¡Hola, amantes de la mixología, exploradores de la vida nocturna y curiosos en busca de la próxima gran tendencia en bares! Hoy vamos a sumergirnos en un lugar que ha capturado la atención no solo de los habitantes de Ciudad de México, sino del mundo entero. Handshake Speakeasy ha sido nombrado como uno de los mejores bares del mundo en el ranking anual de The World’s 50 Best Bars, y la verdad, yo no pude resistirme a la tentación de investigar qué lo hace tan especial. Así que, prepárense para una mezcla de anécdotas, risas y un viaje en el tiempo que nos lleva hasta los años 20.
Un lugar escondido: la búsqueda del bar perfecto
Imagina esto. Es una noche cualquiera y decides salir con amigos a disfrutar de un buen cóctel. Te pasas unos minutos buscando estacionamiento, esquivando a la multitud en la zona más de moda de la ciudad. Pero al llegar al barrio de la Zona Rosa, entre un café que parece más bien un hospital y un supermercado que no es precisamente el sitio más glamuroso, te topas con un portal que ni siquiera tiene un letrero que lo anuncie. Solo un discreto número 13. ¿Vas a pasar de largo? ¡Oh, no! La aventura acaba de comenzar.
Cuando finalmente cruzas la puerta, es como si entraras en una dimensión alternada. Un pequeño recibidor oscuro te da la bienvenida y, tras una cortina que parece estar custodiada por una mística camarera, te recibe un coro de “¡Bienvenidos!”. En este momento, ya te das cuenta de que has encontrado algo especial. En Handshake Speakeasy, el ambiente se siente cargado de historia, estilo y una pizca de misterio, ¿debería salir con un sombrero de fedora y un cigarro en la mano?
Una atmósfera intrigante: el diseño del bar
Al entrar al bar, la primera impresión que me dio fue “esto se siente como una película de Hitchcock”. Un lugar íntimo, donde la luz tenue pinta la escena perfecta. Sofás de cuero negro, una barra de bar amplia y un espejo adornado que se siente como si hubiera visto secretos inimaginables a lo largo de los años. El espacio es relativamente pequeño, pero eso no le quita encanto. Al contrario, hace que cada conversación suene más significativa, cada brindis sea más especial.
¿Alguna vez has estado en un bar donde te sientes observado, pero no de una forma incómoda? Aquí, el personal se mueve con la gracia de un ballet, llenando tus copas antes de que puedas preguntar qué hay en la carta. Aunque a veces la atención puede sonar abrumadora, todos esos pequeños detalles te hacen sentir como un rey o una reina por una noche.
Innovación en la coctelera: cócteles que cuentan historias
Espectacular es la palabra que me vino a la mente cuando vi la carta de cócteles diseñada por el ingenioso Eric Van Beek. Cada bebida no es solo un trago, sino un cuento que invita a ser explorado. Uno de los cócteles más impactantes es el Once upon a time in Oaxaca, que se presenta con una decoración de lana de acero prendida fuego. ¿Alguien más está pensando en subir eso a Instagram? #AmantesDelCóctel.
A diferencia de lo que podrías imaginar, el cóctel no tiene nada que ver con la pirotecnia, aunque ciertamente aporta un efecto visual impresionante. Lo que importa aquí es la calidad del mezcal utilizado y cómo el fuego añade una experiencia sensorial que va mucho más allá del sabor, un recordatorio de que lo que importa no es solo el resultado, sino también el proceso.
La experiencia de beber en Handshake Speakeasy
Cada visita al Handshake Speakeasy tiene su propia duración: una hora y media. Es como un pequeño reloj de arena que se da la vuelta en tu mente. Con bebidas que danzan entre los 200 y 300 pesos (alrededor de 10 a 15 euros), te ves obligado a elegir sabiamente qué cócteles vas a probar. Pero aquí está la trampa: cada sorbo te deja deseando más. ¿Por qué limitarnos a solo uno? Tal vez dos, tal vez tres. ¡Quien sabe!
Cuando hablé con Nandini y Anya, dos amigas de Estados Unidos que estaban en un viaje de estudios, su entusiasmo era contagioso. “¡Esto se siente auténtico!”, exclamó Anya, mientras un camarero le traía otra ronda de cócteles. “En otros lugares, solo es una excusa para venderte una bebida cara. Aquí, realmente capturan la esencia del speakeasy”.
Un vistazo al pasado: la historia de los speakeasy
Ah, el concepto de los speakeasy, esos gloriosos bares clandestinos de Estados Unidos durante la era de la Prohibición. En aquellos días, un trago era un acto de rebelión. Las casas de la cerveza y otros lugares de reunión clandestinos florecieron bajo el manto de la oscuridad, y nombres como Al Capone fueron sinónimos de esa era. Pero hoy, Handshake y sus contemporáneos nos ofrecen una experiencia menos peligrosa y más estilizada.
Lo que se nota, sin embargo, es que aunque los tiempos han cambiado, la esencia de un lugar secreto que desafía las normas sociales aun vive. ¿Quién no disfruta de un poco de osadía? La posibilidad de abrir una puerta y descubrir un mundo oculto detrás es simplemente irresistible.
Un equipo diverso y apasionado
Uno de los elementos más fascinantes es el equipo detrás de la barra. Con 34 empleados, las historias personales son tan variadas como las bebidas ofrecidas. Conocí a Pamela, una abogada convertida en bartender que disfruta de su nueva vida a pesar del desgaste físico del trabajo nocturno. Y Lonchi, que vino de la paradisíaca isla de Curazao, agregó un toque internacional al lugar. Estos jóvenes no solo son profesionales; se sienten genuinamente apasionados por lo que hacen. Ser bartender aquí no es solo servir tragos; es crear conexiones humanas.
Es realmente conmovedor ver la pasión brillar en sus ojos cuando hablan sobre su trabajo. Su dedicación y amor por el arte de la mixología se sienten no solo en cada cóctel, sino en la forma en que interactúan con cada cliente. ¿Quién no quiere ser parte de esa energía?
Reflexiones finales y consejos para los futuros visitantes
Así que, ¿vale la pena visitar Handshake Speakeasy? Si buscas una experiencia visual, sensorial y social, la respuesta es un rotundo sí. Pero, a medida que planifiques tu visita, ten en cuenta que la exclusividad es parte del atractivo. Así que asegúrate de hacer tu reserva con anticipación, a menos que disfrutes de la intriga del qué pasaría si….
Por último, les dejo un consejo: ven con la mente abierta, dispuestos a disfrutar del momento y, sobre todo, ¡no olviden su cámara! Quiero decir, ¿quién no quiere dejar un rastro digital de su experiencia en el mejor bar del mundo? ¿Tal vez un brindis por la vida, la amistad y esos momentos que hacen que todo lo demás parezca trivial? ¡Aquí, cada cóctel cuenta una historia!
Y tú, ¿estás listo para abrir la puerta del número 13 y explorar el mundo clandestino pero vibrante de Handshake Speakeasy?
Recuerda, las mejores experiencias en la vida a menudo comienzan con un poco de misterio y un toque de aventura. ¡Salud!