al respecto). «El mundo contemporáneo se está poniendo especialmente difícil,» dijo, señalando que las redes nos desordenan la vida. Él nunca lo dijo, pero yo estoy segura de que debe haber deseado un mundo donde la gente todavía escribiera cartas en vez de twittear.
La novela como antidoto a las redes sociales
Lo interesante del discurso de Vásquez es su firme creencia de que la novela —esa forma de arte que a veces consideramos anticuada— es la alternativa perfecta a este caos digital. Nos dijo, entre risas, que quizás solo lo cree en sus días más optimistas. Aun así, no hay duda de que la ficción tiene un poder único que nos ayuda a entender nuestro entorno. ¿Recuerdas esa sensación de sumergirte en un libro y perder la noción del tiempo? Es como un viaje a otro mundo, uno donde los problemas se desvanecen.
Y mientras hablaba, mencionó obras clásicas como «La metamorfosis» de Kafka. Aquí hay una anécdota divertida: una vez intenté explicar a un amigo lo que significaba «Kafkaesque». Terminé diciendo que era algo así como sentirse atrapado en un trabajo de cubículo, donde nada tiene sentido. Pero, ¿no es cierto que esos libros han moldeado y enriquecido nuestra comprensión de realidades tan complejas?
Jon Bilbao y el cruce de mundos en ‘Matamonstruos’
Si creías que el evento iba a ser simplemente serioso y académico, permíteme presentarte a Jon Bilbao, quien dejó a todos boquiabiertos con su última entrega, ‘Matamonstruos’. Ahora, este nombre tiene un aire de película de terror, ¿verdad? Pero lo que realmente es interesante es la mezcla de realidades que presenta. Imagine una novela que combina el terror sobrenatural con historias del Viejo Oeste. ¡Eso suena como una mezcla de «Cazadores de monstruos» y «Bailando con lobos»!
Bilbao, en su presentación, también se atrevió a desafiar la clasificación de su obra. Un libro de relatos, una novela o simplemente un «artefacto literario», como él lo llama. No sé ustedes, pero me siento bastante reflejado en este concepto. A veces, me pregunto si mi propia vida es un artefacto literario en construcción, lleno de personajes excéntricos y giros inesperados.
El western como lenguaje universal
Bilbao señala que su incursión en el western es, de alguna manera, un reflejo de temas universales. En sus propias palabras: “El Oeste es ya hoy un lenguaje universal”, lo que me lleva a pensar en lo siguiente: ¿podemos realmente encontrar un tipo de narración que no nos conecte? Hablar sobre la lucha entre el bien y el mal, los héroes y los villanos, es algo que todos entendemos, sin importar de dónde seamos.
Además, el autor incorpora un toque de autoficción, donde su historia personal se entrelaza con la vida de su personaje principal, John Dunbar. Espero que algún día pueda contar mi propia historia literaria y explorar todos esos momentos en que sentí que mi vida era una película de acción (con un poco de comedia, por supuesto).
Páginas de Espuma: Un cuarto de siglo de relatos
Hablar de Páginas de Espuma es recordar que no todo en la vida son novelas épicas de miles de páginas. Esta editorial ha celebrado su 25 aniversario con gran fanfarria, y con razón. En un mundo donde los cuentos suelen quedar en el olvido, esta casa ha logrado posicionarse como un refugio para los amantes de la narración breve. ¡Y que se sienta esa pasión!
El editor Juan Casamayor habló sobre la importancia de la amistad entre editores y autores. ¡Eso es algo que resuena! A veces, en nuestra vida cotidiana, el apoyo de un amigo es lo que necesitamos para darnos ese empujón creativo. ¿Quién no ha tenido un colega que te dice: «Vamos, escribe esa novela!» mientras tú solo estás tratando de decidir qué comer para la cena?
Historias entre risas y lágrimas
Durante la celebración, varios autores compartieron sus anécdotas, y me encantó cómo mencionaron su conexión con la editorial como una gran familia, algo que todos deseamos en nuestras vidas, especialmente en el mundo literario. El cuento es especial porque, en pocas páginas, puede capturar toda una vida. Quiero decir, ¿quién no ha leído un relato breve y sentido que le ha dejado con la boca abierta?
La moderadora, Charo Ramos, no dejó que la ocasión pasara desapercibida y describió a la editorial como «la casa del cuento». En tiempos donde parece que todos se olvidan de los formatos clásicos, es gratificante saber que hay un lugar donde los relatos breves son celebrados como lo que son: un arte.
Reflexiones finales: Un aplauso por la literatura
Durante la Feria del Libro de Sevilla 2024, hemos visto cómo la literatura continúa siendo un espacio vital para la reflexión y la conexión humana. A través de las palabras de Juan Gabriel Vásquez y Jon Bilbao, nos hemos sumergido en un mundo donde la literatura no es solo una colección de palabras, sino un refugio, una batalla épica entre lo real y lo imaginado.
Ni qué decir de Páginas de Espuma, una editorial que nos recuerda que no debemos subestimar el poder de una buena historia corta. Así que, la próxima vez que tengas la oportunidad de asistir a un evento literario, no te lo pienses dos veces. Puede que encuentres personas, historias y reflexiones que te acompañen durante mucho tiempo.
Así que, ¿estás listo para llenar tu estantería de nuevas lecturas? Después de todo, como decía tu amigo el escritor (bueno, él probablemente no lo decía, pero hoy se lo atribuyo a él), «la mejor aventura, en cualquier formato, siempre está a una página de distancia.» ¡Nos vemos en la próxima Feria del Libro!