¿Alguna vez has visto a tu perro durmiendo plácidamente y te has preguntado qué estará soñando? Tal vez lo imaginas persiguiendo pelotas o corriendo tras ardillas en el parque. La verdad es que el mundo de los sueños de nuestros amigos de cuatro patas es tan enigmático como intrigante. Sin embargo, desentrañar estos misterios no es tan sencillo como parece. ¡Así que acompáñame en este viaje onírico donde exploraremos qué hay detrás de los sueños de los perros!
La ciencia detrás del sueño canino
Antes de embarcarnos en una exploración de los sueños de los perros, es vital entender cómo funciona su sueño. A diferencia de los humanos, que suelen dormir en un solo bloque largo por la noche, los perros tienen un patrón de sueño más fragmentado. Investigaciones han demostrado que los perros pasan el 44% de su tiempo despiertos, 21% en un estado de somnolencia y el 35% durmiendo. Si cuentas la proporción de sueño REM (movimiento ocular rápido), que representa un 12% de su tiempo total de sueño, nos damos cuenta de que, aunque duerman menos que nosotros, también tienen un mundo onírico vibrante.
¿Los perros sueñan como nosotros?
Las preguntas que surgen son múltiples y muy interesantes, como el famoso “¿existen los sueños en la vida de nuestros peludos amigos?”. La respuesta es un rotundo sí. Según los especialistas en comportamiento animal, incluyendo a la reconocida psicóloga Deirdre Barrett de la Universidad de Harvard, los perros soñan. Sin embargo, y esto es importante, no se debe caer en el especismo: sus sueños son distintos a los nuestros.
Imagina que, en lugar de un glorioso centro comercial lleno de ropa y juguetes de última moda, ellos sueñan con vastos campos donde pueden correr libres, o bien, con una bolsa de golosinas que les espera en la cocina. ¿Te imaginas? Para ellos, el olfato es el rey, lo que es probable que haga que sus sueños estén repletos de olores vibrantes. A diferencia de nosotros, que en nuestros sueños visualizamos o nos enfocamos en rostros y lugares, sus experiencias oníricas se centran en aromas y, claro, en esos momentos especiales vividos junto a sus dueños.
La hipótesis de continuidad
Uno de los pilares más interesantes sobre el entendimiento de los sueños caninos es la hipótesis de continuidad, propuesta por la psicóloga Barrett. Este concepto sostiene que los sueños reflejan nuestras experiencias diarias. Para un perro, esto podría significar que sueña con sus juegos favoritos, esos momentos en que se agita ante un juguete o esos paseos infinitos y alegres que han tenido con sus dueños. ¿Acaso no es entrañable pensar que estos momentos se convierten en un manto de buenos sueños?
Recuerdo una vez que fui a casa de un amigo que tiene un hermoso labrador llamado Max. Mientras caminábamos en su sofá, vi a Max durmiendo, luego de haber jugado todo el día. De repente, empezó a “correr” mientras dormía, moviendo las patas y emitía unos pequeños gemidos. “Seguro está soñando que persigue una paloma”, dije riendo, mientras mi amigo asentía con la cabeza. Aquí está la magia de los sueños caninos: por un momento, parecía que Max estaba en un mundo paralelo lleno de aventuras.
La actividad cerebral en el sueño
Cuando un perro entra en la fase de sueño de ondas lentas, está experimentando el descanso profundo que todos necesitamos para procesar la información del día. A medida que se desplaza hacia la fase REM, su cerebro se activa y es en este período donde se pueden observar comportamientos que sugieren que están soñando. Sus ojos se mueven rápidamente bajo los párpados, y sus cuerpos comienzan a moverse. Este fenómeno es comparable a lo que ocurre en los humanos, donde se dice que los sueños más vívidos tienen lugar durante esta fase.
El reconocido psicólogo Stanley Coren realizó un estudio publicado en el Journal of Physiology and Behavior y demostró que la actividad eléctrica del cerebro de los perros durante el sueño presenta patrones que son, sorprendentemente, muy similares a los de los humanos. ¡Es como si ambos compartiéramos una especie de “sueño colectivo”!
Más sobre el mundo onírico de los perros
¿Qué sueños tiene un perro?
