Imagínate esto: estás a bordo de un vuelo transcontinental, disfrutando de tu película favorita y saboreando ese snack que parece más aire que auténtico alimento, cuando de repente, ¡bum! Una turbulencia te saca de tu estado de trance. Pero en lugar de entrar en pánico, recuerdas que has leído que volar en la parte trasera del avión te da más probabilidades de sobrevivir a un accidente. ¿Es cierto eso o solo un mito más que nos contamos para dormir mejor por las noches? Vamos a desglosar este tema mientras nos reímos un poco (o tal vez no) sobre los temores que muchos tenemos al volar.
El contexto: accidentes recientes en la aviación
A principios de enero de 2025, dos accidentes aéreos llamaron la atención a nivel mundial: uno involucró a Azerbaijan Airlines y otro a Jeju Air. Como suele ser el caso en tales eventos, comenzaron a revivir viejos mitos sobre la seguridad en los aviones.
La premisa es simple: según algunos reportes, se ha afirmado que los supervivientes han estado en la parte trasera del avión. En el caso del vuelo de Azerbaijan Airlines, los 29 supervivientes se encontraban efectivamente en la sección trasera. Así que podríamos pensar: «¡Genial! Nos vamos a la parte trasera la próxima vez que volamos». Pero antes de sacar conclusiones apresuradas, profundicemos un poco más al respecto.
Mitos populares sobre la seguridad en los aviones
El mito de los asientos traseros
Como mencioné, los reportes de la sección trasera del avión parecen corroborar una vieja creencia de que, en caso de accidente, estos asientos ofrecen una mayor tasa de supervivencia. Pero, ¿es esto realmente confiable o deberíamos tener una dosis de escepticismo? En realidad, esto puede deberse a la física del impacto. La parte delantera del avión tiende a recibir el mayor daño en colisiones frontales. Entonces, podría ser que los sobrevivientes en la parte trasera simplemente estén allí porque esa sección permaneció intacta.
El mito de los asientos intermedios
Otros argumentan que los asientos en la sección media, cerca de las alas, son los más seguros. Esto se basa en la idea de que el centro de gravedad del avión ofrece mayor estabilidad durante las turbulencias. Aunque esto es cierto, la proximidad a los tanques de combustible podría ser un riesgo, y además, esta área suele tener acceso más rápido a las salidas de emergencia.
Aquí surgen mil y un preguntas: ¿realmente puedo confiar en estos mitos? ¿Debería cambiar siempre mi elección de asiento? Antes de tomar decisiones drásticas, pensemos en cómo la ciencia y los expertos realmente ven este tema.
La ciencia detrás de los asientos en el avión y la tasa de mortalidad
Un estudio reciente analizó los registros de accidentes aéreos de los últimos 35 años en Estados Unidos. Mientras que aquellos en el tercio trasero del avión tenían una tasa de fatalidad del 32%, los del medio y delantero se situaban en 39% y 38% respectivamente. Pero aquí es donde se pone interesante: la sección central del tercio trasero mostró la menor tasa de fatalidad, solo un 28%. Todos estos números superiores a los de mi calculadora cuando intenté hacer cuentas con mis gastos de vacaciones, pero eso es otro tema.
Sin embargo, profundizando aún más, hay investigaciones recientes que señalan que no existe un «asiento más seguro» de manera universal. Ed Galea, un experto en seguridad aérea, menciona que la supervivencia depende esencialmente del tipo de accidente, y no se puede generalizar.
Evacuación: la clave para la supervivencia
La rapidez en la evacuación es, en realidad, la mayor clave para sobrevivir a un accidente aéreo. Los aviones modernos pueden ser evacuados en 90 segundos, pero, oh sorpresa, el pánico puede convertir esa proeza en una tarea que parece eternizarse. ¿Alguna vez has intentado salir apresuradamente cuando una alarmita comienza a sonar? Seguro que es un espectáculo digno de ver.
Galea también apunta un dato interesante: aquellos pasajeros situados dentro de las cinco filas cercanas a una salida tienen más probabilidades de sobrevivir. ¿Y quién puede culparnos por querer estar más cerca de la salida en un atasco monstruoso?
Tips para aumentar tus probabilidades de supervivencia
- Atención a las instrucciones de seguridad: A veces, nos reímos de esos videos demostrativos, pero puedes estar seguro de que te salvarán la vida.
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Familiarízate con las salidas de emergencia: Al abordar, échenle un vistazo a esas salidas. Familiarizarse con el entorno en el que estás puede ser fundamental.
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Viajar en grupo: Tener a alguien más cerca es siempre más reconfortante.
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Mantén el calzado puesto durante despegues y aterrizajes: Puede parecer insignificante, pero esto puede marcar la diferencia si necesitas evacuar rápidamente.
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La famosa «descarga cognitiva»: Establece un plan mental sobre cómo evacuar. Puede que pienses que esto suena un poco a ciencia ficción, pero créeme, tu mente te lo agradecerá.
El factor humano en la ecuación de supervivencia
Los recientes incidentes también han puesto en evidencia cómo el comportamiento de los pasajeros afecta las tasas de supervivencia. Muchas veces, las personas intentan recuperar su equipaje de mano, algo que puede ser extremadamente peligroso y dificultar la salida a otros. Si alguna vez has estado en un cine donde alguien se levanta en los momentos más cruciales, puedes imaginar el caos.
Geoffrey Thomas, otro experto en seguridad, subraya la importancia de dejar todo atrás y actuar rápidamente, siguiendo las instrucciones de la tripulación: «En una situación de crisis, tu equipaje no te ayudará a sobrevivir». Pero, aceptémoslo, ¿cuántas veces hemos visto a alguien en un vuelo creer que sus pertenencias son más valiosas que su propia vida? Es casi cómico y trágico a la vez.
La importancia de educar y preparar a los pasajeros
Al final del día, la clave de la supervivencia en un accidente aéreo no depende de la ubicación del asiento tanto como de estar atento y seguir las instrucciones de la tripulación. La baja frecuencia de accidentes fatales (solo uno entre 37,7 millones de vuelos en 2023) resalta aún más la importancia de centrarse en la preparación y la conciencia situacional.
La próxima vez que subas a un avión, considera lo siguiente: ¿realmente vale la pena cambiar tu asiento por un mito que puede que no sea válido? Puede que sea más prudente y, sobre todo, más seguro, simplemente prestar atención a esos invaluables anuncios de seguridad.
En conclusión, los aviones modernos son bastante seguros, y aunque volar puede ser una experiencia aterradora para algunos, es crucial tener en cuenta los hechos y no dejarse llevar por mitos que pueden generar más ansiedad que alivio. Así que la próxima vez que planees volar, recuerda que lo más seguro que puedes hacer es preparar tu mente para una evacuación, relajarte y disfrutar del viaje. Si hay algo que he aprendido de todas mis aventuras aéreas (y también de mis errores y tropiezos), es que, al final, ¡lo más importante es llegar a tu destino y disfrutar de tus vacaciones!