La historia de la industria automotriz en España ha estado marcada por grandes actores y momentazos insólitos. ¿Quién no recuerda la llegada de Ford a Cádiz o cómo una fábrica en Barcelona dejó su impronta durante el siglo XX? Pero hoy, vamos a hablar de un nuevo jugador que ha decidido recuperar un legado olvidado: EBRO. Si no has escuchado de ella, tranquilo, no eres el único. Pero a partir de ahora, esta marca podría convertirse en un nombre familiar, especialmente con su ya mencionado EBRO S700. Pero, ¿qué más hay detrás de este SUV que Andalucía y Cataluña aún no han descifrado completamente?

Un vistazo al pasado: ¿Quiénes eran los EBRO?

Antes de detallar las características del S700, déjame llevarte a un pequeño viaje por la historia de EBRO. Esta compañía tiene un linaje fascinante que se remonta a la década de 1950. Después de una serie de eventos algo turbulentos (y cuando digo turbio, me refiero a lo que llamamos en mi barrio «un marrón»), EBRO surgió en el contexto de la industrialización española.

EBRO, que para muchos era una marca que solo existía en los anales de la historia automotriz, poco a poco resurgió de sus cenizas. En 1987, tras ser absorbida por Nissan, parece que su historia llegaba a un repentino final. Sin embargo, los dioses de la automoción decidieron darle una segunda oportunidad en el siglo XXI. ¿Quién puede resistirse al encanto nostálgico de un nombre que evocaba autos robustos y furgonetas de antaño?

Con la reinvención que trajo el apoyo del grupo chino Chery, EBRO ahora mira con ilusión hacia el futuro, específicamente hacia el S700. La pregunta es: ¿podrá realmente competir en un mercado que ya está saturado de opciones?

Conociendo al EBRO S700: un SUV que quiere hacer ruido

Una de las claves del S700 es su asequibilidad. Con un precio de inicio de 29,990 euros, esta belleza no solo aspira a tener un lugar en el garaje de los españoles, sino a ser un contendiente serio contra SUVs más establecidos como el Kia Sportage o el Nissan Qashqai. ¿Quién no querría un SUV de combate en el presupuesto?

Diseño que impresiona a primera vista

Al entrar en el EBRO S700, la primera sensación es de espacio. Con 4,553 metros de largo y 1,862 de ancho, me recuerda a esos días de niño cuando jugabas con tus legos y pensabas: «¡Eso es suficiente espacio para todo!». El coche tiene un maletero de 500 litros y, a pesar de que no es un SUV deportivo, su diseño robusto le otorga carácter.

Recuerdo que hace unos años, cuando estuve de viaje y alquilé un SUV, lamenté mucho no tener suficiente espacio para mis maletas y esas compras impulsivas que vuelven con uno al hogar. Con el S700, mi niño interior gritaría de alegría, porque no tendrás que elegir entre tus zapatos y los souvenirs.

Tecnología y comodidad al mando

Las cosas se ponen interesantes al hablar del interior. El S700 tiene todo lo que un conductor moderno podría desear. ¿Te imaginas conducir mientras tu teléfono se carga de manera inalámbrica? Simplemente alucino con el cargador inalámbrico de 50W. Debe de ser como tener una mini central eléctrica en tu coche. Además, cuenta con dos puertos USB, aunque, en lo personal, siempre me he cuestionado si debería llevar un cargador de reserva, ya que nunca se sabe cuándo estarás rodeado de amigos con baterías agotadas.

La pantalla de instrumentos es digital, de 12,3 pulgadas, una belleza a primera vista, pero… (siempre hay un «pero», ¿verdad?) su resolución a veces puede parecer un poco deficiente. Recuerdo esa vez que intenté usar mapas en un sistema de infoentretenimiento que no estaba a la altura. No sé vosotros, pero yo no tengo paciencia para la lentitud. Afortunadamente, el S700 parece contar con una interfaz más que decente.

Motorización y rendimiento: a gran velocidad, pero no sin contratiempo

Bajo el capó encontramos un motor de gasolina 1.6 TDGI con una potencia de 147 CV. Si piensas que esto es suficiente para competir en aceleración en una carretera sinuosa, piensa de nuevo. Puede que el S700 no vaya a romper récords de velocidad, pero no perderás el aliento si tus expediciones son más urbanas que de montaña.

Recuerdo una vez que probé un coche que parecía un cohete en el papel, pero cuando intenté hacer una maniobra rápida en la carretera, era más bien un caracol. Por fortuna, el S700 se siente más equilibrado, aunque algunos críticos ya han señalado que la respuesta del cambio automático de siete velocidades podría mejorarse un poco.

En términos de consumo, el S700 está homologado para 7 l/100 km, lo cual no está nada mal considerando que se presenta como un SUV. Desde luego, para un amante de los viajes largos como yo, esto puede ser un punto decisivo en la búsqueda del coche ideal. ¿Quién no quiere visitar a familiares lejanos sin tener que detenerse cada dos por tres por una recarga de gasolina?

Seguridad y ayudas a la conducción: porque no todo es velocidad

El EBRO S700 también cuenta con varias ayudas a la conducción, aunque su tecnología tiene algunos puntos a mejorar. La falta de un sistema de centrado en el carril es un pequeño “what’s up” que puede causar confusión y, si has conducido un coche sin esta característica, sabrás exactamente de lo que estoy hablando. Te deja esa sensación incómoda de tener que estar constantemente atento a las líneas del asfalto. En vez de disfrutar del viaje, te ves en una especie de «tira y afloja» con la carretera.

Sin embargo, las ayudas para aparcar, con una cámara de 360 grados, son un gran acierto. ¿Quién no se ha encontrado de pie frente a un aparcamiento complicado y ha deseado tener ojos en la parte trasera de la cabeza? Las tecnologías que ayudan en este sentido son siempre un triunfo.

Mirando hacia el futuro: ¿qué podemos esperar de EBRO?

La promesa de más modelos está en el aire. Con el EBRO S800 ya en los planes, la marca busca seguir construyendo sobre sus cimientos de historia. La duda es: ¿será todo esto suficiente para destacar y convertir a EBRO en un nombre en español que resuene en el mundo automotriz?

Con una red de ventas que planea expandirse de 35 concesionarios a 80 para cerrar el 2025, se siente el fervor en el aire. Pero, como en toda buena historia, hay que ver si será capaz de cumplir con las expectativas de sus consumidores. ¿Será el S700 un coche que recordarás con cariño después de un viaje largo, o te dejará tirado en el camino?

Reflexiones finales

La llegada del EBRO S700 marca un nuevo capítulo en la historia de la automoción española. Aunque su camino esté lleno de retos y competidores fieros, este SUV tiene lo que se necesita para convertirse en una opción válida en el mercado actual.

Toma un momento para pensar: ¿qué características valoras más en tu vehículo? ¿Es la tecnología, la seguridad, o quizás el diseño? Sea como fuere, el EBRO S700 invita a reflexionar y, con suerte, también a probar nuevas experiencias en la carretera sin dejar de lado ese deseo de comodidad y fiabilidad que todos buscamos. Así que, ¿te atreverías a dar el salto y probar lo que EBRO tiene para ofrecer? ¡Las aventuras sobre ruedas están a la vuelta de la esquina!