¡Buena pregunta! Si seguimos los indicios de Barrett, es razonable pensar que los sueños de un perro podrían girar en torno a las experiencias que les brindan más placer, como los paseos en el parque, los juegos con su dueño, o incluso esos momentos en que se engullen apurados su comida favorita. Además, los perros también tienen recuerdos de experiencias difíciles o estresantes, como un viaje al veterinario. ¿Quién no ha visto a su perro tener pesadillas?
Recuerdo que una vez vi a una perra en un festival de perros a la que le gustaba «cazar» en su sueño. En un momento, se llenó de ladridos y saltos en su suave cama. Pude ver a su dueño preocupado, pero ¡puf!, al final sólo era Lola persiguiendo su sueño.
Las pesadillas caninas
Otra parte oscura del apasionante universo onírico de nuestros compañeros perrunos son las pesadillas. Al igual que los humanos, los perros pueden experimentar sueños perturbadores, especialmente si han tenido experiencias traumáticas. Si un perro de la calle ha sido maltratado o abandonado, es probable que pueda revivir esos recuerdos durante su sueño, manifestando acciones como ladrar, moverse inquietamente, o incluso gritar.
Si alguna vez presencias esto, es esencial no despertar al perro de forma brusca. Al igual que nosotros, pueden sentirse desorientados y asustados. Mejor calma al perro con palabras suaves y tu presencia reconfortante. Recientemente leí que algunos veterinarios sugieren crear un ambiente seguro y tranquilo para minimizar estos episodios.
¿Influyen el tamaño y la edad en los sueños?
En cuanto a la pregunta de si el tamaño y la edad realmente juegan un papel en el contenido de nuestros sueños, la respuesta es que sí, sí lo hacen. Los perros más grandes tienden a tener ciclos de sueño más largos y pueden experimentar episodios de sueño REM cada 60 a 90 minutos. Por otro lado, las razas pequeñas tienden a soñar más frecuentemente, alrededor de cada 10 minutos, ya que su actividad cerebral es mucho más dinámica durante el sueño.
Los cachorros, por su parte, pasan por una cantidad asombrosa de ciclos de sueño, a veces durmiendo hasta 18-20 horas al día. ¡Imagina vivir la vida de un cachorro! Pasar tus días jugando y comiendo, seguidos por intensos momentos de sueño. La vida perruna es sin duda una envidia.
La ciencia sigue avanzando
La legión de científicos continuos en su exploración del sueño canino incrementa. Con cada nuevo hallazgo, se amplían nuestras perspectivas sobre los hábitos y comportamientos de nuestros perros. Aún quedan muchas preguntas sin respuesta, como ¿qué ocurre realmente en la mente de un perro mientras duerme? Solo podemos especular y disfrutar de la idea de que viven sus propias historias mientras descansan.
Sin embargo, existe una conclusión clara: los sueños de nuestros perros son más que simples visiones pasajeras. Son ecos de sus experiencias diarias, una recopilación de amor, alegría, y quizás un poco de metedura de pata en el camino.
Reflexiones finales
Así que la próxima vez que veas a tu perro durmiendo, piensa en la posible aventura que está viviendo en su mundo onírico. Desde perseguir pelotas hasta disfrutar esos pequeños momentos que tanto les gustan al lado de sus seres queridos, cada ladrido y movimiento trae un toque de magia a nuestras vidas.
Después de todo, un perro no solo es nuestro mejor amigo; también es un soñador, un aventurero, y probablemente, un eterno niño en el corazón. Y si logran soñar, ¿quiénes somos nosotros para interrumpir su travesía nocturna?
Así que, a disfrutar de esos suaves ronquidos y esos encantadores movimientos. Porque en el fondo, nuestros perros tienen tanto que enseñarnos, incluso cuando están en la tierra de los sueños.
Referencias:
- Coren, S. “Baseline sleep-wake patterns in the pointer dog.” Journal of Physiology and Behavior (1977).
- Owczarczak-Garstecka, S. C., & Burman, O. H. O. “Can sleep and resting behaviours be used as indicators of welfare in shelter dogs?” PLOS One (2016).
- Bunford, N. et al. “Differences in pre-sleep activity and sleep location are associated with variability in daytime/nighttime sleep electrophysiology in the domestic dog.” Scientific Reports (2018).
- Bódizs, R. et al. “Sleep in the dog: comparative, behavioral and translational relevance.” Current Opinion in Behavioral Sciences (2020).
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