El mundo del fútbol femenino español ha sido objeto de múltiples debates, críticas y momentos de gloria. Recientemente, Montse Tomé, la seleccionadora de la La Roja, presentó la segunda lista de convocadas tras el revés en los Juegos Olímpicos. ¿Qué significan estas nuevas selecciones para el futuro del equipo? ¿Acertó realmente Tomé al dejar fuera a figuras destacadas y dar la bienvenida a jugadoras jóvenes y prometedoras? Vamos a desmenuzar todo lo que necesita saber sobre esta convocatoria.
Un primer vistazo a la lista de convocadas
La nueva lista tiene ciertas sorpresas, que no han pasado desapercibidas. Las fechas de los dos próximos amistosos son el 29 de noviembre y el 3 de diciembre. La selección se enfrentará a la República de Corea y Francia, un auténtico reto que funcionará como preparación previa para la Eurocopa y la Nations League del próximo año.
Entre las sorpresas, el regreso de Claudia Pina, quien ha tenido un arranque de temporada impresionante en el FC Barcelona, es destacable. También se suma a este regreso Aitana Bonmatí, recuperada de su descanso. Sin embargo, el resto de la lista también trae ausencias notables como la capitana Irene Paredes, Misa Rodríguez y Jennifer Hermoso. ¿Qué hay detrás de estas decisiones?
¿Por qué dejar fuera a figuras como Irene Paredes y Misa Rodríguez?
Tomé ha encontrado un equilibrio delicado entre preservar el talento, evaluar el rendimiento actual y hacer justicia a la plataforma de nuevas jugadoras. Cuando se le preguntó sobre el porqué de estas ausencias (porque… ¿a quién no le gusta un poco de drama en el mundo del fútbol?), la seleccionadora se mantuvo firme: «El camino a la elite es la autoexigencia». ¿Y cuánta verdad hay en eso?
Fernandinho, un exfutbolista brasileño, siempre decía que «el jugador que llega a la selección debe ganarse su lugar». Así que, aunque la inclusión de jugadoras consagradas es relevante, es difícil justificar el «regalo» de una convocatoria si su rendimiento no está a la altura.
Además, la presión de los resultados ha llevado a Tomé a evaluar a las futbolistas con un ojo más crítico. «Las jugadoras que vienen nos dan todas las garantías», declaró, reforzando su criterio de selección. Tomé parece estar navegando por aguas turbulentas, pero también ha afirmado que “todas las jugadoras tienen que seguir trabajando”. Es un ejercicio de realismo vs. sentimentalismo.
Un guiño a la juventud: Berta Pujadas y Macarena Portales
Y entonces, en lugar de Irene Paredes, encontramos a Berta Pujadas y Macarena Portales. ¿Acaso es el momento de abrir las puertas a las jóvenes? Desde luego, Pujadas ha sido identificada por Tomé como una jugadora con gran potencial. Además, puede ser un reflejo de cómo se está construyendo la nueva era en el equipo: dando la oportunidad a las chicas jóvenes que están brillando en sus clubes.
Pujadas, en particular, es una jugadora a tener en cuenta. Tomé la conoce bien, ya que ha estado observando su desarrollo desde su adolescencia. De hecho, hay algo mágico en ver a una jugadora que ha estado presente en la selección de categorías inferiores finalmente tener su oportunidad en el primer equipo. ¡Es como la historia de un cuento de hadas moderno!
Por otro lado, Macarena Portales también ha sido una gran incorporación. Su estilo de juego vertical y su capacidad para centrar bien son atributos que la seleccionadora aprecia. ¿Esto refleja un cambio estratégico en el juego de España? Tal vez.
El dilema de la portería
Un tema que siempre genera conversación es el de la portería. Tomé decidió mantener a Cata Coll, Adriana Nanclares y Esther Sullastres, mientras que las grandes ausentes, Misa Rodríguez y Lola Gallardo, ¿deben tambalear sus esperanzas? Esa decisión también es compleja. Por un lado, Cata ha demostrado ser confiable, pero por el otro, las estadísticas no mienten: Misa y Lola han mostrado un rendimiento impresionante en sus respectivas ligas.
Esto nos lleva a preguntarnos: ¿Callas el rendimiento de tus porteras más que sus emociones o el peso de sus experiencias previas? Interesante dilema en el que se encuentran muchas seleccionadoras.
La delantera: ¿un aire fresco con Claudia Pina?
Si hay un área donde Tomé ha decidido inyectar aire fresco es sin duda en la delantera. El regreso de Claudia Pina, quien se siente más en forma que nunca en el Barcelona, es sin duda un soplo de aire fresco. En una conversación reciente, ella mencionó que “está lista para lo que el equipo necesite”. Esa confianza es justamente lo que falta en muchas jugadoras en este tipo de situaciones.
A la par, jóvenes como Lucía García y Alba Redondo son igualmente emocionantes. García, que ha sido una de las revelaciones en la Liga F, ha demostrado en el pasado que puede ser una amenaza real en el área contraria.
Más que un simple partido
Pero más allá de los nombres, de las críticas y de las decisiones de Tomé, está el tema del espíritu del equipo. La selección ha pasado por un año lleno de incertidumbre. Montse afirmó que ha habido un «año remando», lleno de altibajos y tomando en cuenta las dudas recibidas por los empates. Es esencial que el equipo encuentre una confianza renovada en su juego y en su capacidad colectiva, especialmente antes de competencias tan importantes como la Eurocopa.
El reto será enfrentarse a unos equipos que están en proceso de crecer y evolucionar al mismo tiempo que lucha por su lugar. Corea y Francia no son rivales fáciles, y ciertamente en las mentes de las jugadoras está la presión de demostrar que pueden revertir la situación y abrazar de nuevo la gloria.
Reflexiones finales: la gestión de expectativas y la importancia del ciclo
Así que, ¿es este el camino correcto para la selección? Solo el tiempo lo dirá. Pero una cosa es cierta: Montse Tomé ha establecido el inicio de un ciclo que podría llevar a la selección española hacia la grandeza. Aunque las decisiones tomadas puedan ser cuestionadas por algunos, hay una visión de futuro que parece prometedora.
La autoexigencia en los deportes de equipo es de suma importancia, y Tomé lo sabe. Así que, aunque veamos nombres familiares ausentes esta vez, hay una lógica en las elecciones de Montse. Después de todo, como dijo alguna vez un famoso entrenador: “Los buenos jugadores son mejores solos, pero el gran equipo llega a la cima junto”.
Por lo tanto, esperemos que la vuelta a la excelencia no solo se mida en victorias, sino también en un espíritu renovado y un compromiso colectivo que haga justicia a los sacrificios de todas y cada una de las futbolistas. ¡Vamos, España! Esto está lejos de ser el fin: es solo el comienzo de un nuevo capítulo emocionante.