La historia del baloncesto sevillano ha estado marcada por altibajos, pero siempre ha tenido un aire de pasión y dedicación. Recuperar la esencia del Caja San Fernando ha sido el sueño de los hermanos Crespo, quienes han tomado las riendas de este proyecto apasionante. Con el debut de Insolac Caja 87 a la vuelta de la esquina, es un buen momento para reflexionar sobre el camino que ha llevado a este nuevo equipo a su primer partido en la Segunda FEB. ¿Estamos listos para una nueva era en el baloncesto de Sevilla?

La historia detrás del renacer

Imagínate un sábado por la tarde, en un café de Sevilla. Estoy sentado, con un café en una mano y un croissant en la otra, pensando en lo que ha pasado con el baloncesto en esta ciudad. Un par de amigos me comentan sobre cómo echaban de menos el brío del Caja San Fernando. Aunque el equipo ha estado ausente desde hace años, la pasión por el baloncesto nunca ha desaparecido. Los hermanos Crespo escucharon esas inquietudes y decidieron actuar. En apenas 72 horas, consiguieron que 700 personas firmaran como socios de este nuevo club, una cifra que pronto se elevó a 1,800. Eso, mis amigos, es una señal clara de que la afición está lista para seguir este nuevo capítulo.

De la anécdota a la acción

Volviendo a los hermanos Crespo, es interesante observar cómo, después de la fusión fallida con el Real Betis, no se desanimaron. En lugar de rendirse, activaron su plan B y compraron una plaza liberada para montar su propia estructura. Esto me hace pensar en las veces que he luchado por un proyecto que parecía destinado al fracaso. Sin embargo, como bien sabemos, toda historia de éxito tiene momentos de incertidumbre. ¿Quién puede olvidarse de aquel proyecto escolar que se convirtió en un fiasco al no conseguir los fondos necesarios? A veces hay que ser un poco audaz y, como los Crespo, tener la tenacidad de levantarse y seguir adelante.

Patrocinadores: el motor del club

Uno de los aspectos más importantes de cualquier club de baloncesto son los patrocinadores. Los Crespo no se quedaron de brazos cruzados y, a pesar del poco tiempo que tenían, ya habían establecido alianzas con empresas privadas. El acuerdo con Insolac Renovables, que les asegura estabilidad financiera si logran ascender, es una estrategia inteligente. Honesta y sinceramente, no todos los equipos tienen este tipo de respaldo. Este tipo de alianzas son esenciales para que un club mismo no se convierta en solo una «flor de un día».

¿Qué aprendemos de esto?

  • Planificación a largo plazo: Los buenos planes no son solo sobre el presente, sino que deben también tener una visión futura.
  • Construir relaciones: La importancia de tener una red de apoyo es crucial. La vida, al igual que los negocios, no se hace sola.

La plantilla: un conjunto diverso y prometedor

En el mundo del deporte profesional, la calidad de la plantilla es fundamental. No se trata solo de tener a los mejores, sino de formar un equipo cohesionado. En el caso del Insolac Caja 87, veremos a jugadores como el pívot congoleño Ken Baoko, quien ha superado obstáculos burocráticos para unirse al equipo. La diversidad y la fuerza del conjunto, con figuras como Gullit Mukendi y Zhang Zhiyao, apuntan a un equipo que puede dar mucho de qué hablar.

¿Y cómo va la pretemporada?

Si te soy sincero, los resultados de la pretemporada han sido un guiño de lo que está por venir. Cuatro derrotas iniciales no son ideales, pero el equipo logró revertir la situación con dos victorias finales. Aquí es donde entra mi propio pasado deportivo: ¿cuántas veces he empezado algo nuevo y los primeros pasos fueron torpes y confusos? Siempre he creído que un buen equipo necesita tiempo para amalgamarse. De hecho, es casi un ritual: perder un poco antes de alcanzar el éxito.

Un debut emocionante en la segunda feb

La inminente llegada del primer partido oficial es emocionante, pero también un tanto aterradora. Jugará el Insolac Caja 87 contra Huesca La Magia, un equipo que ya ha tenido experiencia en partidos actualizados. Aquí hay una mezcla de adrenalina y nerviosismo, donde cada aficionado espera ver al equipo brillar y reafirmar la fe que han depositado en él.

Las expectativas y la realidad

Las expectativas son altas, pero los hermanos Crespo han sido claros: el objetivo principal es la permanencia. Entiendo perfectamente esa necesidad de soñar con grandes cosas mientras se mantiene el pie en la tierra. Cada vez que inicio un proyecto, me hago la misma pregunta: «¿Es realista una victoria inmediata o debo esperarlo todo poco a poco?» La respuesta, mi amigo, es esperar y confiar en el proceso.

Preparativos para la afición

La cita para el partido es a las 12:30, pero la diversión comienza antes. Todo el entorno del partido se está organizando para crear un ambiente que se siente como una celebración. La fan zone instalada una hora y media antes del inicio está diseñada para atraer a la afición de vuelta. Así como un buen programa de televisión que te deja en suspenso para el siguiente episodio, esta atmósfera prometedora sugiere que el evento será más que un simple juego; será una fiesta del baloncesto sevillano. ¿Cuándo fue la última vez que sentiste esta magia colectiva en un evento deportivo?

Reflexiones finales: un nuevo capítulo

El Insolac Caja 87 no es solo un equipo de baloncesto; es parte de un legado, de una nostalgia que vuelve a cobrar vida. Mientras cierro mi laptop, me doy cuenta de que la historia aún se está escribiendo. Las inquietudes que surgieron en ese café de Sevilla ya no son solo susurros, sino un eco que resuena en cada rincón de la ciudad. ¿Podrá el equipo superar la adversidad y mantener viva la chispa de la afición?

El futuro del baloncesto sevillano está en juego, y como siempre, estará rodeado de emoción, compromiso y un poquito de locura. Será apasionante ver cómo se desarrolla esta historia. Como dice el lema del baloncesto, “juntos hasta el final”. ¿Estás listo para ser parte de esta aventura? ¡Porque yo sí!


Espero que este recorrido sobre el inicio del Insolac Caja 87 sirva tanto para enamorar a nuevos aficionados como para reavivar la pasión de los viejos seguidores. La historia del baloncesto sevillano puede estar en el aire, pero sin duda está en el corazón de todos nosotros. ¡A disfrutar!