El Ibex 35, ese índice que a menudo parece un amigo tóxico que nunca deja de dar malas noticias, ha vuelto a hacer de las suyas. Imagina que estás en una montaña rusa y, de repente, el vagón se detiene en una caída abrupta. Eso es exactamente lo que ha experimentado en la última jornada, con un descenso del 0,6% que lo llevó a perder la cota de los 11.600 puntos. Hoy vamos a profundizar en lo que está pasando, pero no te preocupes, prometo que no será un artículo aburrido lleno de jerga financiera. Así que, abróchate el cinturón y acompáñame.

La tormenta financiera que vino del Congreso

Todo comenzó en el Congreso de los Diputados, donde la reforma fiscal destinada al sector bancario fue aprobada. Esto debería ser motivo de celebración, ¿verdad? ¡Erróneo! En lugar de eso, los bancos como Santander (-3,4%), Bankinter (-2,9%) y CaixaBank (-2,5%) decidieron que era el momento perfecto para empezar a perder dinero. Es como si tras recibir un regalo, decidieran empezar a romperlo inmediatamente. A veces me pregunto si los banqueros tienen un club secreto donde discuten cómo hacer llorar a los pequeños ahorradores.

Datos que hacen temblar

Las malas nuevas no se detienen ahí. El índice PMI de gestores de compras cayó a 48,1 puntos desde 50. ¿Qué significa esto? En términos sencillos, significa que la actividad económica está disminuyendo en la zona euro. En mi experiencia, cuando un amigo empieza a decir «no tengo ganas de salir» cada vez más seguido, siempre es señal de que algo no va bien. Y ese “algo” es la economía.

Este descenso agudiza los temores sobre la debilidad económica en la zona euro y eleva las expectativas sobre una posible bajada de tipos. A medida que las tasas de interés bajan, los márgenes del sector bancario se ven afectados. Así que sí, eso significa que nuestros amigos banqueros están en problemas, y, por otro lado, nosotros también. ¡Qué divertido!

El efecto dominó: un vistazo a las bolsas europeas

Al mirar hacia el horizonte europeo, encontramos que las Bolsas no se quedaron atrás en la fuga. El Dax alemán y el Cac 40 francés descendieron un 0,2% y un 0,4%, respectivamente. Y nuestro querido Mib italiano también tuvo un mal día, bajando un 0,6%. Todos parecen estar siguiendo el ejemplo del Ibex, como si se tratara de un baile sincronizado de mal tiempo.

Sin embargo, hay una pequeña luz en la oscuridad: el FTSE británico se desmarcó con una subida del 0,6%. A veces me pregunto si en el Reino Unido tienen un secreto que nosotros no conocemos. ¿Un buen té o quizás un poco de magia?

La montaña rusa de Asia y Wall Street

Si creían que en Asia todo era calma, se equivocaron. El Nikkei japonés subió un 0,84%, mientras que el Hang Seng hongkonés perdió un 1,8%. Mientras tanto, el Shanghai Composite se dejó un 2,9%. Es una locura, ¿no? Mientras unos disfrutan de la montaña rusa, otros intentan no vomitar en las curvas.

Y como si eso no fuera suficiente, Wall Street cerró en verde, con el Dow Jones subiendo un 1,06%. La vida es una montaña rusa, pero en Nueva York parece que han subido de nivel: ellos tienen un ascensor, mientras nosotros seguimos en la montaña rusa chirriante.

¿Qué hacen los expertos?

Las mentes brillantes de la gestora Federated Hermes han sido claras. Según ellos, las políticas del nuevo presidente Donald Trump (sí, él nuevamente) perjudicarán probablemente a la economía europea. Esto incluye tres áreas específicas: relaciones comerciales, aumento del gasto en defensa y un dólar estadounidense potencialmente fuerte. Parece que su presidencia será un ciclo de altibajos continuos.

Estaba pensando en toda esta situación y recordé cuando, durante un viaje a Londres, conocí a un grupo de inversores que siempre hablaban del impacto de las elecciones en el mercado. «No hay nada más seguro que una elección para hacer temblar el mercado», me dijeron con una risa nerviosa. Quizás sea momento de reiniciar la búsqueda de qué inversiones son menos volátiles que una montaña rusa.

Dicho esto, la incertidumbre también se siente en Latinoamérica, especialmente en México, donde los aranceles prometidos por el nuevo gobierno estadounidense son motivo de preocupación. ¿Qué tal preparar un buen café mientras miran las fluctuaciones de su moneda?

Claves para entender el futuro

Entre las múltiples variables que influyen en el futuro económico global, hoy también se discute la morosidad de las entidades bancarias en España, donde el Banco de España revelará datos este mes. Con toda esta información, los analistas se encuentran en un mar de incertidumbre, tratando de descifrar qué es lo que viene.

Además, ¿qué pasa con el petróleo y las materias primas? También son elementos cruciales que a menudo se olvidan en el viaje económico. Si hay algo que he aprendido es a estar preparado para lo inesperado. Ya sea un cambio de presidente o una crisis energética, es mejor tener un plan de respaldo, o al menos, una buena bolsa de palomitas para las malas noticias.

Reflexiones finales: ¿Qué podemos esperar?

Ahora, para aquellos que no quieren dejar que la negatividad les consuma, hay que recordar que la economía también tiene sus ciclos. Como cuando decides hacer dieta y la vida te trae una caja de donuts los días más difíciles. Siempre hay subidas y bajadas; el truco está en saber cuándo es el momento de saltar en la montaña rusa y cuándo aferrarte al asiento.

Los valores que más están subiendo son Cellnex (+2,5%), Solaria (+2%), y Acciona Energía (+1,5%). Mientras tanto, los gigantes bancarios están sufriendo caídas. Es como en una competencia de maratón, donde algunos corren rápido, y otros se retrasan en el camino.

Recuerda, amigo lector, que la clave en momentos de incertidumbre es mantenerse informado y, si es posible, con una buena capacidad de reírte en medio del caos. El Ibex 35 y los mercados son como el clima: cambian constantemente, y al final, todo se trata de saber cuándo sacar el paraguas y cuándo ponerse gafas de sol.

Así que, la próxima vez que veas un noticiero financiero y te llegue la sensación de que todo se viene abajo, recuerda que siempre hay un cambio alrededor de la esquina. ¡Hasta la próxima, y que tus inversiones sean menos volátiles que la imitación de un vuelo bajo la turbulencia!