Hablar de Mercadona es como hablar de la mejor tapa en el bar de la esquina; siempre hay algo nuevo y emocionante que contar, y cada vez parece mejor. Pero si este superhéroe del comercio ha capturado nuestra atención durante tanto tiempo, es porque su historia evoluciona constantemente. En este arranque del 2025, estamos viendo un movimiento que promete generar mucho ruido: un goteo de salidas en su comité de dirección.
El adiós de los grandes: desmantelando un equipo de confianza
Este 2 de enero comenzó a sonar una alarma que nos hizo levantar las cejas. Elena Tejedor, una figura clave en el equipo de Mercadona, anunció su salida. Para los que han seguido la trayectoria de la empresa, su renuncia fue un baldazo de agua fría. Pero el trueno no terminó ahí. El martes siguiente, otro peso pesado de la compañía, Rafa Berrocal, decidió colgar la chaqueta.
¿Qué significa esto? Bueno, Berrocal no solo ha sido uno de los más cercanos colaborantes de Juan Roig, sino que ha estado en el comité de dirección durante la increíble cifra de 18 años. Uno podría pensar que se estaba preparando para recibir el Globo de Oro de la lealtad corporativa. ¡¿Quién se va de un lugar donde ha estado casi dos décadas?! A veces, la vida te empuja a dar un paso atrás, y él simplemente eligió el momento adecuado.
Esto abre una serie de preguntas: ¿qué motivó las salidas? ¿Es un reflejo de las nuevas direcciones que quiere tomar Mercadona? ¿Estamos ante un cambio generacional en el estilo de liderazgo, o simplemente se echa mano de una limpieza radical para hacer espacio a lo nuevo?
Manejando un comité en transformación
A medida que me sumerjo en estos cambios, no puedo evitar recordar mi primer trabajo, donde la gerencia decidió que era «hora de una nueva dirección». Un día estábamos todos juntos en la oficina, y al día siguiente, cada uno se preguntó si su puesto estaba a salvo. Las reacciones oscilan entre la ansiedad y la oportunidad, y estoy aquí para decirte que es una montaña rusa emocional.
Regresando a Mercadona, este comité de dirección, que en algún momento fue la joya de la corona de Roig, ahora se ha reducido a solo seis miembros. La pregunta que flota en el aire ahora es: ¿por qué?. La estrategia de Roig parece apuntar a la integración de varios departamentos en una misma dirección general. En términos simples, uniendo fuerzas para ser más eficientes, algo que suena bien hasta que te das cuenta de lo inminente que es el cambio.
Pero no todo está perdido; los nuevos líderes en este reducido comité incluyen caras que, jugando a «¿quién ha estado más tiempo aquí?» tienen más de 15 años de experiencia: Paco Espert, José Jordá, y Héctor Hernández. Me gusta imaginas que, junto a ellos, hay un perro metafórico que lame las manos de los retrocesos de la compañía, brindando compañía en los momentos de incertidumbre.
Pérdida de un legado: ¿qué significa esto para Mercadona?
La salida de figuras emblemáticas como Rafa Berrocal no es solo un cambio en el nombre de la tarjeta personal; es el cierre de un capítulo, un descarte de un libro lleno de historias. Mercadona llegó a ser lo que es hoy gracias a una base sólida de líderes que se comprometieron a mantener el estándar de calidad que todos amamos. Pero aquí estamos, viendo cómo la cantidad de miembros del comité ha disminuido de 15 a 6 desde 2021. Es como una especie de «Hunger Games» de ejecutivos.
La empresa ha querido manifestar su gratitud a estos exmiembros, claro, pero su ausencia podría generar un vacío notable en la gestión. Cuando uno ha sido parte del engranaje durante tanto tiempo, es normal preguntarse: ¿quién llenará ese vacío?
