El año 2024 ha traído consigo noticias positivas para el mercado laboral español, en medio de un contexto internacional que a veces parece más complicado que armar un mueble de IKEA sin instrucciones (¿alguien más se siente identificado?). Con más de 500,000 nuevos afiliados a la Seguridad Social y una notable reducción del desempleo en cerca de 147,000 personas, el balance es más que esperanzador. Acompáñame a desglosar estos datos, porque hay mucho que contar y reflexionar sobre el estado actual del empleo en España.

Una mirada al crecimiento del empleo

Comencemos con la cifra más impactante: 21,337,962 cotizantes a la Seguridad Social en diciembre de 2024, la más alta en esta época del año desde que existen registros. ¡Eso es un montón de gente! Para poner esto en perspectiva, imagina llenar un estadio de fútbol no solo una vez, sino varias. Y todo esto después de incorporar 501,952 afiliados en comparación con el mismo mes del año anterior. Si el crecimiento del 2.41% no te parece impresionante, me pregunto qué tipo de estadísticas entusiasmo tienes.

Ahora bien, no todo es un cuento de hadas. Aunque el dinamismo del mercado laboral está mejorando, España sigue siendo líder en desempleo dentro de Europa, con más de 2.56 millones de parados. Es como si, en lugar de una fiesta, algunos decidieran quedarse en casa; pero al menos parece que más personas están saliendo y acercándose a la pista de baile del trabajo.

Comparativas: el año que fue y el que viene

El 2024 no ha sido tan bueno como 2023 en creación de empleo, donde se sumaron casi 540,000 cotizantes. Sin embargo, el desempeño supera a 2022 y 2019; por tanto, sigue siendo un año más sólido en comparación con el pasado. ¿Te imaginas ser parte de un club donde, aunque hay altibajos, sigues teniendo más amigos que el año anterior? ¡Eso es! La comunidad laboral española aumenta.

En diciembre de este año, se crearon 35,500 puestos de trabajo en comparación con el mes anterior. Sin embargo, este incremento no fue suficiente para superar el crecimiento de empleos de años anteriores, como el recordado 2018, donde se crearon más de 78,500 puestos de trabajo. Pero, ¿no es mejor avanzar aunque sea a pasitos cortos?

Sectores que brillan y otros que necesitan ayuda

Los sectores que han destacado en afiliación este año son el comercio y la actividad sanitaria. Lamentablemente, la hostelería tuvo que enfrentar un revés, perdiendo casi 27,500 empleos. Es como si alguien hubiera decidido cerrar un asador justo cuando el verano se asomaba. La creación de empleo fue impulsada especialmente por el comercio, que anotó cerca de 28,000 nuevos empleos, seguido por actividades sanitarias con 15,800 nuevos cotizantes.

La industria y la construcción, por su parte, mostraron un ligero aumento en el desempleo. Si bien el sosiego reinaba en el mundo laboral, algunos sectores aún necesitan trabajar en su wellness.

Desempleo: un descenso muy necesario

El número de parados ha caído un 5.42%, lo que supone una disminución de 146,738 desempleados. Sin duda, esto es un gran alivio para muchos, especialmente para aquellos que han luchado para encontrar empleo en un mercado tan competido. Además, el desempleo ha disminuido en todos los sectores económicos, aunque con distintos resultados.

La hostelería y la construcción fueron los principales reductores del desempleo, pero no sin complicaciones. Si te has sentido alguna vez como si estuvieras en un tobogán mientras todos los demás bajan en ascensores con ventanas panorámicas, entenderás el desafío: el descenso en esos sectores no fue suficiente para componer la sinfonía del empleo.

El impacto desigual de la recuperación

Las mujeres en el mercado laboral tienen motivos para celebrar, ya que el desempleo femenino descendió en 85,411 paradas en comparación con el año anterior. Sin embargo, el desempleo masculino solo disminuyó en 61,327 personas. Esto resalta una ventaja que se ha ido forjando, pero también nos recuerda que aún hay brechas que cerrar.

Además, el desempleo entre los jóvenes ha alcanzado cifras históricas, con solo 185,801 parados menores de 25 años. ¿Podríamos encontrar una manera de que el resto de la población adulta aprenda de estos números? La proactividad y el enfoque en nuevas oportunidades laborales son cruciales para un futuro más radiante.

La contratación: ¿más calidad en los contratos?

La cifra total de contratos realizados en 2024 fue de 15,420,104, lo que marca un pequeño descenso del 0.16% en comparación con el año anterior. Pero, ¡sorpresa! Este año también se registró un aumento significativo en la duración de los contratos, lo que refleja menos rotación laboral y más estabilidad. ¿Estaremos moviéndonos hacia un paradigma donde los empleos temporales se conviertan en permanentes?

De todos los contratos realizados, el 42% fueron indefinidos, con un descenso del 2.1% respecto al año anterior. Sin embargo, dado que muchas reformas laborales están en marcha, los esfuerzos por cerrar la brecha existente entre la temporalidad y la estabilidad son más que claros.

Comparativa con las grandes economías europeas

El Ministerio de Seguridad Social ha destacado que España muestra un dínamo superior al de otras grandes economías europeas. Según sus datos, el aumento del empleo español es del 8.1% respecto a los niveles anteriores a la reforma laboral, por encima de países como Francia y Alemania. ¡Felicidades, España! Aunque todavía hay mucho camino por recorrer, al menos nuestra brújula apunta en la dirección correcta.

Además, en términos de calidad de empleo, la reducción de la tasa de temporalidad al 12.8% y el incremento en casi 3.7 millones de trabajadores con un contrato indefinido son cifras que dan un respiro.

Reflexiones finales: ¿un futuro esperanzador?

El difícil tema del empleo en España es un laberinto, y aunque todos queremos encontrar la salida, lo que está claro es que el camino hasta ahí tiene sus giros y revueltas. Hay un aumento de actividad y un impulso en la creación de empleos; sin embargo, los desafíos siguen ahí, esperando ser resueltos. Los sectores como la hostelería y la construcción necesitan reenfocarse, y la equidad laboral sigue siendo una necesidad urgente.

Aún así, muchos de nosotros podemos sentir un leve optimismo que, aunque cauteloso, nos da esperanza. Al final del día, todos tenemos historias que contar sobre nuestras luchas y triunfos en el camino del empleo. ¿Qué te gustaría que cambiara en tu sector? Razón y emoción, trabajo duro y paños de lágrimas, ¡todo se entrelaza mientras luchamos por un futuro más brillante!

Así que, ya sea que estés buscando tu próximo empleo o celebrando tu reciente ascenso, recuerda que todos estamos en el mismo barco. Ya sea que haya más parados o más afiliados, la comunidad laboral sigue viva, activa y lista para cambiar. ¡A por un 2025 aún más esperanzador!