¿Alguna vez has sentido que, al entrar en un banco, te miran como si fueras un extraterrestre? Bueno, eso parece un poco exagerado, pero en el fondo, lo que está sucediendo en el sector bancario español es bastante serio. Recientemente, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) lanzó un informe que pone el foco en la concentración de la banca en España, y ¡vaya que da que hablar! Si estás pensando en abrir una cuenta, renovar un depósito o simplemente tienes curiosidad sobre los movimientos del gigante BBVA y su oferta de compra por Banco Sabadell, este artículo es para ti.

Un panorama preocupante: la concentración bancaria en España

Partamos de una premisa: la banca en España se ha reestructurado de forma significativa en las últimas décadas, especialmente desde la crisis financiera de 2008. En la actualidad, los índices de concentración son alarmantes en comparación con otros países europeos como Francia, Alemania e Italia. ¿Y qué significa esto? Que varias entidades han acumulado una cuota de mercado muy grande y, como consecuencia, la competencia se ha visto mermada.

La CNMC destaca en su informe que “los índices de concentración del sector bancario español se han elevado hasta niveles superiores a los de países del entorno”. Tal vez te preguntes: ¿y a mí qué me importa eso? Bueno, querido lector, esto tiene un impacto directo en lo que los bancos están dispuestos a ofrecer por nuestros ahorros. ¿Recuerdas esos días de bonanza en los que había cuentas que generaban intereses que parecían sacados de un sueño? Esa fantasía se ha esfumado.

Menos sucursales y más dificultad para volver a ver esos intereses

Un dato interesante y preocupante al mismo tiempo es que entre 2020 y 2023, más de 2.500 sucursales bancarias han cerrado en España. Esto no solo significa que hay menos lugares donde depositar nuestro dinero, sino que además, dificulta la posibilidad de cambiar de entidad. La política de fidelización, como ofrecer tasas más altas si domicilitas tu nómina o contratas productos adicionales, puede convertir a muchos en prisioneros de su banco actual. ¿No te resulta un poco irónico que en un mundo donde todo se mueve a la velocidad de un clic, los bancos aún nos hagan sentir como si estuviéramos atrapados en un hechizo medieval de fidelidad?

La baja remuneración de los depósitos: un puñal al ahorro

La situación se agrava con la baja remuneración de los depósitos. Según el informe de la CNMC, en junio de 2024, los depósitos de los hogares españoles se remuneraron en promedio al 0,48%, mientras que la media de la zona euro fue del 1,17%, y la facilidad de depósito del BCE ofrecía un atractivo 3,75%. Haciendo las cuentas, esta diferencia es de más del doble y, sinceramente, es como tener un montón de caramelos de oro y que alguien te diga que puedes tener un puñado de arena. No es justo, ¿verdad?

¿Por qué esta desventaja?

La CNMC argumenta que esta situación no se debe solo a la concentración bancaria, sino que hay otros factores detrás. Uno de ellos son los costes asociados al cambio de banco. Piensa en lo tedioso que es actualizar las cuentas donde recibes tu salario o incluso transferir tus ahorros a otro lugar. Esto puede aplazar la decisión de cambiar, y los bancos lo saben.

Además, el informe señala la falta de educación financiera en España como un factor que complica las cosas. En comparación con otros países de la eurozona, los españoles tienden a tener menos conocimiento sobre cómo comparar ofertas o incluso sobre los productos que pueden reemplazar los depósitos, como fondos de inversión o Letras del Tesoro.

Las neobancos al rescate: ¿solución o más de lo mismo?

Si bien los bancos tradicionales están en una encrucijada, ha surgido una nueva modalidad: los neobancos. Estas entidades trabajan exclusivamente online y han capturado la atención de la generación más joven, que está cada vez más cómoda moviendo su dinero en un entorno digital. Sin embargo, la CNMC señala que, a pesar de su creciente presencia, su cuota de mercado en depósitos aún es bastante modesta.

A pesar de que los españoles son una población altamente digitalizada, la desconfianza en el uso de estos nuevos servicios financieros sigue siendo un obstáculo. ¿Te suena familiar? Es como esos amigos que tienen un nuevo hobby, pero tú sigues disfrutando de lo antiguo y familiar, aunque lo nuevo se vea estupendo. La tendencia actual es claramente hacia la digitalización, pero no todos están listos para dar el salto.

Las fusiones en el horizonte: ¿qué implican para el consumidor?

Ahora que hemos tenido un vistazo crítico al estado actual de la banca en España, hablemos de lo que realmente entorpece el paisaje: la potencial fusión de BBVA y Banco Sabadell. La CNMC está investigando esta OPA (oferta pública de adquisición) para evaluar sus efectos sobre la competencia bancaria en el país.

La especulación gira en torno a cómo podría impactar esto en los consumidores. Con menos bancos en el juego, potencialmente, podríamos encontrarnos ante una disminución en la competencia, lo que, a su vez, se traduciría en tarifas más altas y menos opciones de productos financieros. Esto te lleva a cuestionarte: ¿realmente queremos más fusión en el sector cuando ya enfrentamos problemas de concentración?

Soluciones en el horizonte: la propuesta de la CNMC

El informe no solo se centra en los problemas, sino que también brinda algunas soluciones públicas y privadas para afrontar esta situación. Uno de los puntos clave es mejorar la movilidad entre bancos y fomentar el acceso a productos financieros en áreas con alta concentración o exclusión financiera. Proponen que se realicen asociaciones público-privadas en zonas de riesgo para garantizar que todos tengan acceso a al menos una oferta básica de servicios financieros.

Por ejemplo, algunas entidades como Correos han comenzado a colaborar con bancos tradicionales para asegurar que las pequeñas localidades sigan recibiendo servicios bancarios. Es un buen paso, pero, ¿será suficiente? No estoy tan seguro. Mejorar el acceso es una cosa, pero también necesitamos una oferta competitiva real.

El futuro: ¿hacia dónde vamos?

Al final del día, es crucial que los consumidores nos mantengamos informados sobre este escenario cambiante. La educación financiera es más importante que nunca, y ahora más que nunca debemos enseñarles a nuestros amigos, familiares y, por qué no, a nosotros mismos, cómo navegar este laberinto privatizado. Si alguno de ustedes ha probado una cuenta de ahorros con un neobanco o ha enfrentado las dificultades de tratar de cambiar de banco, seguramente tienen muchas historias que contar.

En un panorama donde la concentración bancaria es la norma y donde los cambios parecen azarosos, cada uno de nosotros debe ser un defensor de lo que valga la pena. Si bien es cierto que estos cambios ,como la posible fusión de BBVA y Sabadell, pueden traer ciertas oportunidades, también tenemos que estar atentos a las posibles devaluaciones que podrían afectar nuestra capacidad de ahorro y la gestión de nuestras finanzas.

Así que, amigo lector, mientras la banca en España sigue evolucionando, cada uno de nosotros tiene el poder de convertirnos en consumidores informados y proactivos. Después de todo, si no miramos más allá de nuestra comodidad, podríamos perder de vista las oportunidades que nos hacen avanzar. ¿Y tú, qué piensas sobre todo esto? La mesa está servida para un buen debate. ¡Vamos a hablarlo!