El nuevo comité: un equipo más pequeño, pero resiliente
Si al final de toda esta situación hay algo positivo, es que el nuevo comité parece estar compuesto por un equipo comprometido y experimentado. Paco Espert, que ahora asciende a la dirección general de compras y prescripción, ha sido un pilar en la estrategia de productos de Mercadona. Con él a la cabeza, podemos esperar un enfoque renovado en la oferta de productos que, si bien puede no tener al nivel de Berrocal, sin duda tiene su propio potencial.
Por otro lado, José Jordá se enfrenta a la tarea de integrar recursos humanos con operaciones en las tiendas. Una tarea titánica si me preguntas, pero qué hermoso sería ver una sinfonía entre el bienestar de los empleados y la experiencia del cliente.
Y luego tenemos al solitario sirviente de números, Héctor Hernández, que no solo lleva la contabilidad, sino que ahora también maneja las relaciones institucionales. ¿Existen superhéroes en la vida real? Puede que tengamos uno en Hernández.
El comité de dirección: una especie de familia
Una característica interesante de Mercadona es su junta directiva, que siempre parece tener un toque familiar. Si pensabas que en la cena navideña de tu familia se desataba el drama, imagínate estos ejecutivos hablando sobre política empresarial. Juan Roig, su esposa Hortensia Herrero, y sus hijas componen la cúpula del poder. Y no hay nada como un título de “presidenta de la junta de accionistas” para poner los nervios de punta en una reunión.
Aun así, este esquema familiar implica también que el cambio generacional no solo se está dando en la dirección de las operaciones, sino también en la cultura empresarial. ¿Estaremos viendo florecer un nuevo entorno de trabajo, donde el liderazgo joven y fresco haga erupción?
La opinión de los empleados: un termómetro del clima organizacional
No podemos hablar sobre Mercadona sin considerar la voz de sus empleados. Después de todo, son ellos quienes están en primera línea enfrentándose a clientes, gestionando estantes y aprendiendo sobre stock. Según algunas fuentes, hay una apreciación general sobre la adaptación a los cambios, aunque a algunos les asustan los nuevos giros.
Recuerdo mi primer día en el trabajo y cómo sentí la adrenalina de lo desconocido. Podrías decir que había guiños de incertidumbre en el aire, y para algunos, podría ser un espectáculo seguirle el ritmo a estos cambios. La preocupación por perder el “savoir faire” de un exmiembro del equipo está a la vista, pero también hay una oportunidad para que nuevas ideas florezcan y se casen con la tradición.
Mirando hacia el futuro: ¿qué podemos esperar?
La reciente reestructuración de Mercadona marca un nuevo camino hacia adelante. Con un comité más pequeño pero experimentado, hay esperanza de que la compañía pueda concentrarse en sus valores fundamentales. La decisión de integrar varios departamentos en uno solo sugiere un enfoque más ágil y una mejor adaptabilidad a las demandas del mercado.
Sin embargo, no estaría siendo honesto si no dijera que también se siente una pizca de nervios a medida que el barco se sacude en estas aguas desconocidas. Pero, al final del día, ¿no es eso parte de la esencia de la evolución empresarial? Nos aventuramos en un nuevo año con incertidumbre pero también con un rayo de esperanza, mirando hacia el futuro con la promesa de innovaciones y cambios.
Reflexión final: un viaje lleno de sabores
Mirar mermar el comité de dirección de Mercadona es un recordatorio de que la vida en el empresarial es un camino lleno de curvas, remolinos y, a veces, salidas inesperadas. Mientras los directivos echan la vista atrás, también deben mirar hacia adelante y abrazar lo que viene. Con nuevas lecciones de la historia y experimentos en el camino, el futuro parece vibrante.
Así que, la próxima vez que te encuentres en la fila de la caja de Mercadona, piensa en todo el calor y la pasión que hay detrás de esa bolsa de la compra. Quizás una simple compra de alimentos se convierte en una experiencia llena de historia, emoción y aspiraciones. Porque, amigos, al final del día, cada cambio trae consigo la oportunidad de mejorar y reinventarse. ¿Y quién no quiere un poquito de eso en su vida?