Cuando uno piensa en Groenlandia, la primera imagen que viene a la mente no suele ser esa de un destino turístico vibrante. Más bien nos imaginamos vastas extensiones de hielo, osos polares deambulando y alguna que otra lava de un volcán extinto. Pero, ¡sorpresa! La isla más grande del mundo no solo es un gran bloque de hielo; se está preparando para convertirse en un destino turístico de primer nivel. Así que abróchense los cinturones porque vamos a explorar lo que Groenlandia tiene planeado para los próximos años, especialmente en el ámbito de la aviación y el turismo.
Un cambio necesario en la conectividad
Para la mayoría de los mortales, viajar a Groenlandia parece más obra de un gordo Barry Allen que de un plan de vacaciones real. ¡Suerte si logras encontrar un vuelo a un precio razonable! La realidad es que hoy en día, las conexiones aéreas son un verdadero dolor de cabeza. Puede que el paso más fácil sean los cruceros, pero si no tienes un alma de marinero, es probable que prefieras la opción de volar.
Hasta hace poco, la única manera de llegar a la capital, Nuuk, era volar a Kangerlussuaq o Narsarsuaq primero, y luego hacer un transbordo. Y aquí es donde el nuevo plan comienza a tomar forma. En noviembre, Nuuk abrirá su propio aeropuerto internacional. Vamos, por fin podemos dejar de hacer malabares para llegar a una isla que parece sacada de una película de Marvel.
¿Y si tuvieses que elegir entre un vuelo directo o esperar en el aeropuerto?
Imagina que estás en el aeropuerto y tienes que hacer transbordo, viendo cómo tu vuelo a Nuuk se llena de niños gritando y padres estresados. ¿Te gustaría eso? No creo que sí. Groenlandia entiende esto, y por eso se ha decidido a construir más aeropuertos. Se espera que las instalaciones de Ilulissat y Qaqortoq se abran antes de 2027. Eso significa que, si todo sale como se planea, puedes llegar a la mayoría de los rincones de Groenlandia en menos de hora y media. Suena bien, ¿verdad?
Un puerto de entrada a nuevas experiencias
Ahora que tenemos más opciones para volar, empecemos a hablar del atractivo del lugar. Aunque algunos puedan pensar que Groenlandia es solo un gran cubito de hielo, en realidad, la isla tiene mucho más que ofrecer que solo glaciares y auroras boreales. Además de la fantástica fauna, como los famosos ursos polares y las ballenas, los turistas pueden disfrutar de actividades al aire libre como buceo en aguas árticas e incluso paddleboarding.
Un destino de paisajes asombrosos
He tenido la fortuna de ver algunos destinos increíbles en mis viajes. Sin embargo, ninguna de esas experiencias se compara con ver el Hielo de Ilulissat. Entrar en la perspectiva de un iceberg rompiéndose con un estrepitoso crujido es una experiencia que, seamos honestos, no tiene precio. En el momento en que sucede, te das cuenta de que no solo estás presenciando la belleza de la naturaleza, sino que eres un mero espectador de algo realmente impresionante.
Visit Greenland: la puerta de acceso al turismo
Para impulsar su atractivo turístico, Groenlandia ha creado Visit Greenland, una plataforma de promoción que espera atraer aún más a los visitantes. Según un informe de la BBC, el año pasado la isla recibió a más de 140,000 visitantes internacionales, lo que representa un aumento notable en comparación con años anteriores. A medida que el turismo internacional se recupera de la pandemia, Groenlandia está decidido a marcar su huella en el mapa turístico global.
Pero, a pesar de esta creciente popularidad, Groenlandia no quiere que su entorno se vea comprometido. La isla está aprendiendo de los errores de otros destinos que se frustraron al no poder mantener un equilibrio entre el turismo y la calidad de vida de sus residentes.
El equilibrio entre el turismo y la vida local
Uno de los grandes desafíos a los que se enfrenta Groenlandia es cómo atraer turistas sin causar un caos paso a paso. Aquí es donde comienza la responsabilidad. Con la preocupación por el cambio climático y la sostenibilidad en el centro de la conversación actual, es vital que Groenlandia planifique su crecimiento de manera responsable.
Es cierto que muchos residentes están contentos con la llegada de nuevos turistas, que pueden traer dinero y oportunidades. Pero, al mismo tiempo, hay voces que advierten del peligro de perder su identidad cultural y su calidad de vida. En este sentido, las autoridades groenlandesas han decidido implementar un enfoque equilibrado: atraer turistas, pero de manera responsable.
Moratorias y protestas
A diferencia de muchos destinos turísticos, que a menudo solo ven el lado positivo del turismo, Groenlandia está tomando medidas activas para asegurarse de que su creciente popularidad no se convierta en un arma de doble filo. Están implementando moratorias sobre nuevos proyectos turísticos para estudiar su impacto y posibles consecuencias. Esto es algo que deberíamos ver más a menudo en otros destinos que sufren de un “turismo masivo” descontrolado.
Cómo las nuevas conexiones cambiarán la economía
Los planes de expansión de la infraestructura no son solo una cuestión de alcance turístico; también tienen implicaciones económicas. Al abrir nuevos aeropuertos y facilitar la conexión con lugares como Copenhague y Nueva York, se espera que esto disminuya los costos logísticos, lo que abrirá las puertas no solo al turismo, sino a otras industrias, como la pesca.
Una mirada al futuro
Lo que realmente me entusiasma de este cambio es su potencial para transformar la economía groenlandesa. La temporada alta de turismo puede traer muchos beneficios económicos, pero también podría abrir nuevas formas de comercio y exportación. United Airlines ya está planeando ofrecer vuelos directos desde Nuuk a Nueva York dos veces por semana durante la temporada alta.
Esto podría ser el primer paso hacia la exportación de productos locales, como el pescado fresco, abriendo la puerta a aún más oportunidades de negocios. Y si hay algo que sabemos sobre la población local es que tienen una rica cultura que presenta muchas más posibilidades de desarrollo, siempre y cuando se haga con respeto y cuidado.
Aprendiendo de otros destinos
A veces, un nuevo enfoque significa aprender de otros. Groenlandia parece estar en esa senda. Según Naaja Nathanielsen, responsable del área de Comercio, Negocios y Recursos Minerales, están observando cómo el turismo ha afectado a otros países. Ella menciona que Islandia ha experimentado un crecimiento turístico explosivo en la última década, pero también ha enfrentado desafíos relacionados con la infraestructura y el impacto ambiental.
Con suerte, Groenlandia evitara el camino accidentado que ha recorrido su vecino. La isla ha aprendido de las lecciones de otros destinos y busca no repetir los mismos errores.
Mirando hacia adelante
Como final del trayecto, me pregunto: ¿Cómo será Groenlandia dentro de cinco o diez años? Con nuevos aeropuertos, un enfoque más responsable y una mayor disposición para recibir a los turistas, podría muy bien convertirse en una sensación de viaje. Groenlandia se está preparando para dar la bienvenida a los viajeros de todo el mundo, y si sigues mis pasos, no querrás perderte la oportunidad de ser parte de su viaje.
En conclusión, Groenlandia no solo está procurándose una entrada en la lista de destinos turísticos, sino que está tratando de transformarse en un destino que ofrezca una experiencia auténtica y respetuosa para los visitantes y los residentes. Así que, si tienes un espíritu aventurero, pone esa mochila lista; Groenlandia te está esperando con los brazos abiertos y una nueva pasarela de aterrizaje lista para demostrar que, a veces, las más grandes maravillas se encuentran en los lugares más helados.